Jacob
La noticia que me dio la mamá de Vanessa me impactó demasiado. Lo que me preocupa es cómo se lo va a tomar Vanessa. Decidí quedarme a dormir en el sillón de la casa de mi novia... se siente raro esa palabra saliendo de mi boca pero con Vanessa a mi lado todo es posible. Desde que ella llegó a mi vida todo cambio para bien. Mi vida por así decirlo no era del todo buena, tenía problemas con mi familia y cuando pensaba que mi vida iba a mejorar, llega Jessica, ella me hizo ver la vida de otra manera pero no de la manera en la que me hizo ver Vanessa. Jessica era mi hermanastra, mi padre le fue infiel a mi madre y eso es uno de los tantos problemas que tenía con ellos. Cuando me la presentaron, la odié al instante, porque gracias a ella mi madre sufrió tanto que había terminado en un hospital, pero después mi madre se fue acostumbrando, ya que la madre de ella murió de cáncer. Jessica tenía 15 en ese entonces, ella siempre trataba de hablarme pero yo me negaba a dirigirle la palabra, pero llegó ese momento y le hablé, al principio me pareció amigable en un cierto tiempo que ya la sentía como mi hermana hasta ver su lado oscuro. Ella siempre salía por las noches y regresaba en la madrugada y me preguntaba ¿a dónde iba por las noches? y yo era el único que se daba cuenta de eso. Una noche la perseguí hasta un callejón y lo que vi me sorprendió. Ella estaba vendiendo drogas junto a otros chamos y se reían sin preocuparse del mundo y cuando estaba decidido a entrar y hacerle frente, se escuchan disparos, unos de los tipos cae al suelo por un disparo en la cabeza, pero estaba pendiente de Jess. Llegué junto a ella y la arrastre por otro callejón. Los disparos se escuchaban cerca y supuse que nos estaban siguiendo, ¿por qué carajos nos estaban siguiendo? Era lo que me preguntaba. Llegamos a otro callejón pero éste era muy estrecho y pensaba que estábamos a salvo, Jessica me miraba preocupante y de sus ojos se derramaban lágrimas, vi una sombra detrás de Jessica pero no le pare mucho y las últimas palabras que me dijo Jessica fueron "Perdóname" y se escucho el disparo, mis ojos se agrandaron de la sorpresa y lo que sentía en ese momento fue miedo. Tomé a Jessica en mis brazos antes que cayera, toda su sangre estaba esparcida en mi camisa, lo único que podía hacer era llorar de la impotencia, ella era importante para mi y la estaba considerando parte de mi familia. Días después habíamos enterrado el cuerpo de Jessica, los investigadores nos informaron que Jess no tenia las manos del todo limpias. Había echo tratos con mafiosos y por esa razón la habían matado por deberles mucho dinero. Mis días se convirtieron oscuros, no me apetecía hablar con nadie, me la pasaba en mi cuarto encerrado y un día que pensaba que no ocurriría nada, vi a Vanessa Scott. El primer dia la trate de esa manera porque sentía un miedo que no sabia de qué exactamente. Cuando sucedió lo de la moto, el momento de Jessica revivió en mi mente. Supe desde entonces que no me podía alejar de ella. Cada momento que la pasaba junto a ella, así sean peleas o lo que sea, me la pasaba genial, me hizo sentir vivo de nuevo y me prometí que no dejaría que nada lastimara a Vanessa. Y con una sonrisa caí en los brazos de morfeo.
-Jacob... Jacob despierta-me zarandea la madre de Vane.
-¿Qué sucede?-aún estaba dormido y etrecerre mis ojos por la luz.
-Vanessa no esta en su habitación-me dice asustada. Me levanté como alma que lleva el diablo y fui a su habitación. Su cama estaba tendida, vi su closet y estaban todas sus prendas. Algo no me pinta bien. ¿A dónde se a ido Vanessa?. Me senté sobre la cama con la cabeza entre mis manos y no me di cuenta que estaba la mamá de Vanessa.
-Voy a llamar a la policía-sale de la habitación. Me quedé en la misma posición y algo abajo de la cama me llamó la atención. Me arrodillé y lo tomé. Era un sobre y cuando lo abrí, no tenía palabras para describir lo que estaba viendo y leyendo, había una carta y fotos de Emely golpeada salvajemente, pero lo que me interesó más fue la carta. Cuando la leí, dejé de respirar y lo único que pensaba era Ella se entregó.
Bajé como un loco por las escaleras e ignorando los llamados de mi suegra. Subí a mi auto y vi la carta donde decía la dirección y partí.
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Caminos Cruzados [En Edición]
RomanceVanessa una chica de 17 años, está en 4º año, era de Mississippi y se mudó con su madre a New York City, una chica de carácter fuerte, cerrada con las personas y sentimientos, no confía ni en su propia sombra ya que tiene un pasado no muy satisfacto...