El bueno y el malo

Capítulo 25

Después de eso pasé los días haciendo trámites para el entierro de mis padres, la pensión, cosas que para mí en ése momento no tenían sentido, cosas que no tenían importancia, solo quería que me dejaran de molestar, quería hundirme en mi dolor y soledad.

-¡¡Eddward, sabes que eso no era lo correcto, no estuvo bien que lo hicieras!!- gritó Kevin interrumpiéndome, estaba exaltado y enojado.

-Kevin. Debes de entender que cuando pasan cosas tristes no piensas, solo haces. Deberías tratar de entender eso, tú pasaste por una situación mala, tú padre era agresivo y nos golpeaba, en ese momento tú intentabas ser callado y no causar problemas, eras casi una muñeca y eso no estaba bien, pero aun así lo hacías, no juzgues a Edd.

Levanté la mirada y los observe detenidamente, observaba a la madre de Kevin y como le explicaba, observaba como Kevin fruncía el ceño al recordar esos momentos con su padre; ahora que lo pienso estoy muy agradecido con ellos, con todos los que me han ayudado, en verdad agradezco que cuando me intente suicidar mi vecina entrara por la puerta y me salvara, que Eddy me ayudara, todo eso lo agradezco; no sé qué hubiera hecho si no hubiera conocido a Kevin.

-No te preocupes, Rosy. Entiendo por qué dice eso Kevin, ahora lo pienso, fui un completo idiota, no razonaba y me arrepiento de esas tonterías que hice - hice una pausa y suspiré - bueno no lo hago, no me arrepiento de nada - Kevin abrió sus ojos de la sorpresa y justo cuando iba a hablar para seguramente reclamarme y regañarme, lo interrumpí- no me malinterpretes Kevin, no me arrepiento porque todo lo malo y lo bueno de mi vida ha hecho que mi destino seas tú. Pumpkin, te amo – al decir eso no pude evitar sonreír y sentirme en paz.

Kevin se sonrojo, Rosy solo rio bajo y yo los veía, ellos eran mi nueva familia, no puedo estar lejos de ellos.

-Kevin, tenemos que irnos a casa, ya es noche y mañana tienes partido temprano.

-Cierto, mañana nos tenemos que levantar temprano; pero quiero continuar con la historia de Edd.

-Otro día será,hijo.- Rosy nos sonrió

Rosy hablo sacándome de mis pensamientos, había olvidado por completo el partido de Kevin, desde que comenzó a entrenar en el equipo nos vemos menos y ya no regresábamos juntos a casa, pero eso me hizo pasar más tiempo con Eddy y los demás, nuestra relación amistosa crecía mucho y eso nos ponía muy felices a todos.

-Oye, Rosy. –Solté un poco nervioso- ¿Por qué no Kevin duerme aquí hoy? Mañana tienes que salir de viaje, ¿no? – En verdad quería que Kevin y yo tuviéramos algo de intimidad después de mucho tiempo – Así será más rápido irnos mañana, yo iré a verlo de todos modos y así vamos en mi auto.

Al parecer Rosy capto la idea de que Kevin y yo queríamos estar solos, pero jamás pensé que diría algo tan directo. Mi error.

-Al parecer alguien quiere tener un encuentro cariñoso después de bastante tiempo – nos miró de forma muy picara y su tono de voz de burla hizo que ambos soltáramos un gritito de exclamación y nos pusiéramos rojos de la vergüenza.

-¡¡¡Ma...má, por favor!!!- Gritó y saltó de la silla Kevin, en verdad estaba muy avergonzado y se veía muy tierno.

-Ro..Rosy, eso no era lo que te estaba plantando – Mentía, era obvio que quería estar con Kevin, pero no lo podía decir de forma tan abierta, al menos no todavía.- Sólo decía dormir juntos, pero si te incomoda pues no tienes por qué decir que si- dije en un tono de desilusión un tanto exagerado, si bien me entristecía el que no aceptara no era como para sentirme tan mal, de todos modos Rosy se iría de viaje una semana y junto con Kevin habíamos planeado vivir juntos esa semana.

-No me molesta- Se levantó y nos sonrió de una manera un poco extraña- Pero hay una condición- Kevin y yo miramos a Rosy sorprendidos, la madre de Kevin era muy infantil cuando quería y a veces daba miedo- Deben darme al menos dos nietos- comenzó a reírse, daba un poco de miedo, y salió de mi casa muy feliz.

-¿ok?, eso fue bastante extraño...-Dije mientras volteaba a ver a Kevin que no había dicho nada después de eso.- ¿Qué pasa, Pumpkin? –Lo abracé para sacarlo de sus pensamientos.-

-bueno, es que... los hombres no se embarazan...y, en todo caso ¡Yo no quiero tener al bebé!- Hizo un puchero, bastante tierno y recordé que la última vez yo fui quién tomo el papel "domínate" y reí internamente.

-Está bien, entonces...permítanme tener a sus hijos. – Me arrodillé y Kevin me miró sorprendido y evidentemente se sonrojo, yo también sentía que iba a morir de vergüenza pero las palabras salieron solas y ya estaba hecho.- So-solo si quieres, obviamente.- desvíe la mirada a la ventana y esperé su respuesta.

No dijo nada, así que regresé mi mirada a su cara y el tenía una linda expresión, acompañada de su encantadora sonrisa.

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