-Sofía, Dios mio, ¿por qué no me contestabas? Oh si, ya recuerdo, bueno. Me tenías preocupada, carajo, casí iba a tu casa a ver si no te habían secuestrado o yo que se -tomo aire y continuo- Lo siento si te asuste, pero tenía que decirlo, Vidales practicamente me obligo, me dijo que si no iba a decirte ese día, el vendría desde donde esta y te diría. Lo creo capas.
-¿Le contaste a Vidales sobre mi? Eso suena un poco patético, querido.
-¿Qué? Solo quería hablar con alguien sobre ello, y dado que estoy enamorado de mi mejor amiga no me quedaba nadie mas.
Me sonrojé fuertemente, había dicho la palabra con e.
-Si, aja. Este no es el tema del que quería hablar contigo, niño. Quiero hablar sobre la carta - trató de hablar pero lo interrumpí - Alto, si no lo digo ahora no creo que pueda decirlo de nuevo. Te quiero, Dios mio, no sabes cuanto. Amo tus chistes idiotas, tus malas jugadas de palabras, la forma en la que miras algo que amas. Quiero tener esto siempre, quiero dormir hasta tarde mientras vemos series, hablar por telefono en la madrugada mientras nos contamos todo, quiero tener nuestras bromas privadas, nuestros gestos sin sentido, nuestra platica del jueves a las 2:28 pm, porque esa es nuestra hora especial. Te quiero, amigo. Y no sabes lo feliz que me hace que tu lo hagas igual - sonreí con convicción, ese discurso me había salido bien.
Espere a que contestara y luego de un tiempo de no escuchar nada me preocupe.
-Hey, ¿sigues ahí?
-¿Puedes repetir desde "Quiero tener esto siempre..."
-¿Qué carajo estas haciendo?
-Duh, ¿qué no es obvio? Escribo las palabras de declaración de mi mejor amiga, repite.
-No voy a repetir, idiota. -bufé con disgusto- Era un discurso que me salio en el momento, ya ni me acuerdo que te dije- hable mientras tapaba la leche y la metía al refrigerador- aparte, ¿cómo no te lo aprendiste? Yo hasta enmarque tu carta y la colgue en mi cuarto -cosa que era mentira.
-Si, aja. Ya acabe de escribir, de todos modos. Gracias por la ayuda.
-Cuando quieras, querido.
Camine hacía la sala y me sente a seguir viendo la televisión. Comiendo mi cereal al ritmo de Demons espere la respuesta de mi amigo.
-¿Qué sigue después de esto?
-Yo que se.
Se escucharon pequeños ruidos de fondo y frunci el ceño.
-¿Dónde estas?
-Yo que se.
Demons termino y comenzo Sorry. Mire por las ventanas de la sala y al verlas abiertas me sente de nuevo, bah, a quien le importa.
Estaba tratando de imitar a las muchachas del video cuando mi celular sono, me apresure a contestar, pensando que era mi mamá y al responder una voz risueña me dijo.
-Te ves adorable bailando eso, ¿quieres que lo hagamos juntos?
Voltie hacía la ventana y ahí se encontraba el, sonriendo como siempre. Y esperando a que abriera las puertas de mi casa.
N.A
MIRIAM, SI ESTAS POR AHÍ, DÍ HOLAAAAA
