I Hate You, I Love You (En Edición)

El comienzo de una nueva historia

STEVE

Por más que quisiera quedarse quieto no lo conseguía, Natasha insistía en que eran los nervios por la boda. Y es que nuestro querido Capitán ni siquiera había podido dormir bien, y menos sin Tony a su lado.

Si con la propuesta se estaba muriendo de los nervios, la boda sería mucho peor.

Todo estaba listo.

¿Qué cómo lo habían organizado tan rápido?

La respuesta eran Natasha, Loki, y Charles.

No hubo fuerza capaz de detener a éstos tres con la planeación de la boda de los famosos súper héroes. La espía se concentró en mandar a hacer las invitaciones, arreglos, flores y todo lo relacionado con decoración. Charles se encargó de llamar al juez, y haciendo uso de sus conocidos, consiguió los platillos y comida que se serviría. Loki, logró rentar uno de los salones más caros y grandes de la ciudad. Nadie se atrevió a preguntar que hizo para que les prestaran el salón y sobre todo en un plazo de tiempo tan corto.

No es que Tony y Steve no hayan hecho nada, pero los tres anteriores fueron de gran ayuda con la mayoría de las cosas.

Steve aún reía internamente por la tonta discusión entre él y el moreno sobre el sabor del pastel. Tony quería chocolate y Steve vainilla.
Al final, decidieron mandarlo hacer mitad de un sabor y mitad del otro.

Ambos estaban emocionados y aterrados por lo de su matrimonio. El rubio estaba seguro sería la mejor decisión de su vida, el simple hecho de imaginarse a Tony en el altar y junto a él para toda la vida le provocaba una felicidad indescriptible.

No lo había visto en todo el día, se había ido con Bruce y Clint para que lo ayudaran, mientras que él se quedó en la Torre con Natasha, Loki y Thor.

-Oye, ¿No vas a cambiarte? -inquirió un ya vestido Loki. El traje negro que se había comprado le favorecía mucho.-Te recuerdo que hoy te casas.-dijo con una sonrisa burlona.

Steve miró su reloj de muñeca, se había retrasado viendo el vídeo de la propuesta.

-¡¿Dónde dejaste mi traje?! ¡¿Y Natasha?! ¡No quiero llegar tarde!-dejó la tableta a un lado y se levantó cómo loco escandalizando por su retraso.

Loki viró los ojos.

-Calmate, estamos a buen tiempo, y el traje está en tu habitación.-señaló las escaleras.

-Gracias, Loki.-agradeció suspirando a lo que el dios asintió para después ver como iba Thor.

Subió a toda velocidad y se encerró en la habitación.

Loki estaba en lo cierto. El traje recién sacado de la tintorería aguardaba perfectamente extendido en la cama.

Comenzó a desvestirse para remplazar su ropa por el elegante traje negro.

Ya sólo le faltaba ponerse la corbata cuando Natasha tocó a su puerta.

-Pasa.-presintiendo que era ella no dudo en dejarla entrar.

La pelirroja entró sonriente; lucía un vestido rojo con escote cruzado en forma de corazón, mangas con transparencias y bordes de encaje que le llegaban hasta los codos. El largo del vestido iba cayendo hacia el final, creando un toque de fluidez impresionante.
En esos meses se había dejado crecer el cabello, por lo que su cabellera pelirroja caía como cascada de manera agraciada sobre sus hombros.
Se veía radiante.

Steve le dedicó una sonrisa nerviosa una vez que se puso el saco del traje.

-Qué guapo.-alagó caminando hasta él.