Capítulo XXI.

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Pov. Baekhyun.

¿Qué soy?¿Dónde estoy?¿Quién soy?¿Por qué estoy así?¿Así se siente ser rechazado?¿Así se siente no ser el centro de atención?¿Qué significa esta pulsación constante en mi corazón?

Ingreso a mi habitación y me miro al espejo, verme en él me hace sentir extraño, tan extraño como si no reconociera mi propio reflejo, tan extraño como si el Baekhyun soberbio y sarcástico se hubiera esfumado brevemente de mi ser.

No quiero ni siquiera pensar en eso, no quiero ni siquiera pensar en que si sigo de esta manera me puedo convertir en una persona que no soy, porque yo soy Baekhyun, mi escencia y mi personalidad son mi carta de presentación, es mi sello personal y no es justo que en un dos por tres, quede ni rastro de él, de mí, de lo que soy realmente.

Suspiro con pesadez mientras desabrocho mis prendas con lentitud, me las sacó una a una hasta que me quedo en calzoncillos, sólo y únicamente para mirarme en el espejo, visualizo cada parte de mi piel a través de él, los huesos en mi cuello son tan visibles que me hacen sonreír, siempre me ha gustado que se noten, las marcas de los besos de Chanyeol aún permanecen visibles en mi cuerpo, sus múltiples mordidas son como tinta roja permanente en mi piel.

Puede que tenga una debilucha apariencia pero no es así, no soy débil, claro que no, no lo soy, inclusive en mi personalidad, siempre he sido él que menos ha temido dentro de la familia por eso cuando me enteré de "casualidad" sobre la existencia de aquel acuerdo con unos seres inmortales, no temí, al contrario, me dio curiosidad, curiosidad por saber qué era lo que buscaban.

Aún recuerdo la expresión de sorpresa y aflicción en el rostro de mi madre cuando le pedí respuestas acerca de aquel viejo pergamino que encontré en la antigua biblioteca de mi abuela.

Ella parecía como si hubiera querido huir en ese momento, las palabras en latín que se encontraban dentro de aquel papel la hicieron romper en llanto.

Apesar de que en un principio se negó a contarme la historia que guardaba aquel pergamino pues, al final no le quedó otra salida más que contármelo porque me conoce y sabía que no descansaría hasta que me lo contara.

"Mi abuelo los vio, eran tan jóvenes y bellos que tan sólo bastaron un par de miradas para que se quedaran maravillados, los Horton, ellos eran poderosos, una familia muy respetada así como misteriosos pero escondían un oscuro secreto, todo en ellos estaba muerto, todo, absolutamante todo porque sus corazones ya no latían y sin embargo, estaban vivos." Ella dijo aquello con la mirada perdida en el espacio, mi madre, ella, cómo explicarlo, ella es mi como polo opuesto, nuestros carácteres chocaban a menudo, porque tanto ella como yo quería tener la razón.

"La mataron, mataron a la tía de mi abuelo, la prueba de su ataque era visible en su cuello, pero al ser criaturas sin escrúpulos, lo negaron, negaron lo evidente, negaron todo tipo de acusación, por eso nuestra familia decidió tomar justicia por sus propias manos, ellos mataron a la cabeza de aquella familia, y ellos a cambio mataron a los nuestros, a excepción de tu abuelo a quién dejaron vivo para que sirviera de emisario." A mi mente llegan fragmentos de sus palabras, palabras que forman parte de una historia en la que por artes del destino también yo me encuentro involucrado.

"Ellos volverán, ellos vendrán a reclamar a uno de ustedes, ellos regresarán para cobrar el trato de hace cien años", recuerdo que cuando mencionó eso grité como loco y juré matar con mis propias manos a esos vampiros desgraciados, pero es gracioso ya que ni siquiera puedo contra uno, como para vencer a todos yo sólo. "Baek, júrame que siempre, escúchame bien, siempre llevarás contigo la pluma de plata que te di en tu cumpleaños número dieciocho, júramelo." Frunzo el ceño al recordar sus palabras, por eso me agacho y recojo mi saco, busco en él antes de sonreír al encontrar aquella pluma de la que hablaba mi madre.

-¿Por qué mi madre me pediría eso?- me cuestiono y como nunca antes me tomo el trabajo de examinar aquella pluma, su punta es tan fina que estoy muy seguro que sus trazos se verán perfectos, su grosor y largo es el adecuado, lo tomo entre mis dedos y no se siente incómodo, le doy una y otra vez vuelta hasta que unas muy pequeñas letras se presentan ante mi visión, son tan pequeñas que si ya se me hace complicado el ver las letras pues el hecho de que se encuentre en otro idioma me exaspera.- ¡Puta gente antigua y misteriosa!, ¡¿Dónde creen que estamos?! ¡Estamos en Asia y esto es latín! ¡Ashhh!- berreo cruzándome de brazos.

Guardo mi pluma en mi saco una vez más ya que estoy seguro de que no encontraré nada más en ella y camino hacia la cama donde dormiré hasta que mi antiguo yo vuelva a renacer de las cenizas como el ave Fénix.

Me acuesto en toda la extensión de la cama hasta que mis párpados me ganan quedándome dormido. 

Ow, miro hacia todos lados encontrándome rodeado por un hermoso campo de puras margaritas, todo es tan colorido y soleado, extrañaba tanto este clima así que corro eufórico a más no poder, mi escandalosa risa se escucha por todo el lugar, sujeto un pequeño y muy amarillo girasol el cual me lo pongo en la oreja, estoy seguro que me veo muy guapo, estiro mis brazos y doy muchas vueltas, caigo de espaldas contra el verde césped y me estiro para alcanzar la única rosa que se puede visualizar en el cam...¿Ah? frunzo el ceño al sentir algo muy cerca de mí, no puedo moverme mucho, es como si algo estuviera encima mío y de pronto todo se vuelve negro, me encuentro perdido en las tinieblas,¡¿Qué pasa?! ¡¿Q-Qué sucede?! ¡¿Por qué no puedo moverme?! ¡¿Por qué todo se ha puesto de esta manera?! Grito y pataleo tanto como puedo pero...-¡Aaaaahhhh!- abro los ojos dando una profundo grito, mi respiración está muy acelerada, tan acelerada que mi corazón no deja de palpitar con fuerza.

Sólo fue una pesadilla...

Sin embargo, la sensación de tener a alguien o algo cerca de mí no desaparece, trato de moverme pero una vez más no logró hacerlo, volteo hacia mi costado y logró ver al causante de mi inmovilidad.

-Chanyeol...- digo en voz baja, él se encuentra a mi lado abrazándome con fuerza.

-Sólo quédate quieto.-.menciona sin abrir los ojos.

-Chanyeol...- vuelvo a mencionar, volteando mi cuerpo en su dirección.

Poco a poco él abre los ojos y nos miramos con intensidad.- Sabes...- sonríe cansado.- creo que me has atrapado.- dice para luego acariciar mi cabello acercándose lentamente a mí, así que cierro los ojos a la espera de un contacto que nunca se da, abro nuevamente mis ojos y  me doy con la sorpresa de que se ha quedado dormido.

Fin Pov.

Notus::::::》》》 ¿Adivinen quién se quedó brevemente dormida mientras escribía el capítulo? 🙋🙋🙋🙌🙌🙌 jajajjajaja me quedé dormidaaaaaa por eso lo sientooo, ya es media noche abuuu abuuu j ejejej 😍😍😍😍😍 mil, mil, mil gracias guapus por todo su apoyooo, los amooo con todo mi kokorooooo 😍😍😍😍 muackkk sin más, nos leemos en 30 o hoy más tarde j ejejej 😍😍😍😍😍

De Tu Sangre Tomaré, El Alma Que Robaste.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora