Ella está rota

Capítulo 18

Miro a Sophia con una sonrisa, Jessie logra cosas que nadie mas, ésta mañana me trajo a visitar a mi buena amiga, por supuesto Samuel me dió vía libre para llegar algo tarde, ese hombre se comportaba demasiado gentil conmigo. Mi amiga le da un gran bocado a su churro empapado con chocolate para después mirarme con una sonrisa, estoy segura que la estirada de su madre no le deja comer cosas grasosas.

- sabes, conocí a un chico y creo que podía ser el indicado para enamorarme - dice con un suspiro.

Por su conclusión tan precipitada se que ella no tiene idea de nada con respecto a eso.

- debes estar bromeando, no puedes pensar así de un hombre que acabas de conocer - le digo con el ceño fruncido.

Sonríe y niega con la cabeza, es buena chica pero tal vez un poco ingenua, no puede pensar en enamorarse tan rápido.

- tu amas a Jessie y solo lo conoces de hace apenas un mes y algo - me acusa señalándome con el dedo.

Amor. Sí. Paso mucho tiempo con él, pero eso no quiere decir que lo ame. No lo creo.

- alguna vez te has enamorado?- borra su sonrisa y me mira fijamente - horrible ¿no? Te hace tan vulnerable, abre tu pecho y abre tu corazón y eso significa que alguien puede meterse dentro de ti y revolverlo todo - se encoge de hombros porque realmente no sabe lo que se siente - construyes todas esas defensas, construyes toda una armadura, así nada podrá herirte, entonces llega una estúpida persona, nada diferente a otras estúpidas personas y se mete en tu estúpida vida - sonríe ante mis palabras algo vulgares - le das un pedazo de ti. Que no te pidió. Hace algo tonto un día, como besarte o sonreírte, entonces tu vida ya no es mas tuya...

- eso es bonito - me interrumpe.

- el amor toma rehenes. Se mete en lo mas profundo de ti. - continúo por donde lo dejé - Te va carcomiendo y te deja llorando en la oscuridad; una frase simple como "no te amo" se convierte en una astilla de vidrio que se te va hundiendo en el corazón. Duele - sus ojos se llenan de lágrimas aunque eso no es lo que pretendía - no sólo en la imaginación. No sólo en la mente. Es un dolor del alma, que realmente se te mete dentro y te rasga en pedazos- cojo mi sándwich de pollo y le doy un gran bocado y seguido un trago de una refrescante coca-cola - odio el amor.

Sutilmente Sophia seca una lágrima rebelde, ésto se empieza a poner realmente incómodo, ni siquiera se porque le dije todo eso, sólo fluyó de mi, mis palabras salieron con odio y rencor aunque no pretendía que saliera así, pero tal vez no debí haber abierto la boca.

- tu realmente....

- sabe lo que se siente - termina la frase por ella una voz masculina.

Suspiro con pesadez, pasé dos semanas sin su irritante presencia, realmente estaba bien sin el revoloteando a mi alrededor, pero claro...tuvo que romper mi linda racha interrumpiendo la agradable charla con tal vez mi única amiga.

- me pregunto quien habrá roto tu corazón - dice con una sonrisa.

Coge una silla de la mesa libre frente a nosotras y se sienta apoyando los codos en la mesa del restaurante en el que Sophia y yo decidimos entrar a desayunar.

- creía que tenías mucho trabajo, Thomas - le digo haciéndole saber que no es bienvenido en nuestra mesa.

El muy idiota sonríe y ladea la cabeza clavando su verde mirada en mi, maldito infeliz.

- me estas espiando, Brooke? - pregunta con una ceja enarcada.

Nuestra conversación parece divertir a Sophia pues sonríe intercambiando miradas entre Thomas y yo. Aggg.