Wake up, Cassandra.

28

No quise acercarme al ataúd y nadie quería que lo hiciera. Me abracé a mamá con fuerza y papá nos rodeó a ambas con sus brazos.
-Necesito salir.-dijo mamá y él asintió.-Perdón.
-Tranquila.-dijo él y la besó.
Me encontré extrañando a Harry como nunca y como siempre. Quería tenerlo ahí conmigo. Quería besarlo y escucharlo prometer que todo estaría bien.
-Cass, ¿queres ir con ella?-negué.- Estás temblando, hija.
-Hay un monstruo.-susurré en su oído y él me abrazó con más fuerza.
-No voy a dejar que te haga nada.-aseguró y nos acercamos al tío Niall.
Corrí hacia el tío Louis y lo abracé con todas mis fuerzas con intenciones de no soltarlo jamás.
-¿Qué haces?-preguntó él con suavidad.
-Junto todas las piezas rotas. Intento arreglarte.-musité.
Él me abrazó también y permanecimos en silencio unos minutos.
-Gracias, Cassie.-murmuró y besó mi cabeza.
Volví con papá y llegué a ver a Harry antes de que él me pegara a su pecho.
-¿Dónde está?-preguntó el hombre a mi padre.
-Fumando junto a la ventana.-dijo él. Lo miré y él abrió sus brazos.-No.-sentenció aferrandome para que no vaya.
-Sólo quiero abrazarla.-dijo y papá negó.-Entiendo, no confias en mi.
-No creo que tengas que estar acá.-dijo él.- Nadie quiere verte.
-Papá...
-No, Cassandra. Ya no más. No voy a perderte y menos por alguien a quién llegué a llamar amigo.
-No voy a matarla.-masculló Harry.
-Prefiero no arriesgarme.
Él tío me tomó, alejándome de ellos. Se arrodilló frente a mi y apartó todo el cabello de mi rostro. Su sonrisa nostálgica me encogió el alma y entrelazé mis dedos a los suyos.
-Tío, hay un monstruo.-susurré.
-¿Queres que nos alejemos de él?-asentí y me tomó en brazos.
Salimos del lugar pero yo aún podía verlo. El cuerpo negro y los ojos de un tigre. Los pies grandes y los pasos pesados. El monstruo no nos dejaría ir está vez.
-Vamos a quedarnos en el hotel, ¿si? No me siento muy bien.-dijo y ambos subimos al auto.
A las dos cuadras el auto nos impactó. Dimos vueltas, escuché muchos ruidos, la mano del tío tomó la mía.
-Es hora de volver a casa, Cassandra Baker.-dijo el mostruo alejándome de los cristales.- Dieciséis años es mucho tiempo.
Perdí el conocimiento sabiendo que ese monstruo de traje y cabello castaño me llevaría a su cueva, esa que fue mi hogar al nacer.

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Bueno. Este es el final. Espero que les haya gustado el primer libro de esta historia y sepan dejar sus comentarios y recomendaciones al respecto.
En 'Wake Up, Cassandra' quise dejar plasmado el cambio de esta chica que nació siendo rica y a los pocos minutos todo se le desvaneció. Desde pequeña vivió pobre y muy amada y, tras mostrar su talento para subir en la escala social, perdió todo aquello que tenía e intentó vivir con sus nuevos aprendizajes aunque estos, al parecer, siempre estaban mal. El amor, el odio y la protección se vuelven papeles cruciales en su vida y es la ingenuidad de todos los que la rodean la que la arroja a las garras del monstruo al que ella tanto temía.