El Chico Nuevo

Capítulo 4: Celos.

-Ah, tu debes ser el famoso Simón. -dijo el italiano poniéndose de mi lado para darle la cara a Simón.

-¿Luna?-Dijo Simón.

-No, yo soy Matteo, Matteo Balsano.-Respondió sarcásticamente Matteo alzando la mano para saludar a Simón, Simon solo hizo cara de molesto y le dejo la mano sin conceder.-Ah y grosero el niño.-añadio pero esta vez volteandome a ver.

-Dejala en paz, es todo lo que te dire.-Dicho esto Simón me tomo del brazo y me jaló hasta la cafeteria de la escuela.

-Simon, ¡Simon! Espera me lastimas.-Dije soltando el brazo a unos cuantos metros de la cafeteria.

-¿Quien es ese chico? -me pregunto Simón con un gesto de celos.

-Simón, él es Matteo. Un simple compañero.-dije entre pausada, algo sorprendida por las reacciones de Simón.- ¿Estas celoso?-dije riéndome.

-No, solo cuido lo que es mio.-dijo violentamente.

Realmente estoy sorprendida por su reacción, nunca creí que Simón fuese a reaccionar de tal manera, violentamente. Bueno, hay gente un poco más celosa que otros.

-Luna, no quiero que te vuelvas a juntar con ese chico.-eso fue lo único que me dijo Simón por la siguiente semana. Si, paso una semana completa diciéndome que no me acercacara a aquel chico, era algo que en vez de hartarme, me aburría.

Ni siquiera hablaba con aquel chico que solo me causaba problemas y más problemas.

-Señorita Valente, tendrá que pasar a dirección.-Dijo miss Gaby.

-Si profesora.-Dije y de inmediato me levante de mí banco y fue a dirección. No creí que fuese nada malo hasta que vi a Simón y Matteo ahí. Me puse verdaderamente nerviosa.

-Miss Gaby, yo puedo explicar. -dije rápidamente pues estaba nerviosa.

-¡Valente, basta!-exclamo Miss Gaby.-Balsano, prosiga.

-Miss Gaby, pasa, que he visto a Simon tratando violentamente a Luna entre sus ataques de celos.-Dijo Matteo mirando fijamente a la profesora.

-¿Es verdad Valente?-me interrogó.

-No.-dijo fríamente Simón.

-¿Luna?-volvió a preguntar la profesora, yo se perfectamente que es así, pero Simon me amenazaba con la mirada.

-Si, así es profesora.-Dije valientemente viendo a Balsano.

Simón quedese aquí. Luna, Matteo pueden retirarse.

-Matteo ¿por qué hiciste eso?-pregunte mirándolo molesta.

-¿Cómo que por qué? Luna, el te trata mal. Y te he visto almorzando con el con cara triste toda la semana pasada.

-Pero tu no te tenias que meter.-conteste cruzando los brazos.

-Yo me meto por que.... Te quiero Luna.-dijo nervioso.

¿Qué que hice? Me fui, entre al salon, su comentario solo creo un silencio incomodo, muy incomodo.

Si, timbro y Simon estaba afuera de mi salón.

-Terminamos.-dijo Simón y sin más se fue.

-¿Estas bien?-escuche decir a lado mio, creí ciegamente que era Gissel, pero no, al voltear con quien me encuentro, con el causante de mis problemas, Matteo.

-Si, gracias.-dije secamente y seguí mi camino.

-¿No queres ir a...?-interrumpi.

-No, gracias.

-Hey, no estés enoja...-volvio a ser interrumpido pero esta vez por otra chica, tenia que ser, Celeste, una chica inteligente, creída pero sobre todo popular.

-Hola Balsano.-dijo Celeste mirándome con gesto de asco, me daba risa, pues el asco es ella.

-Hola Cele.-le respondió el.

-Yo me voy.-dije y me fui. Matteo se despidió con un guiño.

¡Es un lindo! Si no me atrevía a aceptarlo, pero en realidad lo es.

No Luna el quiere a Celeste.

No Luna tu quieres a Simón.

No Luna, él no.

Era todo lo que me decían mis pensamientos. Claro, yo no me estaba enamorando, ¿como podría ser? El chico nuevo llevaba un par de semanas ahí, aparte ni siquiera nos llevamos bien, es imposible. Con esto me sentí un poco mas aliviada, pero ¿Por que estaba pensando en Matteo, si debería pensar en Simón?