Vamos a reflexionar un poco, ¿Qué sabes de la vida?, no digo que yo sepa mucho o mas que tu pero piensa en eso, la vida es algo cruel sinceramente no me gusta pero vamos estamos "obligados" a vivir porque si nos suicidamos otras personas sufrirían y eso no ayuda mucho o incluso simplemente no lo hacemos por miedo, es un pensamiento egoísta e incluso irracional pero así somos los humanos o al menos así nos veían algunos seres. Gabriel estaba siendo obligado a hacer algo que no deseaba pero cuando un superior te pide que hagas algo debes hacerlo aun que no quieras, aun que te duela dentro de la mente de este ángel algo se había roto el dolor que sentía en estos momentos era demasiado grande no podía mas hasta que comenzó a rogarle a Dios, no, esta vez tendría que ayudarse solo ya que su padre le había dicho que no viniese a este horrible lugar en el que se había transformado su creación, levanto su vista nublada por las lagrimas y solo vio el rostro de horror de Makoto pero luego vio todo en cámara lenta, Makoto había cambiado su expresión ahora era más agresiva llena de odio hacia quien lo atacaba, cerro sus ojos porque no quería verlo de tal forma pero solo escucho el grito de aquella mujer quien lo estaba lastimando.
-¡Gabriel!- Abrió sus ojos lentamente y quien estaba estirando su mano hacia el era Azrael quien tenía una mirada desesperada, llena de temor, tomo a Gabriel a la fuerza para llevárselo a su habitación mientras tanto Makoto había golpeado a Lilith esto provoco que antes de soltar a Gabriel le dañase mas sus alas y que además le arrancara una que otra pluma haciéndolo también sangrar.
- ¡Detente no puedes golpear a una mujer!- El que dijo eso fue Haruka el cual intentaba detener a Makoto pero este solo lo empujo con fuerza hacia atrás y seguía golpeando a la chica por el contrario los Mefistófeles no hizo nada ya que estaba disfrutando del espectáculo mientras Lilith intentaba defenderse sin éxito mientras tanto Gabriel se abrazaba a si mismo mirando a un solo punto en el suelo susurrando oraciones.
- Vamos Gabriel reacciona vuelve, ¡maldita sea tu dios no te ayud...- Azrael no pudo terminar de hablar ya que el rubio saco sus uñas las cuales se afilaron y crecieron y araño el rostro del ángel caído el cual se impresiono, los ángeles blancos no solían atacar a nadie ya que eran, bueno ya saben, angelicales y celestiales rara vez sus bestias salían a la luz ¿bestias?, oh claro que si ellos si tenían "demonios" dentro de ellos cada vez que hay guerras entre la luz y la oscuridad tienen que luchar hasta no poder mas, algunos tienen la suerte de que se les otorga mas fuerza como lo que ocurría con Gabriel entre otros ángeles. El chico de ojos azules se levanto de forma lenta escondiendo sus alas las cuales tenían manchas de sangre, salió de la habitación y agarro por el cuello a Nanase Haruka con una sonrisa algo rota y con los ojos llenos de lagrimas.
- ¡Argh...!- Makoto se detuvo y miro a Gabriel alejándose de Lilith esta aprovecho de ir corriendo donde Mefistófeles y esconderse tras el.
- Gabriel...
- ¡Silencio!, ruégale a Dios padre nuestro que te perdone Tachibana, hemos o mejor dicho e dejado que se cometa un pecado, lo peor es que deje que me dañara una mujer que tiene uno de los siete pecados capitales.- Lilith le miraba aterrada muy pocas personas habían visto así a este celestial ángel así ya que solía ser pacifista pero algo se rompió dentro de el y fue la paciencia junto con el amor hacia la tierra, presiono la garganta del ojiazul pero lo azoto contra el suelo por los pasillos solo se escuchaban ruidos pero no se poseía ver nada ya que solo sus "almas" se encontraban presentes, no sus cuerpos humanos.
- ¡Muy bien Haruka, o recuerdas por las buenas o por las malas yo no recibí tanto daño por nada!-El muchacho rio bajito provocando un frio por la espalda de todos los presentes, Makoto abrazo a su amigo y mientras forcejeaba el contrario para librarse el castaño solo le susurraba al oído.
- Shhh, todo estará bien, nada pasara, vámonos.- Haruka miraba atónito con el rostro herido y dirigió su mirada Azrael el cual tenía herido cerca del ojo izquierdo y que además igual tenia dañada parte de su mejilla, no entendía nada o no muy bien su cerebro vagamente le recordaba el rostro de Gabriel y Makoto pero se sentía aterrado extrañamente como ese miedo que sientes cuando sabes que alguien se ira de tu vida y que jamás lo volverás a ver. Cuando por fin el mas alto logro calmar a su amigo lo tomo en brazos mientras todo permanecía en silencio de cierta forma ya que las gotas de lluvia se escuchaban de fondo , cualquiera diría "justo en el momento exacto se a puesto a llover" pero no, esto no ayudaba a ninguno de los que estaban ahí quienes provocaban esto eran los de "arriba" pero lo hacían con una segunda intención o mas bien como un aviso a los ángeles una nueva guerra estaba a punto de estallar y no sería una corta lo que se venía no era nada bueno lo que mas atormentaba la mente y corazón de Makoto era su amor por un ángel caído el cual sería su perdición pero aun no sabía si podría ocurrir lo mismo que ocurrió con Gabriel y Azrael.
// Hola hola, ¿como han estado? se que e estado MUY ausente y lo siento de verdad :c no es por que yo lo desee así, estaba pensando en hacer un cap especial de Azrael y Gabriel contando su historia o una historia aparte de esta ya saben otro libro aparte contando la historia de ellos dos y como es que Gabriel y Makoto se conocieron como nacieron el inicio de todo, ¿que me dicen ustedes?, quería agregar que ya se que nombre le pondré a esta historia y sera "Nuestra dulce blasfemia" ya la registre con este nombre y solo quería avisarles para que no se pierdan o no sepan cual era "You are mine". Gracias por esperar,comentar,leer y/o votar<3
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Nuestra dulce blasfemia (MakoHaru)
FanfictionMakoto era un famoso pianista, solía tocar hermosas pero tristes melodías ya que la mujer que alguna vez amo murió ante sus ojos pero ahí aparece Haruka Nanase, para darle un giro a la vida de este famoso pianista. Portada dibujada por: Antonieta Sa...