The Perfect Strategy -SUGA- BTS

CAPÍTULO 44... Suga...

(♣♥Brooklyn...♥♣)

Finalmente dije todo el discurso que tenía preparado para esa noche.

Las palabras se atoraban en mi garganta porque a pesar de que sabía que AhYoung era una mujer hermosa, me era difícil aceptar que papá se estaba casando de nuevo.

Todos levantaron sus copas y se la llevaron a los labios con motivo de celebración. Está bien... No sé porqué estoy así...

Caminé hasta un pequeño balconcito que el salón poseía y me senté a la orilla del barandal. El aire frío golpeando mi piel expuesta, pero llevándose mis pesares ligeramente.

—Debió ser difícil decir todo eso, ¿cierto? —giré la cabeza para mirarlo. Él tenía un semblante similar al mío, lo que me sorprendió.

—No, no. Está bien —asentí lentamente con la cabeza— Mientras ellos sean... ya sabes...

—Felices... —se encogió de hombros como si comprendiera exactamente mis emociones y al parecer era así, porque después de todo, su mamá también se estaba casando— ¿Cómo te sientes?

—Como si los cuentos de hadas no existieran realmente... —me encogí ahora yo, volteando a ver de nuevo al paisaje nocturno.

Las estrellas, la luna, las nubes... todo.

— ¡¿Cómo que los cuentos de hadas no existen?! —esa nueva voz me sorprendió, por lo que en un segundo ya estaba mirando de nuevo hacia adentro.

El chico blanquecino estaba cargando a su pequeño hermanito, Yoohyun... y no era sólo eso, ambos vestían elegantes smokings.

— ¿Qué... qué hacen aquí? 

Jin se hizo a un lado para que ambos pasaran y sonrió ligeramente.

—La perseverancia y la terquedad son sólo características tuyas... —el mayor palmeó el hombro de su amigo, mientras se dirigía de nuevo a la celebración—. Bien, los dejo solos.

—Jin... ¿qué significa est-? —pero el mayor ya me había dejado con las palabras en la boca.

Yoohyun se escurrió de los brazos de su hermano y corrió rápidamente hasta mí, tambaleándome apenas llegó por la efusividad del abrazo y la exigencia que tenía de ser cargado.

— ¡Noona! ¡Te extrañé! —me dio un beso en la mejilla apenas estuvo a mi altura y enternecida sonreí.

—Él quería verte... —esa voz gruesa habló. Lo miré, se rascó la nuca con una mano mientras la otra permanecía en su bolsillo—. Yo también. 

Realmente seguía molesta con Suga respecto a lo ocurrido en la mañana y su labio partido junto con su ojo morado, eran muy evidentes para seguirlo recordando. Aunque eso no le quita lo guapo ¿cierto?...

Me quejé mentalmente cuando pensé en ello y preferí hablar con Yoohyun acerca de cualquier otra cosa, dándole la espalda al más alto.

—Luces hermosa ésta noche... —esas palabras tan cerca de mi oído, citaron un momento muy relevante dentro de mi mente. El inicio de mucho... La fiesta...

— ¿Cómo entraste? —me separé de inmediato, aún con el niño en mis brazos, mirando a Suga curiosa. Era un evento privado y nadie podía entrar sin invitación.

—Jin-hyung me permitió el acceso... —se encogió de hombros sonriendo, como si siempre se saliera con la suya.

No podía hacer nada frente a algo así, Jin tenía permiso para dejar entrar a cualquiera tanto como yo. Sin embargo, el bostezo de Yoohyun llamó mi atención.

— ¿Por qué lo trajiste? Es tarde para su hora de dormir —furiosa de nuevo por su irresponsabilidad con Yoohyun, le reté con coraje.

—Él quiso venir —el menor simplemente se talló un ojo y asintió—; además, si venía sin su compañía, no ibas a querer  hablar conmigo —Yoohyun rodeó mi cuello con sus bracitos y apoyó su cabeza en mi hombro dispuesto a usarme para dormir.

—Eso no quita que sea tarde y no esté en su cama ahora.

—Noona, no regañes a Hyung... Yo quise usar un traje —sonrió ampliamente como si estuviese satisfecho con lo que portaba—. Yo quise venir y salir de noche ¿Está mal? —se separó de nuevo y me miró a los ojos directamente. Diablos... ¿cómo ser fuerte ante ello? Negué lentamente con la cabeza—. Lo siento. No te enojes con Hyung, por favorcito —como cachorrito se acomodó de nuevo en mis brazos y cerró los ojitos. 

Estuve a punto de decir algo similar a un Aw... pero no lo haría frente al hermano mayor. 

[***]

—No puedo creer que uses a tu hermanito de esta manera... —susurré mirando a Suga con los ojos entrecerrados, una vez que el pequeño no se movía mucho.

—No lo uso. Él sólo dijo la verdad —me senté en el barandal con mucho cuidado para no cansarme por tener al niño en mis brazos; el blanquecino me imitó—. Brooklyn, yo quería explicarte que-...

—No. No puedes —le detuve, y alce la voz ligeramente.

—Shh. —me silenció con su indice en los labios, ya que su hermanito se removió ligeramente—. Sí, si puedo y lo haré... Ahora sólo escucha o vas a despertar a Yoohyun.

—Sea lo que sea que tengas que decirme, no estoy lista para escucharlo —cerré los ojos, como si eso tontamente evitara que yo escuchara. 

—Lo siento... —mis manos apretaron mucho más al pequeñín en mis brazos— Lamento todo lo que ha pasado. Lamento haber sido de esa manera contigo. Brooklyn yo... 

Sólo que el tiempo ya se había detenido en mi mente, desde el momento en que escuché la primera frase.