cuando somos 2

CAPITULO 9

PI: Federico, ¿Puedo hablar contigo…? (Interrumpiendo la discusión del recién casado con una joven que no era su esposa)
F: ¿Qué se le ofrece, padre…?

El sacerdote esperó a que la muchacha se alejara para comenzar a hablar.

PI: no asistieron a las pláticas prematrimoniales y es importante que comprendas tu nueva responsabilidad…
F: ya me casé… Y mi hijo no crecerá sin un papá…
PI: eso está muy bien, pero hay más…
F: no sé a qué se refiere, padre… Conmigo hable claro…
PI: te acabo de ver platicando con esa jovencita en un actitud algo sospechosa…
F: ¿Ahora resulta que por haberme casado no puedo platicar con mujeres??

Era en parte por esas prohibiciones que la gente inventaba, que la idea del matrimonio le disgustaba a Federico…

PI: tú sabes de qué te estoy hablando… Dudo que tu padre pueda aconsejarte en este tema…
F: ni en ningún otro, padre… Así que no se preocupe… A falta de consejos está la vida para ensenarme todo lo que debo aprender…

Arriba, en su recámara, Cristina peleaba en su interior la batalla más difícil hasta el momento en su vida…

Opción número 1, decirle a su padre que no quería seguir casada con Federico, acabar con esa farsa de matrimonio. Y no volverlo a ver jamás.

Opción número 2, seguir con la farsa del matrimonio por un tiempo prudente, unos meses quizás, antes que naciera el bebé y luego abandonar a Federico.

Opción número 3, esperar a que Federico se cansara y la dejara. Porque si no había querido casarse, era imposible que le resultara gustando la vida de casado.

Con las 3 opciones sufriría igual, de la misma manera que como ya estaba sufriendo… Tenía el corazón roto, pero pensar en su hijo le daba una fuerza desconocida para continuar y salir adelante aunque fuera sola.

>>>>>>>>>>>>>> FLASHBACK <<<<<<<<<<<<<<<

Mientras bailaban la primera pieza ya como marido y mujer, a Cristina la distrajo una escena algo cerca de ahí…

Su padre jaloneaba del brazo a su madre, la reñía por algo… Como siempre… Doña Consuelo sometida en todo por su marido… Bajó la cabeza, mientras Severiano le gritaba.

Era algo que a ella toda la vida le molestó, y no quería eso con su marido…

Se separó un momento del pecho de Federico para buscar su mirada…

C: no vamos a vivir toda la vida con mi padre, ¿Verdad…?
F: ¿Qué…?
C: cuando podamos nos iremos de aquí, ¿No…?
F: no hay cosa que quiera más… Vivir lejos de todo esto…

Cristina lo besó en los labios y luego de sonreírle lo abrazó…

>>>>>>>>>>>>>> Fin FLASHBACK <<<<<<<<<<<<<<<

^^ En la fiesta…

F: papá, estás borracho… (Cruzándose por primera vez en la noche con su padre)
Riv: ¡tengo que celebrar tu boda, hijo!
F: dudo que estés celebrando… Quizás porque me voy…
Riv: porque te casaste con el mejor partido que pudiste encontrar… ¡Este es mi chamaco! (Abrazándolo de pronto, cuando nunca lo hacía)

Con: Federico, ¿sabes dónde está Cristina…?
F: no señora… Hace un buen rato me dijo que iba al baño… Pero no ha vuelto…
Con: quizás ya se está cambiando, el chofer los espera, tienen que irse pronto o perderán el avión…
F: voy por Cristina…
Con: no te preocupes, voy yo y así me despido de mi hija…