I Hate You, I Love You (En Edición)

Oscuridad

STEVE

No podía creer lo que estaba pasando. Vlademir había revelado sus verdaderas intenciones.

La idea de la muerte de Tony le helaba la sangre.

Natasha estaba en otra habitación atada a una silla con las mismas esposas. Veía todo lo que ocurría gracias a las cámaras que transmitían en vivo desde una de las esquinas de aquel cuarto.

Se sentía igual o peor que Steve en esos momentos, igual de impotente.

—¡¿Por qué haces esto?!—preguntó el rubio.

—Buen punto, capitán. —Vlademir se alejó de Tony para situarse frente a Steve.—Me sorprende que no lo recuerdes, pero bueno. Tú mataste a mi familia. —su voz subía de intensidad.—¡Los mataste! Te estarás preguntando ¿cómo? ¿cuándo? ¿dónde?... Yo te explicaré. —Steve y Tony se miraron brevemente y después prestaron atención.—Mi padre trabajaba en las primeras fuerzas de Hydra, nunca le gustó estar ahí pero como sabes la necesidad te hace hacer cosas malas con tal de sacar adelante a tu familia. Y eso fue lo que hizo él. En esa época Hydra necesitaba de el mayor número de soldados necesarios para su ejército, y a cambio les daban recompensación económica a sus familias. A mi padre no le quedó de otra más que aceptar. Trabajó durante mucho tiempo con ellos, cuando pudimos ahorrar lo suficiente él decidió que era hora de retirarse. Más Hydra no lo dejaría, así que planeamos nuestra huida del país y de este modo no podrían localizarnos.—su enojo crecía conforme relataba —Un día, su ultimo día, el día que nos iríamos, tuvo que presentarse en una de las bases para cumplir con su puesto. Debía vigilar que unos prisioneros americanos no escaparan. Y entonces llegaste a su rescate, mi padre en cuanto te vio se quedo inmóvil, sé y estoy seguro que pensaba en rendirse, pero no le diste tiempo. No dejaste siquiera que reaccionara, disparaste y calló herido. Fue su fin. A mi madre se lo informaron al día siguiente, incluso Hydra nos mostró las grabaciones para constatar que lo que nos decían era verdad. Y te vi a ti, asesinando a mi padre. Después de eso todo empeoró para nosotros, nos retiraron el apoyo económico, mi madre se suicidó, y a mi y mis hermanos nos separaron. Ese día juré que te acabaría, habías destruido lo único que me importaba, yo te haría lo mismo. Tendría unos once años, el pasar del tiempo incrementó mi deseo de venganza. Me escapé del orfanato y desde muy joven me uní a Hydra. Me dediqué a empezar como soldado, igual que papá, traté siempre de ser el mejor y lo fui. Mis méritos me fueron llevando al puesto donde estoy ahora. Sabía que ese sería el único modo de vencerte.-terminó y los dos súper héroes se miraban preocupados.

El Capitán no podía terminar de creerse toda esa historia.

—Yo... Lo lamento... Pero debes entender que estaba en mi deber.—se disculpó un serio Steve.

Vlademir rió.

—¡¿Tu deber era matar gente inocente?!—gritó tomándolo del cuello.

—S-si... Hubiera sabido lo de tu padre... J-jamás...—no podía hablar bien a causa del agarre. Vlademir lo interrumpió.

—Es tarde.—lo soltó recobrando su compostura y Steve volvió a respirar—Me quitaste todo lo que amaba, así que te pagaré con la misma moneda.—miró al moreno.

—¡Por favor, no! ¡Haz lo que quieras conmigo, pero dejarlo a él! —imploró moviéndose.—¡Dijiste que me matarías a mí!

El líder de Hydra sonrió con malicia.

—De todos modos morirás internamente, el corazón es lo primero que hay que atacar si se quiere destruir al enemigo.—caminó hasta las puertas. —Ahora los dejo para que puedan despedirse.—salió y dio la orden de que dejaran en el cuarto sólo a Steve y a Tony.