¿Me perdonas? | RiLen

Capítulo 05: ¿Por qué debería callarse?

RIN

Mi mente queda en blanco. ¿Qué hace ella aquí? Un escalofrío recorre mi cuerpo de forma amarga, recordándome lo poco agradable que es su presencia para mí. De nuevo, ¿qué hace ella aquí? Sus labios aún mantienen intacta una cruel curva, prometiéndome que, sea lo que sea, sus palabras serán veneno. Y la verdad, no estoy segura de que me haya librado de su anterior ración.

Los recuerdos de aquella noche golpean mi cabeza, dejando un dolor en mi pecho. La imagen de Len y ella, casi montándose como animales...¿Yo pensaba perdonar así de fácil? Los gemidos desesperados por más placer, esos ruidos que se escuchaban detrás de la puerta. Demonios, ¿así de fácil iba a ser?

—Ey, ¡estúpida! ¿Pensabas que al regresar acá todo volvería a ser como antes? —su cuerpo retorciéndose bajo las manos de él, las misma manos que alguna vez recorrieron mi cuerpo con dulzura, amor— ¿Qué ibas a hacer la misma zorra que todo lo consigue? Porque si piensas en la mínima posibilidad de que es así, te equivocas —la sonrisa de antes se ensancha aún más en su rostro.

Tiene razón. Nada volverá a ser como antes. ¿Qué pretendía al besar a Len? Lo sé, pero a la vez, me niego siquiera a pensar en la posibilidad de que ocurra.

—¿Qué haces aquí? —mi sorpresa es grande cuando Len, quien a permanecido en absoluto silencio, habla. Su semblante es frío, a la espera de una catástrofe, y eso no son más que puntos a favor de mi mal presentimiento.

Por una fracción de tiempo veo el dolor recorrer las facciones de Miku. El presentimiento crece, junto con las dudas. ¿Qué ha sido de ellos dos después de mí?—Tengo derecho a estar aquí, ¿no crees? Después de todo, sigues siendo...

—¡Cállate, Miku! —la agresividad en la voz de Len, me sobresalta, pero es lo que necesito para saber que ellos dos...Que sin mí en el camino, ellos dos...

Por fin estuvieran juntos. Porque, de otra manera, ¿por qué Len reaccionaría así? ¿Cuál sería el objetivo de no dejarla hablar? Después de todo, sigues siendo...¿mi amigo? No, claro que no. Al menos no cuando comparten un pasado de lo más...íntimo.

Mi corazón bombea lágrimas de sangre cuando observo la evidente complicidad que ocurre entre sus ojos. Un secreto es la llave de muchas puertas, sin embargo, todas acaban en el mismo punto: dolor. Dolor de saber que la persona que amabas comparte con alguien más la conexión que compartían antes.

—¿Por qué debería callarse? —suelto, antes incluso de ser consiente— ¿Es algo que yo no debería saber? Como, no lo sé, que aún sigues con ella.

Como a cámara lenta, veo el rostro de Len palidecer, y el de Miku, sorprenderse. Sus gestos, sus reacciones, son el detonador que hace explotar mi mal presentimiento. Él...nunca aprenderá, ¿cierto? Mi corazón palpita, como un terremoto destruyendo todo lo que habita en él. Una sacudida por un pedazo de mi corazón.

—No lo entiendes, Rin, no lo hago por...

—¡Cállate de una maldita vez! —le corto—Me das lástima. ¿Cuándo aprenderás lo que es realmente amar a alguien? Que un par de piernas abiertas no es lo mas importante que te puede entregar una persona. ¡Pero felicitaciones! Miku es perfecta para ser tu media naranja: patética, egoísta, y sobre todo, ¡le encanta que estés entre sus piernas! Después de todo, jamás perdieron el tiempo, ¿cierto?

No le doy la oportunidad de explicarse, apenas veo que quiere acercarse a mí, salgo corriendo del lugar. ¡Más estúpida no puedo ser! Creer que podríamos arreglar las cosas, aunque sea para poder quedar sólo como amigos, es...¡Ah! Siempre tengo latente en mi cabeza que han pasado, más o menos, dos años, ¡tiempo más que suficiente para arrancar a alguien de tu corazón!, pero ¿cómo olvidar a alguien que marco con fuego su presencia en mi vida?, o peor, ¿cómo olvidar a alguien como Len Kagamine, que como mínimo, es una caja de sorpresas?