Capitulo 10: Una mala noticia

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Si existe algo que quisiera cambiar del pasado, tan solo una pequeña cosa, sin duda hubiera sido esa, como me arrepiento de no haberte apoyado desde el principio.


Salí del taxi y corrí hacia la entrada, pasé por recepción y agitado pregunté en donde se encontraba.


―habitación 212 joven―respondió aquella enfermera con una sonrisa que me hizo calmarme un poco, estaba bastante exaltado a pesar de que Sakuma me había dicho que estaba bien


Llegué a la habitación después de unos minutos en los que debo decir que me perdí ya que me dijeron el número pero no la dirección, toque la puerta y al no escuchar respuesta la abrí lentamente.


― ¿Puedo pasar? ―pregunté un poco bajo al ver a su padre un tanto serio

―pasa hijo―me respondió amablemente caminando hacia a mi―iré a hablar con el doctor, esperen aquí

―de acuerdo―habló Kidou quien se encontraba acostado en aquella cama, no me gustaba verlo así

― ¿Estás bien? ―me acerqué despacio con algo de duda

―estoy bien pero ¿Qué haces aquí?, ¿Quién te dijo que estaba en el hospital?

―Sakuma me habló por teléfono―me hinque a un lado de la cama―por eso vine

―ándale, delátame Fudou, yo que trato de ser buen amigo y me mandas al barranco―suspiró―pero bueno eso me pasa por intentar ser bueno contigo

―lo siento pero ya sabes que yo no sé mentir, está en mis genes―dije de broma

―no tenias porque molestarte―me tomó de la mano―por eso no te llamé, no quería interrumpir tu trabajo a parte no es algo grave

―no importa si no es algo grave, me preocupas, el trabajo no importa lo que importa eres tú

―ah que lindo―interrumpió el de pelo largo que tan solo nos miraba como señora de 40 viendo la novela de las 10―ustedes dos son tan lindos

―metido―hablé por el bajito ante la risita del de rastas


Los tres mirábamos por la ventana a su padre hablar un poco alterado con el doctor


―seguro que no es nada malo―le dije al oído mientras le daba un tímido abrazo, él me tomo fuerte la mano mientras me sonreía


Aquel tipo entro de lo más rápido a la habitación azotando la puerta, Sakuma se asunto un poco y la mirada de Kidou dejaba ver que él también, corrió hacia a mí y me arrojo contra el piso para comenzar a golpearme lo más fuerte que pudo.


―acabas de arruinarle la vida a mi hijo eres un hijo de...―intenté quitármelo de encima pero no pude, Kidou y Sakuma tuvieron que ayudarme.


Mi nariz sangraba y me dolía el costado, salí de la habitación y busqué desesperadamente al médico de antes, ¿Por qué el padre de mi novio había entrado directo a golpearme?


―oiga, espere―lo detuve antes de entrar al elevador―necesito que me diga que tiene

― ¿Qué tiene que? ―preguntó extrañado esperando un momento y dejando que el elevador se fuera

―el paciente de la habitación 212, ¿Qué tiene?, ¿Por qué si padre esta tan alterado?

― ¿Eres algún familiar del paciente? ―habló revisando el expediente que llevaba en las manos

―soy su novio―respondí serio y mirándole a los ojos― ¿Qué tiene?

― ¿Su novio? ―se quedó pensativo por un momento― ¿Cuál es tu nombre?

―Fudou Akio, ¿Qué pasa?, ¿Todo está bien? ―pregunté pero mis preguntas no eran contestadas

―mira chico...tu novio se desmayo, lo revisamos pero no encontramos nada aun así decidimos hacerle unos estudios para estar seguros, tomamos una muestra de sangre y realizamos una prueba―tomó aire―acaban de entregarme los resultados y―me enseño la hoja que llevaba―salió positivo, es mejor que tú también te hagas un prueba, puedes ir con la enfermera que está ahí y solicitar que...

―no, espere―agaché la cabeza para respirar un poco―esto no puede ser, ¿Esta seguro doctor?, debe ser un error, eso no puede ser, él...no

―lo siento, no hay falla―hazme caso y por favor acude con la enfermera ¿Está bien?


El doctor se aparto de aquel lugar, yo no podía hacer nada, ni palabra alguna me salía, camine despacio hacia donde estaba aquella enfermera y le pedí que me hiciera la prueba, no podía hacer nada más.


― ¿Estás bien? ―preguntó Sakuma recargado en la puerta mientras yo me volvía a poner la chamarra

―no―respondí sin mucho interés, quería irme, ya no quería estar en ese lugar

―Kidou está preocupado―dijo serio acercándose a mí y sentándose a mi lado―él quiere hablar contigo

―ahora no puedo―respondí seco―debo irme

―no es su culpa Fudou, él no sabía.

―joven ya puede irse―interrumpió la enfermera quien entraba a aquel lugar―sus resultados estarán mañana en la mañana

―gracias―dije fingiéndole una sonrisa mientras la veía salir luego de haber tomado una carpeta de la cama

―deberías dejar que te revisen―sugirió el de pelo largo―te golpearon fuerte, es mejor que te vean ¿No?

―quiero estar solo ¿Está bien? ―le respondí subiendo el tono de voz

― ¿Estás seguro?, su padre acaba de decirle, me pidió que saliera, que lo dejara solo, ¿Quieres dejarlo solo tú también? ―preguntó mirándome fijamente a los ojos


Si tuviera una oportunidad de regresar en el tiempo y cambiar algo, lo que sea, cualquier cosa, tener esa oportunidad entre mis manos yo...no la tomaría, esa fue mi decisión y estoy bien con eso.  

La noche de las mil estrellasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora