-Delay date prisa que llegaremos tarde por tu culpa.- grité mientras corríamos por las calles de Nueva York.
-¡Ya voy! ¡Ya voy!- dijo mientras intentaba ir lo más rápido posible con sus tacones nuevos. -Es que... me da mucha pereza.- dijo haciendo un leve puchero.
-¡Claro! Ahora te da pereza mover tu culo, pero ayer estabas diciéndome lo mismo a mí.- le reproché.
Delay frunció el ceño con desaprobación, pero en el fondo sabía que yo tenía la razón.
Nada más pisar las escaleras del instituto, me quedé de piedra. No me lo podía creer. Sentí que todo mi mundo se desmoronaba.
Retrocedí lentamente, me daba igual llegar tarde a clase, me sentía fatal.
-¿Alice, estás bien?- preguntó mi amiga mientras me ponía una de sus manos en mi hombro derecho.
No le pude contestar, mi mandíbula no se movía y mi voz me fallaba. Ella miró hacia delante y vió lo mismo que yo. No le hizo falta preguntarme más.
Delay intentó guiarme hasta el baño. Le costó un rato llevarme porque me iba tambaleando.
Cuando por fin llegamos, rápidamente se acercó a donde estaban los pañuelos y me acercó unos cuantos. Yo no podía parar de llorar.
Me dejé caer en el suelo, ya que mis piernas no me sostenían. Delay se acercó a mi y me dio un abrazo. Me recomfortó a pesar de que lo único que necesitaba en ese momento era borrar esos recuerdos. Esos en los que vi a Robbie besar a otra chica.
Cada vez que lo recordaba mi corazón se encogía. No recordaba haber sentido algo tan doloroso en mi vida. Aunque nunca me había gustado nadie tanto como me gustaba él. A pesar de que no nos hablábamos, cada vez que me miraba, que no eran muchas, me sentía extrañamente feliz. Y cuando le veía sonreir, se me paraba el corazón.
-Tranquila cariño, ya ha pasado todo- me dijo mi amiga acariciandome la cabeza lentamente con una mano, mientras que con la otra me agarraba fuertemente dándome un abrazo calido, como ella solo sabía dar.
-Delay.... él .... él... y ella.... ¿Cómo he podido ser tan estúpida?
-Tú no has sido nada estúpida cariño, pero tendrías que haber tenido en cuenta que después de tres años sin hablarle no estubiese disponible solo para ti.- me dijo mi amiga secandome una cuantas lagrimas que aun caian por mi delicada mejilla -¿Vamos? Creo que ya es hora de volvera clase, no quiero que estés triste, pero si no regresamos, nos caera una gorda y tampoco creo que escondiendote de Robbie vayas a hacer mucho.
-Sí, tienes razón. No puedo huir de él cada vez que le vea, no es lo correcto, a parte... Seguro que hay más chicos aparte de Robbie.
Esa última frase la dije con menos fuerza que la anterior, pero es la jodida verdad. Tendré que olvidarme de él... tarde o temprano.
Salimos del baño y la directora estaba en frente nuestro de brazos cruzados. Estaba dispuesta a cargar con toda la culpa si fuese a castigarnos, Delay no tenía la culpa de nada.
-Daros prisa, la clase acaba de empezar, yo ire con vosotras dos y dire que las había llamado, hasí no estarán en problemas. Y no llore más señorita Wonder, seguro que su amiga la ha estado apollando mucho- dijo con una gran sonrrisa.
Llegamos a clase y el profesor de química me miró con cara de pena. Al parecer aún tenía lágrimas cayendo por mis mejillas.
Al darme cuenta de esto, me las he quitado rápidamente con la manga de mi sudadera. Delay y yo, fuimos a nuestros respectivos sitios, al parecer no nos habíamos perdido nada interesante. El profesor de química estaba a punto de poner una de sus famosas películas que hizo de joven.
Robbie estaba sentado delante del todo, con uno de sus brazos por encima de los hombros de "su chica". No podí evitar verles y al hacerlo, me sí cuenta que Robbie no paraba de mirarme preocupado.
A los 15 minutos de estar recibiendo "clase", me llegó una carta de Robbie.
¿Qué es esto?- Pensé.
Para Alice:
¿Qué te pasa? No he podido evitar ver como tenias lagrimas, estoy preocupado por tí y no quiero verte triste. Así que en la hora del patio me gustaría verte en el gran árbol viejo y que me cuentes lo que te ocurre.
R.
Miré al frente encontrándome la mirada de Robbie sobre mí. ¿Como podría decirle que no con esos ojitos?
Asentí levemente consiguiendo una sonrisa en su rostro. Se dió media vuelta y volví a pasar su brazo por encima de "su chica".
Dios... ¿Cómo puedo ser tan estúpida? Ahora deberé inventarme algo o de lo contrario, me veré obligada a tener que confesarle mis sentimientos. Genial.
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¿POR QUÉ TÚ? [Reescribiendo]
FanfictionMe llamo Alice Wonder, tengo 18 años y soy estudiante del instituto Lakewood. Mi vida era bastante normal, junto a mis amigas Delay y Athena, pero un chico "ficticio" hizo que nuestras vidas tuviesen un giro de 180°. -Soy Peter... Peter Pan. [Esta h...