Querida coleccionista de mundos:
Era divertido ir en el auto contigo, prendías la radio y comenzabas a cantar las canciones navideñas, a todo volumen, o te sentabas silenciosamente con un libro en la mano, a veces hablábamos de cosas innecesarias sobre mi amor hacia lo imposible, y tu agarre hacia los infinitos, no creías en los finitos, no creías en los amores finitos, en los océanos finitos, para ti nada tenia fin, y eso era justo lo que necesitaba.
ESTÁS LEYENDO
Algo A Lo Que Aferrarme
Short StoryY como ya he terminado con el corazón roto una vez, he decidido que te amare con solo papel y tinta, escondiendo todo en encierros y puertas, con pensamientos y poesía, te amare mientras la nieve caiga y el frio queme, cuidando el secreto mejor guar...