Hey Angel - Harry Styles *COMPLETA* *EN EDICIÓN*

17.

Dicen que antes de morir, toda tu vida pasa ante tus ojos. 

En mi caso, no fue del todo así. Lo único que vino a mi mente fueron los malos momentos. Todos los errores que había cometido, el daño que había causado a ciertas personas...

Entonces comencé a pensar en toda la gente a la que quería, toda mi familia, mis amigos, Amanda, Dylan, Liam...Harry.

Lo que más me rompía, era el hecho de que no me había podido despedir de ninguno de ellos. No podía  haberles agradecido todo lo que habían hecho por mi. No podía haberme disculpado por causarles daño en algún momento. Todos los errores que había cometido, ya no podría arreglarlos. Se me había acabado el tiempo.

Cerré los ojos, intentando disfrutar, de alguna manera, mi últimos segundos de vida. 

De repente, caí bruscamente al suelo. Abrí los ojos con temor. 

El hombre que tenía la navaja, alguien lo había empujado impidiendo que me apuñalara. 

Pude distinguir una cabellera rizada sobre él, dándole puñetazos hasta dejarlo inconsciente. 

Vi su cara cuando se levantó. Era él, ¡Harry!. Había ido a salvarme, había evitado mi muerte. 

Él otro hombre se abalanzó sobre Harry, pero éste consiguió esquivarlo y no le fue difícil dejarlo igual que su compañero. 

Me miró respirando agitadamente. En su cara había algunas manchas de sangre. 

Caminó hasta donde me encontraba, se agachó quedando a mi altura y me envolvió entre sus brazos. Me aferré a su camiseta fuertemente, sintiendome finalmente a salvo. Tenía demasiadas ganas de llorar. Esos hombres habían estado a punto de matarme.

-Dios mío, Maggie... - cogió mi cara con ambas manos - he estado tan cerca de perderte... - sus ojos estaban cristalizados, pero no parecía que ninguna lágrima fuera a caer.

-Harry, yo... - fui interrumpida debido a que alguien entró en el baño.

Era un grupo de chicas, aparentemente  borrachas. Iban riendose, pero al ver todo el desastre que había, salieron corriendo. De repente, un móvil vibró. Harry frunció levemente el ceño.

-¿Es el tuyo? - negué.

El telefóno volvió a vibrar. Harry cogió del bolsillo de la chaqueta de uno de los hombres el móvil que había sonado. Lo desbloqueó y tensó la mandíbula.

-Será cabronazo... - masculló entre dientes.

-¿Qué ocurre? - le arrebaté el móvil de las manos.

Eran dos mensajes, los dos de la misma persona.  "Connor: ¿habéis acabado ya?." "Connor: espero que sí, para algo os pago."

Me quedé de piedra al ver aquellos mensajes. Aunque ahora todo cobraba sentido, ¿por qué sino estaba Connor con esos hombres antes?. Sin embargo, por muy caoullo que fuera Connor, ¿lo era tanto como para querer que yo muriese?. Al parecer sí.

-Eso quiere decir que... - le miré.

-Les había contratado para que te mataran... - musitó Harry entre dientes.

Me quedé totalmente petrificada. Lo que no me encajaba era la razón de por qué lo había hecho. Creía que con el incidente de la última vez todo habría acabado. Pero parecía que solo había hecho que fuera a más.

-Pero...¿por qué? - no me dejó finalizar la frase. 

-¿Recuerdas..la paliza que le dí? . asentí - bueno, después de eso las cosas se...torcieron bastante.