29. La subasta

2.5K 160 5
                                    

Nicolle:

-No se que voy a hacer con mi vida- niega con la cabeza y se toma otro shot de fondo blanco

-Pues seguir con el hombre que te da el paraiso, es mejor tener a uno de los dos aunque no sea el que amas a quedarte sin ninguno. - asiente y seca sus lagrimas

-Tienes razón- se endereza y sonríe con una deslumbrante sonrisa que le ilumina el rostro.-le voy a enseñar a esa perra que conmigo no se juega.- suspira -tenias razón, no hay nada mejor que hablar con un desconocido.

-¿Puedo preguntar que perra?- suspira

-Mi "mejor amiga" le dijo a su hermano que salgo con su otro hermano- rio levemente

-Valla lió -asiente -¿porque con dos hermanos?

-No lo se- admite y parece levemente avergonzada

-Disculpen interrumpo- la voz fuerte de Zac suena junto a nosotras -Eres Melanie, ¿verdad?- la morena asiente -Julian te necesita, esta en la tercera habitación de la segunda planta. - Melanie asiente y se baja del taburete

-Gracias, de nuevo- le sonrió y asiento. Ella se gira y camina entre la multitud.

-Ven- me toma del brazo y yo me dejo llevar, entramos en una de las puertas que esta con seguro bajo una de las escaleras, mira en todas las direcciones antes de empujarme dentro.

Es una muy pequeña habitación de dos metros cuadrados, dentro hay una mesa de madera y sobre esta hay como doce o catorce bolsas negras, y en uno de los extremos hay una puerta de tan solo un metro de alta.

Zac se acerca con cuidado a la mesa y me hace ceñas para que me acerque a el, me entrega una de las bolsas y abre la puerta.

-Vístete linda, espero abajo.- desaparece por la puerta y yo me quedo como idiota mirando a la bolsa.

La abro y veo un conjunto simple de ropa interior negra junto a unos enormes tacones del mismo color. Suspiro. Me saco el vestido sin pensar demasiado y a este le siguen mis bragas y mi sostén. Me pongo rápidamente lo de la bolsa y alboroto mi cabello dándome un aspecto un poco mas salvaje; se lo que viene después y lo odio, pero como ya es rutina me limito a dejar mi vestido y ropa interior blanca en la bolsa, la pongo bajo la mesa y entro en la pequeña puertita.

Hay una escalera en forma de caracol que lleva a una especie de garaje. Zac esta sentado junto a su hermana y otros tres hombres que los 40 ya no los cumplen. En el final de las escaleras hay cinco chicas vestidas exactamente igual que yo, una asiática, dos rubias y las otras dos son latinas de cabello castaño.

Zac al verme se levanta y se acerca a mi, las chicas se hacen a un lado y Zac me toma por los hombros, el espacio es bastante grande, un auto esta estacionado frente a la puerta y hay una tarima improvisada con un tubo frente a dos cabinas de tamaño moderado con seis sillas cada una.

-Ya sabes que hacer Aria, solo espera que lleguen todos mientras tanto, explícale a las novatas que deben hacer- señala a las cinco que se miran entre ellas algo asustadas.

-Vale, pero ¿hay mas novatas?- niega

-Las que faltan son mis chicas y sabes que para las subastas solo vienen las mejores- asiento y camino hacia las chicas.

-Hola, soy Aria ¿quien las trajo?

-Matthew Garber- la asiática señala a uno de los viejos

-¿no quieren estar aquí, verdad?- todas asienten- yo tampoco.

-¿Porque estas aquí? Es obvio que tu no estas aquí obligada como nosotras. - miro las escaleras cuando la puerta vuelve a abrirse y tres chicas que reconozco a la perfección aparecen.

Muñecas [Sin Editar]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora