Capítulo Quince. Despertar

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<<Yo me encargo>> Oí decir una voz y lo siguiente que recuerdo fue yo despertando en la pijamada, cubierta de un líquido, que rociaba fuera cerveza de mantequilla.

— ¡¿Qué te pasa?! — dijo Demi molesta confrontando a Halley

— se despertó ¿No?

No entendía nada y me costaba recordar.

— la pluma — susurré y volteandose rápidamente hacia donde debía haber estado. Pero no había nada ahí.

— ¿Qué? ¿Cuál pluma? — dijo Angelina pasando su mano frente a mi cara — oigan, creo que sí se pasaron con lo que le dieron.

— me dieron suero de la verdad — dije haciéndome hacia atrás un poco incómoda

— ¿Suero de la verdad? ¡Claro que no! — dijo Katie

— es, una especie de tónico que te hace tener fantasías y sueños vividos — dijo Halley leyendo la inscripción de la botella

— ¿Cuánto estuve dormida? — dije poniéndome de pie

Andrea consulto su reloj: — unas, cuatro horas... La pijamada se acabó y la mayoría se fue, pero tú no dejabas de patalear y decir nombres al azar como: McGonagall, Ron, Colin, George, Fred...

— ¿No se les ocurrió despertarme antes? — dije molesta

Halley y Demi se miraron entre si

— estabas viva y eso ya era ganancia — dijo Halley

— ¿Cuéntanos qué soñaste? — dijo Demi

Relate un poco sobre mi sueño, que había tomado suero de la verdad, la pluma de las de Slytherin, el juego con Colin, omití el final y la parte en la que sentía que estaba enamorada de Fred.

— ...y entonces desperté empapada — finalize

— de nada — murmuro Halley — ahora ya puedes tirar tu pijama vieja.

A la mañana siguiente, como teníamos planeado desayunamos y fuimos a Hogsmeade.

Caminamos por todas las tiendas que pudimos. La mayoría ya están decoradas, ya que esa noche sería Halloween.

Compre varios dulces en Honeydukes, pasamos a Zonko a ver las nuevas adquisiciones de temporada que seguro los gemelos no tardarían en tener y por último descansamos en las tres escobas.

No dejaba de pensar en mí "sueño" había sido demasiado real, pero no recordaba varias cosas de el.

Por fin cuando empezaba a oscureser Halley dijo que deberíamos irnos, el regreso a Hogwarts no era largo, pero no debíamos caminar tan noche con los dementores y Black cerca.

Subimos a dejar los abrigos y cuando bajamos, pudimos degustar la más deliciosa cena de mi vida. Había mucha comida y toda estaba deliciosa, el ambiente era más que perfecto y nuestro espectáculo eran los fantasmas de las diferentes casas, llendo y viniendo con un show espectacular.

Comimos hasta no poder más y cuando el banquete dio fin regresamos a nuestras torres.

El pasillo para entrar hacia la sala común de Gryffindor estaba repleto y tuvimos que esperar casi en el fondo.

— ¿Qué pasa? ¿Por qué no avanzan? — dijo Halley molesta

— Puede que hallan olvidado la contraseña — dije sin darle importancia mientras veía los cuadros.

— Halley, eres prefecta, por qué no vas y haces algo — dijo Lee

Halley lo miro molesta y no volvió a hablar.

— Déjenme pasar — se oyó la voz de Percy Weasley adentrarse en la multitud

No pasaron más que un par de segundos cuando salió con un hilo de voz diciendo: <<tra-traigan al profesor Dumbledore>>.

Los Gemelos Weasley Donde viven las historias. Descúbrelo ahora