Olvidate de mí.

30.-La verdad siempre duele.

Cuando llegamos a la playa vemos que también están Tara, todas sus demás amigas zorras y Maggi la "supuesta" prima de Mark.

Nos miran mal pero a mi me la suda sinceramente.

Desde que se que mi padre está ya en California estoy de un humor de perros y es que no se que haré cuando le vea y me pone nerviosa. Tengo miedo de no decirle nada o de lo que el me pueda llegar a decir. Y es que es duro que para tu padre solo hayas sido un obstáculo, un problema y que no te quiera. Aunque ya me he acostumbrado todavía duele aunque sea un poco.

Le cuento todo lo ocurrido a Linna mientras que comemos un helado que nos hemos comprado de camino a la playa. Hemos comido antes de venir, no perdonamos ni una sola comida, con lo que nos gusta comer.

Mi amiga al oír toda la historia ahoga un grito.

-Lo siento, no me tenía que a ver separado de ti.-dice dándome un abrazo.-Menos mal que llegó él. Te hace bien y estás más contenta desde que te ves con él, pero Mark es peligroso por lo que hemos comprobado...

-Ya, tienes razón, no puedo seguir con él, si no le harán daño pero...

-Si le dices lo que Mark te ha dicho, a lo mejor lo consigues no se.

-Dejemos de hablar de ese tema, hoy solo quiero preocuparme por que me dé el sol.

Llevamos al sol una hora cuando unas perras nos vienen a molestar.

-Tara aparta, me quitas el sol.

-No se que tendrás con Blake, pero a él solo le gusto yo.

-Lo que tu digas, pero ¿por qué tu y tus perritas falderas no os vais a tomar el sol o lo que mejor se os da, zorrear, a unos metros más concretamente como a unos veinte más lejos de nosotras?

-Te jode que te haya quitado a alguien más de tu vida, ¿no?

Tara habla de mi, bueno, nuestro padre, como la odio.

Me levanto y la encaro, estoy a centímetros de su cara.

-Le tendrás a él, pero no a Blake.

Nadie sabe de lo que hablamos solo Linna.

-Amber, venga dejarlo. No merece la pena bajarse a su nivel.-dice Linna cogiéndome del brazo.

Estoy muy cabreada y por no quitarle los cuatro pelos que tiene porque todo lo demás es falso, cojo la tabla y me voy hacer un poco de surf.

Necesito desconectar de toda esta mierda.

******

Han pasado ya tres horas desde que he tenido el encontronazo con Tara.

Después del salir del agua ellas no estaban, y he podido pasar una muy buena tarde con mi mejor amiga.

Mi móvil suena. Es Derek.

-Hola...¿¡¿¡QUÉ?!?!..NO, ME NIEGO, ENSERIO,NO ME PUEDES PEDIR ESTO,...PERO...OS ODIO.

-¿Qué quería?

-Quiere que vaya a cenar con nuestro queridísimo padre y su queridísima familia secreta.-no te se el sarcasmo-Que nos lo va a explicar todo. No pienso ir.

-Amber, tienes que ir, le dices todo lo que piensas y si quieres te vienes a mi casa a dormir pero ir tienes que ir.

Me lleva hasta mi casa y nos despedimos.

-Amber, recuerda, con lo que sea me llamas.

Me despido de ella y entro a casa.

-Hola Zack.

-Tranquila, papá esta con...bueno ya sabes vendrá a la hora de cenar.

-No pienso hacer la cena.

-Tranquila, ha contratado a un cocinero.

-Como se nota que si se preocupa por ellas. ¿Y mamá, sabes algo de ella?

-No, bueno ha llamado dice que esta bien y a preguntado por ti.

-Me voy a mi habitación, no me molestéis para que baje a cenar.

Subo corriendo a mi habitación y caigo rendida en la cama.

******

Alguien toca a la puerta de mi habitación despertándome.

-Amber, será mejor que te prepares, estarán aquí dentro de una hora.

Me levanto a regañadientes y me meto en mi vestidor.

Decido ponerme un mono de tirantes rojo y unos tacones negros. Me maquillo, bueno me pongo rimel y me pinto los labios de rojo. Me dejo el pelo sueltos con mis ondas naturales.

Bajo y a los cinco minutos llaman a la puerta.

Nos acercamos los tres a la puerta y Derek abre la puerta. Y entra nuestro padre y la puta con la que le encontré el otro día y detrás de ellos Tara, la que me sonríe con superioridad, porque sabe que esto me jode y mucho.

Mi padre se acercó a darme un beso y di un paso atrás, y agache la cabeza.

-¿No vas a darme un beso, hija?

Levanto la cabeza, y le miro a los ojos con odio.

-¿Cómo tienes el valor de llamarme hija?

-Porque eres mi hija.

-No, no te equivoques, deje de ser tu hija en el momento en el que nací, ni un beso, ni un te quiero, no, solo gritos, broncas, y es más, las únicas palabras que recuerdo salir de tu boca para dirigirte a mi han sido "Te odio, nunca seras mi hija". Así que ahora no te quieras hacer el buen padre porque no. Mi padre está muerto desde hace mucho.-le digo con lagrimas en los ojos mientras que me acerco a él-Yo por las noche lloraba y me pregunta que coño era lo que hacía mal, pero aquí el único que lo hizo mal fuiste tú.

Me limpio las lagrimas de los ojos y me voy al comedor.

Estoy callada mientras ese señor nos explica todo, que ama a esa mujer y a su otra hija. Y que quiere que convivamos todos en la misma casa, ellas se mudaran mañana y que ya se ha divorciado de mi madre.

Y una mierda si piensa que voy a vivir en el mismo techo que la guarra de Tara y su madre, yo mañana me voy, no se donde, pero aquí no me pienso quedar. Cuando los tres se van mis hermanos me observan callados como si pensaran que si abren la boca me voy a derrumbar. Pero juro que no voy a derramar una sola lagrima por él, nunca más.

Me levanto y me dirijo a mi habitación cojo todas las maletas y meto mi ropa, y en cajas todas mis cosas. Yo mañana no voy a estar aquí cuando ellas vengan.