Wake up, Cassandra.

16

Entramos al restaurante y Liam me indicó que tomara asiento para luego hacer lo mismo con Sophia. Pedimos la comida y yo agaché la cabeza ante las miradas que nos dirigían de otras mesas.

-Cass, sabes que a estas alturas del programa, la decisión ya no es nuestra en lo más mínimo. Supongo que es por eso que esperamos hasta este momento para tomar la decisión.-lo miré confundida.-Hablé con tu hermano.-entonces supe que esto es a lo que se refería Shiran y empecé a asustarme.- Queremos adoptarte, Cass. Queremos registrarte bajo la tutoría de la familia Payne. Seríamos tus padres.

-¿Y Shiran?-pregunté con los ojos llenos de lágrimas.

-Él es mayor de edad, Cass. No podemos adoptarlo.-dijo Sophia.-No llores, linda.

-¿Adopción?-pregunté entonces. Shiran me había dicho que tendría que aceptar, se refería a esto.-¿Vamos a asustar monstruos juntos?

-A todos.-prometió Liam.

-¿Y a comer helado?-Sophia asintió.- ¿Vamos a ser una familia?

-Y Shiran también. Lo único que no podemos hacer es adoptarlo legalmente, Cassie.-dijo el hombre.- Vamos a ser tu familia.

-Pero yo no sé cómo ser una hija. Solo sé ser hermana.

-Tranquila.-rió Sophia.-Podemos aprender todos juntos. Lo...

-No prometas.-se apresuró a decir Liam.-Lo juramos.

Suspiré y miré mis pies unos minutos.

-¿Y cómo tengo que decirles?

-Como vos quieras.-dijo Sophia.-Creo que él le gustaría que le dijeras papá.

-Y a ella, mamá. ¿Queres?-asentí suavemente y besaron mis mejillas.

La comida llegó luego de unos minutos pero nadie decía nada. Terminé mi plato y junté ambas manos.
-¿Qué pasa, Cassie?-preguntó él y yo lo miré.
-La gente nos mira.-murmuré.-Eso es raro.
-Ya vas a acostumbrarte.-dijo Sophia.
-El señor junto a la puerta fue quien me despidió y está haciéndome señas para que me acerque.-admití.- Yo no quiero ir.
-Y no vas a hacerlo.-dijo Liam.-Shiran no me dijo que habías trabajado acá.
-Shiran no lo sabe. No puede enterarse. Nunca le confesé de dónde saqué sus regalos de cumpleaños o algunas de las cosas del colegio. No pueden decírselo.-pedí.
-No vamos a decirlo. Ahora... Liam, el señor se está acercando.-dijo Sophia pero yo no levanté la mirada.
Al llegar junto a la mesa, se detuvo.
-¿Algún problema, señor Payne?-preguntó.
-Eso mismo quiero saber. Está incomodando a las señoritas.
-No fue mi intención, señor. Solo quería pedirle algo a Cassandra.
Estaba completamente avergonzada. Nunca creí que volvería a verlo. Sentí mis ojos llenarse de lágrimas y elevé la mirada.
-Lo siento mucho, señor Rogger.-susurré.-Tenía mucha hambre y no pude evitarlo. Llevaba días por comer. Nunca pretendí tomar ese pan con malas intenciones.
Sophia me rodeó con su brazo. Bajé la mirada nuevamente y ella me dio mi inhalador.
-Cassandra Baker.-dijo y lo miré.- No lo pensé en ese momento. Solo quería decirte que hay algunas personas ahí atrás que quieren verte.
-Vamos a ir cuando termine la cena, si no le molesta. -dijo Liam.- No creo que quieran verla llorando.
-No señor. Lamento asustarla, señorita. Espero que disfruten su cena.
Se retiró y Liam se volvió hacia mi. Besó mi cabeza y me sonrió.
-No quería robarlo.-admití.
-Lo sé.
-No soy una buena hija.
-No digas eso.-pidió Sophia.- Creo que yo hubiera hecho lo mismo en tu lugar. Cassie, ese pan puede haberte ahorrado muchos problemas de salud.
-¿Queres ir a saludarlos?-preguntó Liam y yo asentí.-¿Te acompañamos? -volví a asentir.
Avancé tomada de ambas manos hacia la puerta para la cocina. Al cruzarla, me topé con el desfile de cocineros y platillos, meseros y asistentes.
-¡Cassandra!-gritó Fausto y reí, corriendo hacia él.
El hombre me alzó en el aire, envolviendome en sus brazos.
-Gente, volvió nuestra Cass.-dijo feliz y más brazos se sumaron a nosotros. Todos estaban ahí. Reí.-Te extrañamos.
-Llevamos mucho sin verte.
-Quiero presentarles a alguien.-murmuré y bajé de brazos de Fausto. Caminé hacia Liam y a Sophia y tomé sus manos para que avanzaran conmigo. -Ella es mamá y él es papá. -dije.- Desde hoy somos una familia.
Vi lágrimas en los ojos de Sophia y la abracé.
-Ellos son Fausto, risitas, Clarise, Jacky, Zedd, Hilary, Paul, Rick, Amy, Paty y cachetotes.-dije.- Los mejores cocineros y meseros, además de personas increíbles y divertidas.
-¿Cuando vamos a conocer a Shiran?-preguntó Paty.
-Él está en Libia. Cuando vuelva, se los voy a presentar. Pero tienen que acordarse de que es un secreto.
-Si, señorita. -dijeron todos, llevándose la mano a la frente como militares.
-Creo que es hora de irnos, Cassie.-dijo Liam. Asentí y me despedí de ellos.
Al volver al auto, me quedé mirando por la ventana. Pasamos frente a la casa en la que Shiran y yo vivíamos. Puse mi mano en la ventana y me recosté contra esta. Ojalá Shiran hubiera estado presente todo este tiempo. No me gustaba vivir momentos importantes sin él.