Si el amor no doliera

Capítulo XXV - Un cumpleaños diferente

Hola mis queridos lectores :3

Extrañaba decir eso TnT
Ha pasado mucho tiempo y sé que les prometí actualizar pronto, pero vaya que he estado ocupado y mi esfuerzo dio frutos, les cuento que terminé mi carrera técnica hace poco y me he dado unos días de relajo por todo el esfuerzo que puse para alcanzar dicho logro.

No los quiero aburrir con mi vida asi que les dejo un capítulo nuevo de Emiliano. Él si tiene una vida complicada.

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Los días pasaron y sin darme cuenta Cielo se alejaba más y más de mí. Mañana sería lunes de nuevo y casi nadie recordaba el primer día, en el cual casi fallecen dos personas, entre ellas mi papá. A comparación del resto del grupo, mi familia y la de Cielo teníamos más cuidado en las actividades. A pesar de ello, un sinfin de eventos llenaban de recuerdos mi memoria, y en cada uno de ellos estaba presente ella, Cielo.

Cada día trataba de acercarme más a ella y demostrarle mi cariño y afecto. Rosaba su delicada mano con la mía, conectaba su mirada con la mia en segundos fugaces, la ayudaba en cada competencia, y solo vivía para ella, estaba viviendo por primera vez el significado de enamorarse.

A pesar de ello, Cielo no me mostraba lo mismo y para mi mala suerte todo se debía a Vladimir, ahora pertenecía al campamento gracias a Antonio. Al parecer, él y el chico misterio son hermanos y este último nos siguió por todo el camino hasta acá. Entonces, al mayor no le quedó de otra que pedirle a Berto que se quedara en el campamento en vez que se refugie en el bosque y corra peligro de que le pase algo malo.

Para mí, hubiera sido mejor que se quedara en el bosque y que un oso se deshiciera de él, así ya no estaría en mi camino y tendría camino libre con Cielo. Así es, Vladimir quiere conquistar a Cielo y su primo lo apoya, hasta mis amigos se ponen de su lado.

- Hey, Emil - me sacó de mis pensamientos, Kurt - deja de hacer ese ruido tan estresante y duerme de una buena vez - eran cerca de las 11 pm y solo la luz de la luna me mantenía despierto.

- Lo siento Kurt, las ansias no me dejan dormir - pensar en Vladimir me irritaba y hacía que mis dientes castañeen. Sin contar que faltaban solo dos días para el cumpleaños de Cielo y eso me ponía nervioso, quería hacerle una bonita sorpresa.

Cerré los ojos con la ultima vista de una radiante luna nueva. Antes de dormir solo pensaba en ella, en su voz, en su sonrisa, en su cabello rubio que hipnotiza.

***

- Emil, no sé qué hacer - extrañamente Kurt vino hacia mí a pedir ayuda, suerte la de él que desperté de buen ánimo - no hay ni un centro comercial cerca para comprarle un regalo a Cielo, el año pasado ella me llevó un álbum con muchas fotos de nosotros de pequeños y este año tengo que esmerarme en darle un buen obsequio.
- Cálmate Kurt - lo sujeté de los brazos para que me escuchara y también para que deje de lloriquear - a las chicas les encanta que le regales cosas manuales, hechas por uno mismo.
- Entonces ayúdame a preparar algo para ella - su ánimo se desbordaba y sus ojos brillaron al encontrar una solución a su problema.

Pobre, el cree que yo lo voy a ayudar.

***

Después de insistir por horas accedí a su petición con una condición.

- Esta bien, pero tienes que prometerme algo - antes de aceptar pensé en la manera en la que me podía beneficiar de esto.
- Lo que sea, pero empecemos ya.