Creo que no hay dolor más triste que saber que te perdí, estabas creciendo en mi vientre. Cinco semanas. ¿Cómo no me di cuenta que estabas ahí? Mi depresión no me hizo ver que te estaba matando con cigarrillos, estrés y alcohol. Ibas a ser el primero e ibas a ser mío, todo mío. Ya no sé qué más puede arrebatarme la vida. Seis meses al lado de una mentira disfrazada de verdad, de un amor agridulce. Un año tratando de no morir con tanto dolor de mi familia, mi pasado, mi presente. Ahora recuerdo por qué no quería estar de novia. Todos me usan, hasta yo me uso. Uso mi cuerpo para liberar el dolor. Me intoxico, con botellas de cervezas con gusto a nada. Quemo mis pulmones con dióxido de carbono revestido de tabaco. No me di cuenta que te estaba matando porque no sabía que existías. Los vómitos, las contracciones, los dolores de cabeza... quise convencerme de que no era verdad cuando el test de embarazo marcó dos rayas rosadas. "Debe ser un error". Traté de convencerme. ¿Tener un hijo de un forro que me usó para complacer su excitación? ¿Tener una vida formándose dentro mío en este estado? No, no parecía verdad. Cuando los coágulos de sangre empezaron a aparecer... cuando empecé a perder peso... ahí me di cuenta. Estaba embarazada, y lo estaba matando, te estaba matando... me estaba matando... nos estaba matando. ¿Qué culpa tenías? No sabías nada, sólo querías vivir. Creía estar sola, creía no tener a nadie... y mi ceguera evitó que viera que estabas creciendo en lo profundo de mi. No había pensado en un nombre, hasta que te perdí. Te iba a poner Gabriel, como en el sueño que tuve. Te veías tan lleno de vida en ese mundo imaginario, podía tocarte, podía cantarte para dormir... La puta madre, te perdí, te maté por querer matarme a mí. ¿Por qué todo lo que toco muere? ¿Por qué todo lo que miro se quema? ¿Por qué?
"Estoy bien". Cuántas mentiras en dos palabras. "Te amo" Cuántas palabras que mienten. Las personas hieren, y hacen a las letras sangrar. Nunca te habría permitido conocer a tu papá, de todos modos no habrías querido verlo, te habrías puesto a llorar con el hecho de sentirlo cerca, porque habrías recordado el dolor que habría sentido yo a su causa durante 9 meses. Quizá por eso no ibas a nacer, porque tu vida no habría sido digna.
En unos años, cuando encuentre a alguien que en verdad me ame, sin mentiras, sin filtros... El día en el cual, decida casarme y formar una familia... ahí vas a nacer. Vas a estar cubierto de amor. Vas a llamarte "Gabriel". Vas a ser hermoso, vas a ser de mi futuro amor. Vas a ser feliz, voy a ser feliz. Voy a luchar por que sea así.
Mientras tanto sé libre. Voy a vivir por vos ¿Hijo?
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Cartas que nunca di.
RomanceSon cartas, sentimiento y pensamientos que no se pueden ocultar, acontecimientos que se tenían que contar.