A mi otra mitad.

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 Ya no sé cuánto tiempo pasó desde la ultima vez que lo vi, pero me siento incompleta desde entonces. La gran mayoría de los días aparece en mi cabeza como una realidad paralela, y lo siento ahí, me siento ahí, nos siento ahí. No entiendo cómo a pesar de que el tiempo pasa y conozco a otras personas, me involucro con ellas y hasta sufro en su ausencia nada se compara con él.

Cuando estoy triste es cuando más lo extraño. Extraño su piel, su olor, su sentido del humor, su cara de orto, su compañía... juntos éramos uno. Me duele saber que no voy a verlo nunca más en mi vida, porque todavía mi corazón se aferra a la esperanza de que en un futuro voy a encontrarlo. Lo busco en todos lados. Cierro los ojos para sentirlo conmigo, pero es inútil, porque hace tiempo se fue. Tenía 17 años cuando lo conocí y voy a cumplir 20. ¿Cuándo el tiempo se me escapó tan rápido?

Pienso en él y me quiero dar por vencida. ¿Qué sentido tiene mi vida si no está él? Era mi pilar emocional. Siempre que cometía un error estaba él, cuando me peleaba con mi familia estaba él, cuando mis amigas no estaban, estaba él, cuando nadie me entendía, cuando me sentía sola, cuando quería morir... él siempre estuvo ahí.

Una vez me dijiste que el destino sabía que nos necesitábamos y que por eso nos unió, pero "Si hubiéramos sido destinados para estar juntos, lo estaríamos ahora".

Cartas que nunca di.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora