❌Padre Celoso T2❌(TERMINADA)

Cap 2

Narra Madi:

Extraño a Mark.- le dije a Trisha.

Madi, tienes que olvidarte de él, la relación que llevan no es conveniente.-

Porque lo dices?.-

Por dónde comienzo... primero que nada Mark es díez años mayor que tu, segundo, si Harry se entera va a matarte, matarlos mejor dicho, y por último... el sólo te quiere para tener sexo.-

Claro que no, me lo ha demostrado.-

Lo que tu digas Madison.- mi padre interrumpió entrando al cuarto.

Princesa, es hora de ir a casa.-

Ya en el auto se me ocurrió preguntarle algo sobre Mark.

Papá... Mark y tu siguen siendo amigos?.-

Claro, porqué no?.-

Pero ya hace tiempo que no hablan...-

Hablamos casi todos los días.- me sonrió.- Porque?

Solo preguntaba.-

Cuando mi padre se durmió saqué su móvil y conseguí el número de Mark, ya que lo había borrado luego de su última vez aquí.
Luego de tanto dudar, lo llamé.
Pero no debí hacerlo, Mark estaba con otra.
Al terminar la llamada lo único que hice fue romper todo y mi padre se levantó rápidamente.

Que pasa cielo?.- yo solo lloraba.

Nada papá, solo estoy preocupada por la escuela.-

Madison, no me mientas.- se puso de rodillas para hablar seriamente.- Yo se que algo pasa, dime que.-

No es nada papá.- sonreí mientras secaba mis lagrimas.- Te lo juro.

Esta bien.- me abrazó.- Vamos a dormir.
Al día siguiente desperté, mi cabeza estaba por explotar así que tomé una ducha, me vestí y fui a la escuela.

Madison.- Alex otra vez.

Que quieres Alex?.- rodé los ojos.

Quien es el chico con el que estabas hablando hoy en el salón?.- lo ignoré y seguí mi camino, odiaba que me hiciera esas escenas de celos.-

Madison!.- me dió vuelta bruscamente jalando de mi cabello para luego colocar su mano en mi muñeca apretándola con mucha fuerza.

NO VUELVAS A TOCARME IDIOTA!.- grité tan fuerte como para que todos lo que estaban en la cafetería escucharán, Alex se puso nervioso ya que todas las miradas estaban posadas en el.

Vamos afuera.- me llevó del brazo.
Subimos a su auto, pensé que hablaríamos allí pero arrancó y condujo hasta su casa.-

Ya en ella.
Alex por favor, déjame.- dije llorando mientras el me miraba fijamente.

Madison, por favor... deja de provocarme.-

De que hablas!?.- dije.- No entiendes Alex? Lo nuestro se término hace mucho tiempo, porque sigues insistiendo?.

Porque te quiero... y eres mía.-

Claro que no.-

Entonces de quien eres?.- dijo apretando su mandíbula, eso me asustó.

De nadie.-

MIA.-

De nadie.-

Dilo otra vez.- tragué saliva.

De nadie.- me dio una bofetada.

Eres mía?.- me miró fríamente mientras apretaba mi mano.

Lo soy.- Alex sonrió y me plantó un beso en los labios, comencé a llorar y Alex rápidamente de acercó a mi.

Oh no... no llores bebé.- me abrazó.- Sabes que podemos ser felices, solo tienes que obedecerme cielo.-

Estas loco Alex, no lo haré.- dije intentando zafar de sus brazos, pero me apretó más, me estaba quedando sin aire.

Ya verás que si princesa.- me soltó y al fin pude respirar.- Vamos, te llevaré a tu casa, y recuerda... dices una palabra y te irá muy mal.

Estaba en mi cuarto fumando un cigarro ya que mi padre estaba trabajando.
Empecé a fumar gracias a Olivia, una nueva amiga, dos años mayor que yo, la conocí un día que huí de casa, ella me encontró llorando y me ofreció un café y luego me presentó el cigarro, me volví adicta a él, siempre me calmaba.
Luego de fumar unos cuatro cigarros me puse a perfumar mi cuarto y esconder muy bien los cigarros, por qué si mi padre se entera me matará, también me cepille los dientes.
Mi padre llegó y trajo un paquete con él.

Mira Madi, lo envío Mark.- mis ojos se iluminaron.
El paquete tenía vinos españoles y demás bebidas y también unos chocolates muy lindos que de seguro eran para mí, ya que a mi padre no le gustan y Mark lo sabía.

Puedes comerte los chocolates cielo.- fuí a mi cuarto a comerlos y al abrirlos me llevé una gran sorpresa.

"No es lo que creíste, yo te quiero a ti solamente, por favor llámame, te amo." -M.
Muy astuto Mark.

Decidí llamarlo ya que lo extrañaba demasiado.

Hola Mark...-

Madison! cielo, no sabes cuanto sufrí.-

Quien era ella?.- pregunté.

Nadie cielo, una nueva compañera de trabajo, es una zorra.-

Tuvieron sexo?.-

...- se quedó en silencio.

Eso creí.-

Lo siento Madi... fue un impulso.-

No hay de que...-

Tengo buenas noticias cielo, en una semana vuelvo a casa!.-

Porque!?.- pregunté sorprendida

Le cedí mi lugar a alguien que lo necesitaba más y... lo hice por ti más que todo, porque quiero estar contigo.-

Fui a dormir feliz, va no del todo, sabía que mañana tenía que volver a ver a Alex y eso me asustaba mucho.
No le digo a mi padre porque se que el lo mataría y no quiero que esté en la cárcel, moriría sin el, por el callaría el tiempo que sea.