Mi Primer Amor (VCEP2)

Capítulo 3

Un pantalón negro, unas botas del mismo color y una blusa color azul marino era mi outfit del día de hoy, dejé mi cabello liso y apliqué rimel y labial. Wade llegaría en unos momentos y yo estaba realmente nerviosa por como mi papá iba a actuar.

"Ya llegué"— escribió Wade.
"Ya bajo"—respondí.

En cuanto bajé mi papá me miraba fijamente y mi madre me sonreía divertida por la situación, abrí la puerta de la casa y ahí se encontraba Wade recostado en su auto, vestía una camisa blanca en cuello en V, la cual dejaba ver parte de sus tatuajes, un pantalón negro y una chaqueta de cuero.

— Hola— besé su mejilla y el besó la mía.— ¿Quieres entrar?

— Hola—  sonrió— ¿Y eso?

— Mi padre quiere ver con quien me voy— suspiré— Si no quieres no pasa nada.

— Claro que entraré Isabella, si eso sirve para que podamos salir más a menudo lo haré  — rió— No pasa nada. 

Entramos a mi casa y ví como mi madre sonreía, al parecer Wade si era lo suficientemente guapo.

— Buenas noches señores Hemmings —  pronunció  a mis espaldas.—Mi nombre es Wade.

— Mucho gusto—  dijo mi madre— Yo soy Leah, la madre de Isabella, y el Zack el padre.

—Mucho gusto—  dijo por primera vez mi padre— ¿A que debo esta presentación?—  dijo divertido.

— Es que vamos a ir juntos a la fiesta, y me pareció apropiado que ustedes vieran con quien iba.

— Que bueno princesa, que confíes en nosotros.—  sonrió mi padre —¿Y se conocen de la escuela?

— Si señor—  dijo  Wade.

— Muy bien Wade, espero verte más seguido por acá—  dijo sonriendo— Recuerda no llegar tan tarde hija, y si vas a beber alcohol no bebas tanto.

— ¿Me estas dando permiso para beber?

— Hija, yo también fui joven y se como son esas fiestas.

— Esta bien, los quiero adiós.—  dije saliendo por la puerta.

— Hasta luego— dijo Wade— Que tengan una buena noche.

— Isa espera—  gritó mi padre— Nada de sexo. 

 — Zack, no seas así—  mi madre soltó una carcajada y yo sentía como mis mejillas iban tomando un color rojo y como Wade se reía silenciosamente.

En cuanto nos subimos al auto ninguno de los dos decía alguna palabra, era cierto que no nos conocíamos mucho, pero aunque estuviese en silencio no era un silencio incómodo.

— Me agrada tu papá

—Creo que tu también le agradas — reí—  el no suele comportarse así.

— Tengo un don llamado encanto Isabella— sonrió— Te ves muy linda hoy.

— Gracias, tu también

— ¿También me veo linda?

— También te ves guapo hoy.

— Lo sé Isabella— rió y yo también — Muy bien, ya llegamos.

En cuanto bajamos del auto la fiesta era en una casa de algún chico que no conocía, era bastante amplía y se podía ver a varios chicos ya completamente alcoholizados.

— ¿Vamos por algo de tomar? 

— Claro— dijo entrelazando nuestras manos y llevándome al interior de la casa.