Olvidate de mí.

25.-Amenazas.

Amber POV

Me duele muchísimo la cabeza y eso que ayer no bebí.

Me levanto pesadamente de la cama y me dirijo hacia el montón de ropa que esta en el suelo, me agacho y busco el bolso.

Lo abro y solo hay un par de tampones, clinex, un pintalabios, chicles, dinero, más dinero, las llaves de casa, joder parace el bolsillo de doraimon, pero ni rastro de mi móvil.

Me levanto y tiro el bolso contra la pared.

Seguro que cuando llegué lo llevaba en la mano, me tumbé en la cama y se me caería de bajo de la cama, seguro que es eso.

Me agacho y meto la cabeza debajo de la cama, y tampoco.

Auch,me he dado con la cama en la cabeza.

-¿Dónde estás móvil hermoso?-digo mientras que me paseo por toda la habitación y hago una cosa rara con los dedos para llamarle.

Parezco una loca.

Será mejor que piense donde fue la última vez que lo vi.

-Amber, es la hora de comer te tienes...-dice Derek entrando a la habitación-¿Qué haces despierta tan pronto?-con cara de asustado.

-Buscando mi móvil. No lo encuentro. Anda llámame.

-Vale.-dice cogiendo su teléfono-Me salta el contestador. Pero no te preocupes, toma mi móvil y dale a buscar mi iPhone.

-Gracias. Joder dice que no tiene cobertura.

-Bueno pues piensa donde te lo pudiste dejar.

-Es malo beber.-dice Zack asomando su cabeza por la puerta.

-Si apenas bebí.-digo indignada.

-Zack, Amber, dejemos la fiesta de ayer en paz y vamos a comer, que ha venido la tía ha hacernos la comida.

-Okay, me visto y bajo.

Hago la cama, cojo el vestido de ayer y lo huelo a ver si huele a sudor, pero huele a él.

Lo que me provoca una sonrisa tonta. No se que me pasa con este chico pero cuando estoy con él soy yo misma, me siento protegida, me siento agusto.

Me pongo un top de rayas, un peto vaquero y mis Converses blancas. Me hago dos tres de raíz y bajo a comer con los chicos y mi tía.

-Hola, tía.-la saludo dándole un beso en la mejilla.

-Hola, ayer te debió de ir muy bien, has llegado muy tarde.

-Si bueno, salí con los chicos y ya sabes, se alargó la noche.

-No vendrías sola, ¿no?

-No, me trajo Mandy.-miento.

Seguimos comiendo como si nada. Perece que estoy aprendiendo a mentir.

Y no se porque pero pienso en mi madre. Pienso en que sintió cuando supo la verdad sobre mi padre. Y tengo miedo. Porque no se que pasará ahora. Espero que se separen, pero si eso ocurre...
¿Qué pasará entonces? Mi padre, me duele llamarle así pero es lo que es, como iba diciendo, mi padre no dejará que mi madre le quite la casa, lo que significa que mi madre se irá a otro lugar a vivir y yo no pienso quedarme aquí ni ella dejarme aquí.

Pero si eso ocurre, me iré y no veré a mis amigos y lo que más me duele aunque me cueste decirlo, no veré a Blake.

A la ya lo he dicho, me gusta Blake.

Antes también te gustaba la cuestión es otra. ¿Estás enamorada de él?

No, antes me atraía, ahora me gusta, además una persona no puede enamorarse de otra sin conocerle a penas.

Lo que tu digas, pero ¿qué va a pasar con tu novio ahora?

Pues cortaré con él total, cuando le vi con su supuesta prima, no sentí nada de dolor.

Pero no le voy a dejar y ya. Parece ser que él me ha estado engañando durante todo este tiempo, seguro que solo fui una apuesta. Y doy gracias a no haber tenido nada más con él.

Solo se una cosa seguro, me las va a pagar.

-Amber.-interrumpe mi tía mis reflexiones.

-¿Sí?-respondo volviendo a la realidad.

-Queríamos saber que opinas tú.

-¿Qué opino yo, sobre que tema?

-Sobre que tu padre venga mañana de viaje después de que os enterarais de su otra vida.

-Pues..., la verdad no se como voy a reaccionar pero bien te aseguro que no. Y me da igual todo.

Mis hermanos no dicen nada ya que ellos van a reaccionar igual o peor que yo.

Me levanto, llevo mis platos al friegaplatos y subo a mi habitación dando zancadas.

No creo que salga hoy, bueno a buscar mi móvil.

Se me había olvidado ya.

Me doy con la mano en la cara y me levanto de la cama.

A regañadientes.

Bajo las escaleras sin ganas y me dirijo donde aún están comiendo.

-Bueno, me voy a ver si encuentro el móvil, creo que lo he perdido. Iré primero a casa de Linna a ver si sabe donde fue la última vez que me vio con él y ya de paso pregunto por su móvil en el grupo que estamos con los demás, por si supieran algo.

-Si le llega algún mensaje a Derek se lo digo a Linna.-responde Zack.

-Perfecto y muchas gracias a todos, la comida estaba riquísima, tía.

Salgo de casa y ando en dirección a casa de Linna espero que esté porque si no, no se que voy hacer.

Entonces me choco con alguien y estoy apunto de caer al suelo si no fuera porque me agarra.

-Hola, ¿a donde iba mi bebe tan despistada?

Mark.

-Sabes que odio que me llamen bebe. Voy a casa de Linna ayer perdí el móvil en la fiesta y voy a ver si ella sabe donde puede estar.

-¿Ayer estuviste en la fiesta a la que no quisiste ir conmigo?-dice enfadado.

-No iba a ir, pero me obligaron.

-No me gusta que vayas a sitios y no me avises.-dice apretando los puños.

-¿Sabes qué? No me gustan que me controlen y yo no tengo porque decir a donde voy.

-No te me pongas chula.

-Me pongo como me da la gana.-digo encarando le ya cansada.

Quien se piensa que es.

-No me lleves la contraria, si no te arrepentirás.

-¿Así? ¿y que se supone que me vas hacer?

-Ni te lo imaginas.

-Sabes después de lo que vi ayer en la fiesta, pensaba jugar contigo como lo hiciste tu conmigo, pero después de este numerito, no merece la pena gastar mi tiempo contigo. Que te den.

Paso por su lado para seguir mi camino. Estoy muy cabreada.

-Tú a mi no me dejas.

-Lo estoy haciendo, ¿o acaso te acabas de quedar ciego?

Me agarra fuerte de la muñeca. Me hace mucho daño.

Se ha cerca a mi oído y me susurra.

-Tú y yo seguimos juntos. A no ser que quieras que tu socorrista de mala muerte, acabe en el hospital. Ya sabes que conozco a algunos chicos que lo mandarían de cabeza al hospital sin ningún problema.

Mark en multimedia.