Capítulo Veinte.

9.9K 731 222
                                    

Miley.

-Estás preciosa.- me dice Bruno con una perfecta sonrisa.

-Ya me lo has dicho como unas seis veces.- digo divertida y él me mira aún sonriendo.

-No me cansaré de decirlo.- muerdo mi labio inferior evitando abalanzarme sobre él, ¿cómo puede ser así de perfecto?

-¿Te gusta la comida?- pregunta cortando su pequeña tarta del postre. Asiento con la cabeza y bebo vino de mi vaso.

De momento mi móvil comienza a sonar, lo saco del bolso y en la pantalla veo el nombre de Skin.

-Es Skin.- le digo a Bruno para no parecer una maleducada cogiendo el teléfono sin más.-¿Qué pasa Skin?- pregunto irritada.

-Miley tienes que volver a casa, el horno no se enciende y no puedo cenar.- dice rápidamente.

-¿Cómo?

-Que el horno no va, aprieto los botones y no se enciende. Ven a casa porqué sino no puedo cenar.- chasqueo molesta.

No me pienso marchar.

-Ves al contador y sube algún botón que esté bajado o pregúntale a David.- escucho varios murmullos al otro lado de la línea y frunzo el ceño extrañada.

-Okey...

Cuelgo sin más para que no me continúe hablando. Sonrío mirando a Bruno y este alarga la mano para agarrarla.

-Miley, siento que no estás a gusto conmigo.- dice con voz dulce.

-¿Qué dices? Por supuesto que estoy a gusto Bruno, eres mi novio y me gusta pasar el tiempo contigo.- me sonríe ampliamente y comienza a acercarse más a mi por encima de la mesa con la intención de besarme cuando mi móvil comienza a sonar otra vez.

-Mierda.- murmura él colocándose bien en su asiento.

-¿Quién?- pregunto molesta.

-Miley soy Aaron, ¿puedes volver?- pregunta con su voz de niño pequeño.- Me duele la cabeza y Alexia está con la música a todo volumen y no la quiere bajar.

-Pídele ayuda a Skin.- digo poniendo los ojos en blanco.

-Se ha ido...

-¿Se ha ido?- pregunto frunciendo el ceño y vuelvo a escuchar murmullos.-¿Con quién estás?

-Estoy solo en mi habitación. Skin see fue...a casa de David.

-Pues espera a que llegue, en menos de una hora llego yo a casa.- dicho esto cuelgo.

Suspiro agotada y pongo el móvil en vibración para después guardarlo en el bolso. Me doy cuenta de que el camarero vino y trajo la cuenta, la cual ha sido pagada por Bruno.

-No tenías porque pagarlo tú todo.- digo con una pequeña sonrisa de agradecimiento.

-Aquí tú eres la reina, a demás que la cita ha sido mi idea así que pago yo.- río negando con la cabeza y lo imito cuando él se levanta.-¿Quieres que demos una vuelta?

-Me encantaría.

Salimos del lujoso restaurante y caminamos por la acera iluminada por las luces de las farolas, en la calle no hay gente. Está totalmente vacía, tan solo estamos él y yo, aunque hayan algunos coches aparcados. Es todo tan romántico.

Caminamos bajo la luz agarrados de la mano, apoyo mi cabeza en su hombro y él deposita un lento beso en mi cabeza.

-¿Dónde estuviste toda mi vida Miley?- pregunta agarrando mi cara con sus manos.

Por fin de vuelta [EPEMN#3]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora