- Hoooolaaaa fantasmitaaaa.
- Bfff... eres un pesado.
- ¿Por qué?
- Por llamarme fantasmita todo el rato.
- Pero si te encanta.
- Eso es lo que tú dices.
- Porque es lo que noto.
Nos quedamos en silencio.
- ¿Qué has hecho en estas dos semanas?
- He vuelto al hospital con mi hermano y un amigo ha venido a verme.
- Entonces estarás contenta.
- No creas... Esto de escucharle pero no poder decirle nada...
- Abrázame tú, porque yo quiero abrazarte pero no sé dónde estás.
Reí por su petición y lo abracé.
- ¿De verdad piensas que soy un imbécil, tonto, idiota, loco y feo?
- Por supuesto.
- Pues vaya novia estás hecha -dijo riendo.
- ¿Qué quieres hacer hoy?
- Si fueras una novia normal este sería el momento de alzar ambas cejas y mirarte pervertido ante esa pregunta.
- Ya... -dije algo apenada porque había dicho que yo no era normal. Y tenía razón.
- Eh, no te pongas triste. Que a mí me gustas tal y cómo eres, no quiero una novia normal.
Le besé en la mejilla.
- Eh, ¿qué ha sido eso?
- ¿Un beso?
- ¿En la mejilla?
Le dí un beso en los labios para que se callara y él sonrió.
- Así sí.
Los dos reímos.
- Eres tan caprichoso como un niño pequeño. Oye, ¿hoy qué día es?
- Lunes.
- ¿Y no vas a clase?
- ¿No ves lo malito que estoy? -dijo sonriendo.
- Kenneth, tienes que ir a clase.
- Jooo, ¿por qué no nos quedamos aquí?
- He dicho que a clase.
Le acompañé al instituto. Justo cuando estábamos entrando apareció Kath y besó a Kenneth.
- Kath... Lo siento... Ya te dije que no podía ser...
- ¿Pero por qué?
- Tú estás con Jade.
- Ya no, le he dejado. Después de lo que te hizo...
- Me alegro por ti, ahora podrás estar con alguien mejor.
- ¿Tú?
- Yo no puedo, Kath...
- ¿PERO POR QUÉ?
- Kath, la gente nos mira...
- ¿Y qué más da?
- Vamos a hablarlo a un sitio más privado...
- ¡Si no hay nada que hablar!
- Por favor...
- ¿No te gusto?
- No es eso...
- ¿Entonces?
- Yo ya estoy saliendo con alguien...
Kath se quedó callada, buscando la verdad en los ojos de Kenneth.
- Está bien... No te molestaré más... -la chica se disponía a marcharse pero Kenneth la tomó del brazo.
- Ey, no te enfades, por favor...
- ¡Déjame en paz!
- Kath, no quiero...
- Yo como una tonta pensando que querías algo conmigo...
- Pero podemos seguir siendo amigos, siempre lo hemos sido.
- Y yo siempre he aspirado a más...
- Kath, por favor...
- He quedado como una imbécil delante de todos -ahora ella lloraba.
- ¡Te dije que lo hablásemos en privado!
- Te había traido un regalo... -sacó un marco con una foto de los dos de su mochila. - Hoy hace seis años que nos conocimos...
Kenneth se quedó en silencio.
- Ni siquiera lo sabías...
Kath miró la foto un instante y después la estampó contra el suelo, rompiendo el marco en mil pedazos.
- No me hables -y se escabuyó entre la gente.
Kenneth veía cómo se marchaba.
- Lo siento... -le susurré.
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Invisible
Teen Fiction- ¿Ventajas de ser un semifantasma? -dijo con una bonita sonrisa. - Supongo que algo bueno tendrá que tener esto... - Bueno, nos hemos conocido, ¿no? NO COPIES, SÉ ORIGINAL ;)