Cartas que nunca di.

N

 Amo amarte, amo nuestros momentos juntos, nuestras risas, miradas, besos caricias... nos amo. Me quedo sin palabras y me es muy raro, ya que siempre escribo. Supongo que todo esto se debe a que mi mente esta constantemente pensándote y no deja salir esos pensamientos, los mantiene cautivos, escondidos para no perderlos.

 Nunca creí que alguien como vos iba a llegar a mi vida tan de repente, tan inoportuno, tan en el momento justo. Sos una de las razones por la cual me levanto todos los días con una sonrisa dibujada en mi rostro. Nos complementamos, somos la pieza faltante para reconstruir el rompecabezas del otro. No me importa que el mundo se entere de lo que siento, porque es real, puro e intenso. Me resbalan las críticas porque sé que son pura envidia, porque somos perfectos juntos y a la gente le molesta ver las cosas brillar cuando no le pertenecen. 

 Si un deseo se me cumpliese, pediría nunca perder lo que tenemos. Sé que tenés el Don de enamorarme todos los días, porque cada día que pasa te amo más. Somos muy reales, pero tan irreales que parecemos sacados de un cuento de amor, uno de los felices, de los que comen perdices, de los que no hay dolor.

 Te amo, simplemente te amo, y me gustaría que estos momentos duraran para siempre, ya que nunca me sentí mejor. Las mariposas, estuve tanto tiempo vomitando mariposas muertas que nunca pensé que volverían a aparecer, y no hay nada que me guste más que que hayan vuelto con vos.

 No quiero pensar en si algún día se acabará, ni en nada de lo que pueda venir, porque se que vamos a poder contra todo eso y más. Somos nuestro presente, nuestro ahora, y somos felices, es todo lo que importa.