- ¿Qué tal la radioterapia?
- Bfff... no sé si de verdad estará funcionando. Los médicos me han dicho que si no logran destruirlo así tendrán que extirparlo con cirujía.
Solo la idea me aterrorizaba. No podía perderlo.
- ¿Y esa maleta?
- Me voy con mi tío. Como solo me queda menos de un año para ser mayor de edad no vamos a ir a juicio por mi custodia. Mis padres no dirán nada porque saben que saldrán perdiendo.
- ¿Tu tío vive lejos?
- Que va, vive en este barrio, pero en el otro extremo.
Kenneth salió de la habitación con la maleta.
- ¿Y tus guitarras?
- El resto de mis cosas se las llevó mi tío ayer.
Cuando iba a salir por la puerta apareció la madre de Kenneth.
- ¿Adónde vas?
- Ya te lo dije ayer.
- ¿Y por qué no lo recuerdo?
- Porque en esos momentos no eras persona.
Su madre no contestó.
- ¿Y adónde me dijiste que ibas?
- Me voy a vivir con el tío John.
- ¿Con qué permiso?
- No tengo que pedirle permiso a nadie.
- A tus padres sí.
- Mis padres no ejercen de padres así que no tengo por qué pedirles nada.
- ¡No te irás a ninguna parte!
- ¡Suéltame! -Kenneth se zafó del agarre de su madre.
- ¡Pero soy tu madre!
- A mi madre la mataron estas pastillas -le susurró y le lanzó un bote de pastillas.
Su madre lo atrapó y se quedó mirando cómo su hijo se marchaba.
Una vez fuera noté cómo Kenneth casi cae al suelo. Le sujeté y le apoyé en la pared.
- ¿Te encuentras bien?
- Sí... solo es un mareo. En seguida se me pasa.
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Invisible
Teen Fiction- ¿Ventajas de ser un semifantasma? -dijo con una bonita sonrisa. - Supongo que algo bueno tendrá que tener esto... - Bueno, nos hemos conocido, ¿no? NO COPIES, SÉ ORIGINAL ;)