Gabriel mientras abrazaba a su viejo amigo pensaba por que los humanos eran así, no tenía sentido, su creador les había dado belleza, mente propia, un cuerpo con un perfecto funcionamiento además de único, ¿Por qué?, soltó un suspiro hondo pero que además se escucho un suave jadeo tembloroso.
-Shhh...Todo está bien ahora Gabriel...
- Estas mojado
- Estaba afuera, lo siento
- No, no está bien...Me preocupas.- Con los ojos llenos de lagrimas ladeo su cabeza y vio a Haruka mirándolos con los ojos bien abiertos y la boca semi abierta en ese momento cerro sus ojos con fuerza y se alejo de Makoto
- ¿Ocurre algo Gabriel?- El solo guardo silencio y señalo a un costado haciendo esto el castaño miro para su sorpresa Haruka estaba mirando y su rostro era como si hubiese visto algo horrible.
- ¡Haruka!- Grito Makoto y alejándose bruscamente de Gabriel corrió donde estaba el ojiazul el solo quería correr pero no lo hizo no había un porque, no había razón ¿o si?, ¿Qué clase de relación tenia con ese pianista?, no podía negar que tenía una figura perfecta, unos ojos hermosos llenos de amabilidad pero a la vez de dolor pero no se opacaban por eso, un cabello que daban ganas de acariciar, dios tenía tantas ganas de besarlo, ¡ESPERA! ¡¿QUÉ?!, se sonrojo por completo, por otro lado Gabriel miraba como se iba Makoto, sabía que era cuestión de tiempo para abrir la caja de Pandora, el sería el encargado de ponerle fin a esto siempre era así...El estaba condenado a separar ángeles de humanos, ángeles de ángeles caídos, el se encargaba de romperles el corazón.
- Mako...Makoto, ¿Ese es tu nombre verdad?- Haruka quería que Makoto creyera que no lo recordaba muy bien pero el sabia que el chico de hermosos ojos verdes era muy importante para el por qué cada vez que lo veía ya no se sentía muerto en vida, sentía que su corazón latía muy rápido pero ¿Por qué? Dos hombres no es natural ¿o sí?, ¿Qué es correcto o que no lo es?, solo sabía que su único "amigo" en estos momentos era Azrael el cual salió de la habitación donde estaba Gabriel y mantuvo su mirada fija en el, su mirada era seria y fría a la vez esto hizo que se angustiara un poco dando dos pasos hacia atrás.
- ¿Te encuentras bien?
- Claro...Esto...
- ¿Ocurre algo?
- Ese chico, ¿te gusta?- Pregunto sin pensar cuando ya había reaccionado sacudió su cabeza algo apenado pero sus mejillas no se sonrojaron.
- ¿Qué?, es mi mejor amigo, ¿Por qué la pregunta?
- No,No es nada
- Haruka...
- ¿Si?
-...No...No es nada.- Se despidió y dio media vuelta para irse, debió decirle algo pero no lo hizo, debió decirle que se amaban pero no.
- Ma...- Antes de poder llamarlo alguien paso su mano de forma brusca sobre el hombro del ojiazul, quien lo hizo fue Mefistófeles el cual no dejaba de sonreír.
- Haru, déjalo ir después de todo el nunca fue importante en tu vida.- Gabriel entro en pánico cuando lo vio y su cuerpo comenzó a temblar dando pasos hacia atrás negando lentamente pero Azrael se puso frente a el, Makoto vio como se puso su amigo y lo escucho esto hizo que se molestara más de lo que estaba así que volteo en su expresión estaba llena de rabia, se acerco de forma brusca empujando a Mefistófeles alejándolo de Haruka.
- ¿Nos conocemos?, ¿Cómo sabes qué relación tenia con el señor Nanase?, el era mi pareja pero si el ya no me ama ni me recuerda no puedo hacer nada, no es que me rinda pero así son las cosas pero ¡jamás digas que jamás o que nunca fui alguien importante en su vida porque lo fui!- En ese preciso instante Makoto abrazo a Haruka de forma algo posesiva pero este solo se dejo, no le desagradaba pero su corazón latió muy fuerte y rápido cuando lo escucho decir que fueron pareja es como si hubiese querido eso desde siempre. Mefistófeles lo miro con asco, odiaba a los ángeles, odiaba todo de ellos así que con una sonrisa levanto su brazo lanzando una ráfaga contra Makoto, el cuerpo de Makoto cayó al suelo pero su alma quedo de pie, su ropa era blanca y sus alas eran inmensas lo mismo ocurrió con Gabriel, sus cuerpos eran solo embases nada más que eso, solo los ángeles y los arcángeles caídos podían verse los humanos no, una enfermera que recién salía de una habitación corrió al cuerpo inerte de Makoto.
- ¡¿Está bien señor?!, ¡Señor!, ¡¡DOCTOR!!- La chica corrió en busca de un doctor por el pasillo y luego doblo a la izquierda corriendo. Haruka lo miraba con los ojos bien abiertos, esto no podía ser verdad ahora se dio cuenta de que su relación con Makoto sería imposible pero no quería aceptarlo.
- Lilith...
- ¿Si Mefistó?
- Arráncales las alas...
- ¡Sera un placer!- La chica cerro sus ojos dejando caer su cuerpo pero su alma seguía en pie sus alas negras se desplegaron eran magnificas al igual que las de Makoto y Gabriel, el castaño dio dos pasos hacia atrás, estos seres oscuros eran famosos por su forma sádica de matar a los ángeles.
- ¡Makoto!- Quien grito fue Gabriel quien se había dejado caer al piso.
- ¡Quédate ahí Gabriel!, nada...nada malo pasara.
- Eso crees tu.- Le dijo la chica la cual se acerco a Makoto riendo de forma cruel fue entonces cuando el ángel de cabellos rubios se levanto respiro hondo y corrió donde Lilith a la cual la empujo haciendo que callera de espalda.
- ¡No te atrevas a tocarle un solo cabello!- La chica se levanto molesta y tomo de la muñeca a Gabriel para jalarlo hacia ella y hacerlo caer dándole una patada en la rodilla con un movimiento rápido lo tomo de las alas llevo su pie derecho entre ella para afirmarse de la espalda y comenzó a jalar las alas con tanta fuerza que estas comenzaron a sangrar por donde comenzaban y lentamente se comenzaban a romper.
- ¡¡AHHH!!
- ¡¡GABRIEL!!
// Hola,Hola, muchas gracias por leer,comentar y/o votar, espero te haya gustado el cap.
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Nuestra dulce blasfemia (MakoHaru)
Fiksi PenggemarMakoto era un famoso pianista, solía tocar hermosas pero tristes melodías ya que la mujer que alguna vez amo murió ante sus ojos pero ahí aparece Haruka Nanase, para darle un giro a la vida de este famoso pianista. Portada dibujada por: Antonieta Sa...