Confiaré en ti ¡sí o sí!

capitulo 30

Después de haber discutido, me disculpé con Eloy por haberle pegado y el conmigo por haber pensado mal de mi.

Nos sentamos en un banco de una plaza mientras nos cogíamos de la mano. 

- No quiero preguntar porque sé que no voy a aguantar escuchando, pero aún así quiero saber que relación tienes con tu ex o mejor dicho, quisiera saber todo lo que ha pasado. - Dijo Eloy mirando nuestras manos sujetadas. 

- Tienes razón, no creo que puedas aguantar el escuchar que yo me besaba con el, que lo abrazaba y que lo queri- Eloy echó su cabeza en el hombro. 

- Ve poco a poco, por favor. - Dijo suspirando. 

- Está bien, voy a contarte todo o al menos lo más importante.- Intenté sonreír. - ¿Cómo podría explicarte? um...Daniel, para mi era alguien demasiado importante. Mi día a día consistía el tenerlo conmigo todo el tiempo. Él era el primero en saber todo sobre mi, hasta el más íntimo secreto lo sabía él.  Fue mi mejor amigo desde muy pequeño, siempre estuvo apoyándome en todo e incluso me ayudó a seguir adelante cuando me sentía perdida. Pero poco a poco, no se ni cómo ni por qué, empecé a verlo de otra forma, como un chico, como mi primer amor. 

Nunca le dije nada porque tenía miedo de estropear aquella maravillosa amistad, durante años lo guardé como un secreto, tampoco él parecía verme de esa forma, así que me propuse a olvidarle, hasta que un día Daniel me confesó todo lo que sintió por mi. Recuerdo que en aquel momento él empezó a salir con una chica por lo que no entendía porque hizo todo aquello porque el mismo día que me la presentó, por la noche, cuando lo dejé en su casa, después de la fiesta, él y yo nos besamos. 

Me dijo que siempre estuvo enamorado de mi, pero igual que yo, no quería estropear la amistad que teníamos. Él me quería tanto que temía perderme, llegó a decirme que le molestó el que otros chicos me mirasen y de repente, me besó. Sinceramente me gustó pero me sentía mal porque el estaba empezando una relación. 

Después de ese día él y yo nos volvimos a besar, ya que según Daniel, después de que nos besaramos por primera vez, quería hacerlo más veces porque le gustaba. Tuve que pararlo. No era sano y el tenía novia. Entonces llegó la hora de decidir que me vendría aquí a Madrid a estudiar y para mi sorpresa él dijo que se vendría a vivir conmigo porque también estudiaría aqui. Al final de todo terminó con su novia y poco después se me confesó así que empezamos a salir, al fin y al cabo yo siempre estuve enamorada de él. 

El primer año pareció ir maravillosamente bien, los dos vivíamos juntos así que la pasábamos todo el tiempo juntos, era estupendo porque estaba con mi mejor amigo y con mi novio, sin embargo las cosas cambian y también lo hizo nuestra relación. En un verano Eloy pareció haber cambiado y a raiz de eso miles de problemas vinieron, era un  continuo discutir, tanto que llegamos a insultarnos. Luego, a los cuatro minutos nos disculpábamos el uno con el otro, pero sabíamos que ya la cosa no era igual. No sabia que es lo que él sentía pero yo le seguía amando, seguía intentándo hacerlo lo mejor posible como novia, hasta que un día todo se derrumbó. Daniel conoció a una chica de su clase y bueno, ella se volvió más importante que yo. Nunca tuve tiempo de hablar con él sobre esta chica porque después de eso me llamaron de casa dándome la noticia sobre mi hermano Cristian que se iba a morir. 

Durante ese tiempo Daniel no estuvo conmigo y sufrí mucho porque lo necesitaba de verdad, necesitaba que me abrazara y que me diera fuerzas ya que mis padres no podían hacerlo, quería que, ya no como mi pareja, sino como mi amigo, estuviese conmigo y no fue así. Después de que muriese mi hermano, me quedé pensativa, pensé que tenía que seguir viviendo, pero si lo hacía al lado de Daniel iba a salir lastimada, así que cuando volví a Madrid, recogí todas mis cosas y le dije que terminásemos. Por un lado y un poco egoísta, ya que fui yo la que lo dejó, quería que él me siguiera y se aferrara a mi y me pidiese quedarme, pero no lo hizo. No me siguió, así que entendí que así es como después de tanto tiempo, los dos terminábamos.