El Gran Despertar

Capítulo 5

Esperé a que se fueran, meditando todo lo ocurrido me vino a la mente mi hermano, ¿estaría vivo o no?

Es lo único que me queda, me negaba a darlo por muerto hasta ver su cadáver, así que tendría que volver a la granja en busca de pistas de su paradero.

Cuando vi que no estaban Stefan y Damon, aproveché y me escape en dirección a mi antiguo hogar.

Gracias a que era de día puede situarme y localizar mi granja.

Fue desagradable volver y ver los cuerpos de mis padres junto al de mi hermana pequeña, ver la brutalidad y la sangre. Hicieron que vinieran unas arcadas, no me acordaba de que fuera una sangría tan violenta.
No pude evitar llorar al recordar aquella fatídica noche y las consecuencias que han dejado a su paso...

Busqué pistas pero casi todo estaba destrozado, así que decidí rebuscar entre los escombros y conseguir rescatar una vieja bolsa de piel, era la favorita de mi padre. Solía llevarla mucho cuando iba a la cuidad. Era el único recuerdo que me quedaba de él...
Después registré la despensa en búsqueda de comida, necesitaba provisiones y cualquier cosa que me sirviera de utilidad para poder emprender la búsqueda de mi hermano.

Una vez dado con todo lo que me servía de utilidad, sopese dar un descanso dignó a mí familia, así que me apresuré a ir al granero a por una pala para darles sepultura.

Una vez dentro del granero encontré un camino de sangre y ropa hechas trizas. Seguí el camino de sangre, que creaba una senda hacia lo más profundo del  bosque, yo solo pude pensar que esa sangre podía ser de mi hermano, así que
salí corriendo del granero y fui corriendo rápidamente hacia el bosque con la esperanza de encontrar algún rastro sobre él.

Mi corazón latía muy rápido y desesperado mientras que mi mente me ordenaba detenerme, en mi interior sabía que era una mala idea porque no sabía que peligros podía encontrar o una cruda realidad que no estaba dispuesta a aceptar.

Además, se habrían dado cuenta que ya me había ido de allí. ¿Stefan lo habrá notado? Por alguna extraña razón me gustaría que estuviera conmigo ahora mismo...con el me sentía segura.

Camine y camine, hasta que ya me sentía pérdida el rastro de la sangre se perdió y ya no sabía donde quedaba mi casa o las de Stefan, todo estaba muy oscuro y el bosque cada vez se veía más siniestro.

Hacía mucho frío, estaba agotada y desorientada, me senté y apoyé en un árbol, intentando recuperar las fuerzas hasta que empecé a escuchar crujidos y unos fuertes aullidos, muy cerca de donde me encontraba.
Lo único que se me ocurrió es que huir no serviría de nada. Entonces decidí  subirme a lo alto del árbol,  allí al menos no me alcanzaría nada. Intenté subirme al árbol apoyándome lo mejor posible en las cortezas, justo cuando llegué a la primera rama, resbale.

Pero de repente en vez de estar en el suelo, alguien cogió al vuelo evitando que cayera.