Quiero morir, vivir contigo.

Capítulo 14. El amor no es para mí.

Noah

Ese gilipollas está muerto. Estoy parado como un imbécil en la puerta de la clase viendo como Aria está hablando con Ben, con el gilipollas de Ben. Y por si fuera poco ella le está sonriendo a él, pero puedo decir que la sonrisa es completamente falsa, la conozco y lo sé.

Después de como me comporté ayer es normal que esta mañana me haya contestado a los  mensajes de esa forma tan fría, lo entiendo. ¿Pero hablar con Ben en mis narices? ¿Y sonreírle? Tengo que pararla como sea.

Me acerco a ellos y entonces puedo escucharlos perfectamente.

-          … si te sirve de consuelo ya no estoy saliendo con Noah –masculla Aria con cierta tensión en la voz - Realmente no sé que hacía con él de todas formas, no es mi tipo para nada.

Todo en mi interior se ha roto, literalmente roto. He roto con chicas muchas veces, demasiadas si lo pensamos con detenimiento, y si ellas sintieron la mitad de dolor que estoy sintiendo en este momento, oficialmente sí soy un cabrón.

No puedo seguir con esto, no puedo seguir escuchando porque me voy a romper y nunca me he roto, jamás. Ni siquiera cuando mi padre me ha dado esas palizas, y mi primera vez no va a ser por una chica ni mucho menos.

El cabrón de Ben está sonriéndole ahora con los ojos iluminados y mis ganas de matarlo están aumentando considerablemente en este momento, pero como soy masoquista sigo escuchando.

Puedo escuchar el final de lo que ha dicho Aria.

-          ¿Vas a ir al baile? – ¡NO!, por favor Aria, no me hagas esto, no, no, no, no puedo soportarlo, por favor.

-          ¿Quieres venir conmigo? –el golpe que sus palabras me dan hace que tenga que dar un paso hacia atrás para mantener el equilibro. Acaba de acabar con la poca felicidad que tenía.

-          ¡Claro, claro que voy contigo! –no mientras yo viva amigo.

Me acerco hacia ellos por atrás y cuando Ben mira hacia donde estoy puedo ver con toda claridad como el color abandona su cara y como sus estúpidos ojos dejan de brillar.

Entonces Aria se gira.

Al principio veo una mezcla de diversión en sus ojos, pero cuando me mira puedo ver la misma angustia que parecen que están adornando los míos.

Va a hablar pero la interrumpo dirigiéndome a Ben que entorna a los ojos.

-          Siento interrumpir esta agradable conversación, pero voy a llevarme a mi novia, porque necesito hablar con ella. –el me mira haciendo una mueca de disgusto.

-          Ella ya no es tu novia. –dice con una sonrisita arrogante –Vamos a ir juntos al baile, supongo que se ha dado cuenta con quien valía la pena salir. Es normal que te haya dejado, era cuestión de tiempo que se diera cuenta de la clase de mierda que eres. –cuando sonríe de nuevo me abalanzo sobre el y le doy un puñetazo en la mandíbula. Oigo un ´´crack'' que me indica que el golpe ha sido acertado. Entonces Aria me mira con una mano sobre la boca.

-          ¡Tú! ¡Eres un salvaje! –dice horrorizada -¡Eres…! –antes de que continúe, la cojo del brazo y la saco de la clase.

El pasillo está vacío, así que los demás ya estarán en sus clases. Puede que el señor Ramírez haya llegado tarde, bueno ahora mismo me importa una mierda donde esté el señor Ramírez.

Miro hacia ambos lados en el pasillo y llevo a Aria –que no para de golpearme, empujarme, morderme e insultarme –hacia el baño de chicas, que espero este vacío.