Capítulo 6

10.6K 528 16
                                    

Wade condujo hasta una avenida algo alejada del centro de la ciudad, en cuanto llegamos había chicos en autos lujosos, y en otros no tanto, también había motocicletas, y lo que nunca falta chicas ligeras de ropas. En cuanto nos bajamos el olor a marihuana y cigarrillo inundó mis fosas nasales, si mis padres vieran donde estoy metida estoy segura que me mandan a un convento y me dejan ahí hasta que cumpla ochenta años, no sea atractiva para nadie y no me pueda mover.

— No te alejes de mi.— susurró en mi oído y entrelazo nuestras manos.

Caminamos entre la multitud hasta llegar a donde se hacían las apuestas, Wade empezó a hablar con un chico más tatuado que el, pero en ningún momento soltó mi mano.

  — Wade—  dijo una voz femenina— ¿Y quien es la afortunada?

— Kim— rió Wade soltando mi mano por primera  vez.—Te extrañé—  dijo abrazándola y besando su frente.— Estas cada día más guapa.— rió y yo no pude evitar sentir una punzada en mi interior.

  — Yo también te extrañé, creí que no te vería más por acá.

— No te desharás de mi tan fácil.

— ¿Y bien no me vas a presentar a tu acompañante?

— Ella es Isabella.

— Mucho gusto—  dije incómoda.

— Soy Kimberly, pero me dicen Kim—  sonrió— Y tranquila, Wade y yo somos amigos.

— No pasa nada—  ella pusó los ojos en blanco.

— ¿Y bien, vas a correr?

— Eso parece.

— Y supongo que tu correras con el— se encongió de hombros.

Wade me miró incómodo y yo no pude contener mis palabras.— Claro que correré con el.

— ¡Genial!—  chilló—  pero vayan rápido que ya va a empezar.

Caminamos hacía el auto de Wade, sabía que el estaba nervioso pero no por correr si no por ir conmigo.

— Si quieres te espero acá y corres con Kim

— No, quiero que tu me acompañes.— sonrió.— Kim es lesbiana.

— Ohh.

Nos adentramos al auto, Wade me indició que me colocará el cinturón de seguridad y que no gritara ya que lo ponía algo nervioso, yo solo asentí. Cuando dieron la señal de salida Wade aceleró, quería gritar pero no lo hice, lo observé y se veía bastante atractivo, ver como sus manos sujetaban el volante me parecía excitante, digamos que tengo una obsesión por las manos fuertes.

Los segundos pasaban y sentí como el auto frenaba con mucha fuerza, el me miró sonriendo y pude descifrar que había ganado.

— ¡Esto es genial!— gritó Wade— Eres mi amuleto de la suerte.— rió.

Nos bajamos del auto y todos corrieron a felicitar a Wade, decidí mantenerme algo apartada ya que el debía tener su momento, mis ojos deambulaban por el lugar, tenía curiosidad y quería saber que más se veía por allí, ya que probablemente sería mi primera y ultima vez en un sitio así.

Sentí ganas de vomitar cuando vi como Nicolas y una rubia de grandes pechos se estaban besando y prácticamente restregando, en verdad me sentía rara, el quería arriesgarse por alguien, y en verdad yo tenía la ilusión de que fuese alguien decente y no una rubia que básicamente iba desnuda.
Al parecer notó mi presencia por que nuestros ojos se conectaron y se separó de la rubia, sentí que se acercaba a mi pero en verdad no tenía ganas de hablar con el, ni siquiera sabía el porqué se acercaba a mi.

Caminé para evitar que nos encotraramos, y me metí en el circulo donde Wade se encontraba, ví como se reía con una chica que desconocía y con Kim, en cuanto me vio sonrió y me tomó de las mano atrayéndome hacía su pecho y abrazándome, aspiré el olor de su perfume y no pude evitar sonreír. 

  — Gracias por venir— susurró en mi oído.

— A ti por invitarme.— sonreí.

Nos miramos a los ojos, y no pude evitarlo, me acerqué a su rostro sentía como nuestras respiraciones se mezclaban y antes de que alguien pudiese interrumpirnos junté nuestros labios, al principio fue un beso lento pero luego fue tomando intensidad, su lengua se adentró en mi boca y sentí como sonreía, nos separamos por la falta de aire y no podía evitar sentirme avergonzada.

— Cristie, vayámonos antes de que tengan sexo frente a nosotras.— dijo Kim— Adiós Wade, adiós Isabella.

— Adiós—  dijimos al unísono, nuestras manos seguían entrelazadas.

— Eso fue increíble Isabella, me gustó.— sonrió. 

— A mi también me gustó.— reí.

Estábamos a punto de irnos pero una figura masculina se interpuso en nuestro camino.

— ¿Que haces acá?—  dijo Nicolas.

—¿No es obvio?—  dije. 

— ¿Ustedes estan juntos?— preguntó confuso.

— Si— sonreí.— ¿Y la chica con la que estabas?

— ¿Estabas con una chica?—  dijo Wade.

— Ella ya se fue— se encogió de hombros.

— ¿Ella es la chica por la que te arriesgarías?— soné algo fría. —Selena me caía mal, pero por Dios esta chica con la que estabas tenía pinta de prostituta.

  — Isa yo..— suspiró— Déjalo así, quizás no vale la pena luchar por esa chica, por un momento creí que ella lo intentaría por mi, pero creo que no.

Por un momento, quizás una milésima de segundo sentía que se refería a mi, sus palabras fueron directas y la profundidad de su mirada me hizo sentir que tal vez el podría sentir algo por mi.

— Chicos, ¿esta todo bien?—preguntó Wade.

—Si, no pasa nada,creo que es hora de irnos.— me encogí de hombros.

— Claro, adiós Nico— se despidió.

— Adiós Nicolas.—  sonreí y el solo me lanzó una mirada fría. 

El camino a mi casa fue silencioso, el único ruido que se escuchaba era el de la radio y en ocasiones se escuchaba a Wade cantando alguna estrofa de la canción. Miré mi celular el cual no había revisado en toda la noche, y pude ver que eran casi las 11, ví que tenía varios mensajes de mis padres por lo cual supuse que en cuanto llegara a casa tendría varios problemas.

— Gracias por hoy, fue increíble.

— A ti, en verdad no creí que aceptaras venir.— rió. 

— Bueno,  me tengo que ir, tendré algunos problemas por demorarme.—sonreí.

— Te acompaño a la puerta.

Bajamos del auto, estábamos en la puerta de mi casa y cuando me iba a despedir el tomó mi rostro entre sus manos y me besó, fue un beso pasional pero tierno a la vez, creí que se iba a intensificar pero la puerta se abrió dejando ver a mi padre no tan feliz.

— Creo que es hora de que te vayas Wade — dijo serio—  Isabella entra. 

Antes de entrar miré a Wade pidiéndole disculpas, el solo articuló un "no importa" y una hermosa sonrisa. Entré a mi casa y vi a mi madre sentada en el sofá, por lo cual supuse que me esperaba un gran regaño.

____________________________________________________________________________________

Dos capítulos en un día omg, espero me apoyen con un voto, por que eso es muy importante jaja, gracias por leer de nuevo. ¡Nos leemos pronto!

Pido disculpas de nuevo si tiene faltas ortográficas.

Mi Primer Amor (VCEP2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora