—Toma asiento. —supliqué con tono imperativo.
No tardó más de tres segundos en obedecer mi petición y una vez estando frente a mí, continúe—: hay algo que necesito que hagas como favor para mí, ¿crees poder?
—Por supuesto, somos amigos ¿no es así?
Una sonrisa a medias se asomó por mis labios, pero en el interior podía saborear el amargo sabor de sus palabras. Amigos, claro, solo había amistad entre nosotros.
—Sí, es verdad.
—Y bien, ¿qué puedo hacer por ti?
—Escucha, debo interceptar a uno de mis pacientes y prácticamente obligarlo a dejarme entrar en su mundo.
—¿Por pacientes te refieres a Lester?
—Eso realmente no importa mucho —mi cabeza fue agitada en negación desesperada—. A lo que quiero llegar es que simplemente no sé cómo hacerlo y temo que pueda darse cuenta que no se lo pido como cosa mía y se sienta utilizado al abrirse.
—¿Por qué se sentiría utilizado si estas ayudándolo? —ambas cejas se contrajeron en dirección al medio.
—Porque sea el propósito que sea de nuestro trabajo, sigue siendo eso, trabajo y nos termina dando un benéfico el bienestar de nuestros pacientes, uno más... —mis dedos tuvieron un roce en señal de lo referido, haciendo el simbólico movimiento de dinero—. Económico.
Su cabeza dio un fuerte asentimiento haciéndome saber que mi idea era primeriza en su mente, así dándole un poco más de entendimiento a lo dicho.
—¿Ustedes dos no se llevan bien?
—Sí, como doctora y paciente. Mantengo al margen una relación más íntima, no busco amistades, solo quiero cumplir con mi deber.
—Athenea, pregúntale sin ninguna intención, al final del día tú le estás haciendo el favor y él a ti. Además, Lester es muy simpático y no veo porque te diría que no.
—Lo sé, es solo qu... —mi semblante cambió por completo, arrugándose un poco—. Un segundo, ¿por qué das por hecho que es él?
—Porque es el único que te a causado los problemas suficientes con su avance y sé que tú sabes que nosotros somos amigos y puedo ayudarte con facilidad.
—Sí, es un buen punto.
—Parece que olvidaste pensar en eso, vaya sorpresa. —me dedicó una sonrisa burlona y arrogante, que fue tomada con simpatía de mi parte.
~
Sonreí en su dirección y él recibió mi gesto con nerviosismo, tomando su lugar frente a mí como de costumbre.
Miré su vestimenta, estaba desarreglado como normalmente no se presentaba, se veía enfermo, pero no mal. Su camiseta de manga larga estaba remangada hasta el inicio de sus muñecas, exponiendo que dicha prenda era un par de tallas más grande de las que habitualmente vestía.
—¿Cómo te sientes hoy? —traté de sonar amigable, pero el intento falló de inmediato, mi voz denotaba preocupación.
—Tú dime como es que me veo —arqueó una de sus cejas—. Eres mala ocultando tus expresiones faciales.
—¿Estas enfermo?
—Es gracioso, ¿no lo crees? Porque si no lo estuviese, entonces ¿para que estaría en un hospital de gente mentalmente enferma? —Rió con sarcasmo fingido, entendía a la perfección que estaba jugando y que su oración era parte de un mal chiste, o al menos eso parecía, pero no me había causado gracia alguna—. Tengo un resfriado, se quitará en una semana.
Su respuesta llegó en cuanto se percató del desencanto por su primera respuesta. Asentí con entendimiento y traté de ignorar el incómodo momento.
—Lester, necesito pedirte algo.
—¿De casualidad es algo relacionado con pasar un día a mis espaldas conmigo?
—¿Disculpa?
—No te he hablado sobre muchas cosas y tu trabajo demanda información, así que estás buscándola con métodos diferentes, ¿me equivoco?
Una bofetada me fue plantada internamente, si él era consciente de eso, no me dejaría en absoluto conocer su entorno, exponerse no había sido su mejor virtud en un principio y no comenzaría a serlo. Aborten la misión.
—Solo debo asegurarme de entender algunas cosas de tu entorno, más nada.
—Está bien.
Cuando articuló esas palabras, mi corazón se detuvo. ¿Está bien?
—¿Perdona?
—He dicho que puedes hacerlo.
En segundos me deshice de las siguientes preguntas de aseguramiento. Demostrar inseguridad no era siempre una buena idea; por una parte, era lo que más deseaba que respondiera, aunque en realidad nunca creí que fuese a hacerlo, pero por otra parte, esperaba con mucha fuerza que no me entregara su permiso y así sabría que hice mi intento, pero lamentablemente y para beneficio propio había fallado.
Lo miré con un leve destello de emoción mezclado con miedo y cuando sus ojos conectaron con los míos por un minuto, pude ver la oscuridad en su mirada, el vacío de sus ventanas y la profundidad de su alma, la cual se ocultaba detrás de una enorme pared que ocultaba todo lo que quería mantener en la comodidad de su privacidad.
N/A: Lo sé, fue un capítulo considerablemente corto, pero lo que vienen en el siguiente compensará totalmente el inconveniente.
UNA COSA ANTES QUE NADA. Me gustaría que comentaran canciones que puedan ser utilizadas en algún capítulo, ya sea en el fondo de una fiesta o alguna que consideren pueda ser representativa para los personajes o para alguna relación que les gustaría surgiera.
Ahora sí. Les quería avisar que la portada que actualmente viste la novela, será la definitiva, ya que finalmente siento que encaja y me gusta demasiado, ¿qué les parece a ustedes?
Esto es gracias a la bellísima de blodstram por crearla y por superar los expectativas.Y una vez más les quería invitar a pasarse por el ask de Lester (@Lesterkt) en donde el responde las preguntas que pueden parecerle llamativas y les otorgará información que por aquí no podrán conseguir, es como para que puedan tener un acercamiento más íntimo y personal con él, si es que les interesa y dependiendo la demanda, probablemente Athenea se vea pronto con un ask también y así podrán charlar con ella.
Gracias por leer y especiales gracias a las que votan y comentan. Sus comentarios son bastante agradables la mayoría de las veces y es bueno poder leer a quienes te leen.

ESTÁS LEYENDO
Medicine
Gizem / Gerilim❝No puedes pedirme que intente ser aquello que no soy. Conozco mis errores y he gastado gran parte de mi vida con ellos, he aprendido a amarlos, y si realmente me quieres, tendrás que aprender a no juzgarlos. Y aclaro que no te pido que ames mis dem...