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|Jinhwan POV|

Después de haber pasado aquel incómodo momento con el chico rubio, después de meditar, de estar confundido, de pensar, de estar molesto y de haber tomado un poco de aire, decidí dejar ese asunto para luego o quizás consultarlo con Hanbin más tarde.

Ahorita tenía que ir a revisar su aula para poder irnos juntos. Si ellos todavía no venían, es por lógica que aún no han salido. Tal vez me toque esperar...sirve que me distraigo un poco.

Al salir de mi aula y al caminar por los pasillos, un chico súper bonito venía hacia mi dirección, caminando lento pero con estilo. Dejaba muy mal visto a todo aquel que pasara por su lado; iba saliendo del aula en la que estaba Hanbin. El chico iluminaba todo con una simple sonrisa.

Era muy atractivo visualmente ya que se veía tan delicado. Es de esos chicos que te llaman la atención porque son tiernos en su aspecto y por el tipo de personalidad que son tan sumisos y dulces, o eso es lo que decía su rostro. Yo lo miraba sin una pizca de vergüenza porque en verdad era increíble su manera tan pura de lucir: tan sofisticado, con una manera de vestir muy elegante. Al yo estar viéndolo sin ninguna discreción, y él caminando como si el mundo estuviera en sus manos, me sorprendió mirándolo y me sonrió. No esperaba tal cosa, pero terminé algo incómodo. Incluso ya dejándolo atrás, regresé mi vista hasta el chico. Qué bonito era.

Luego de ser brevemente distraído, regresé a la realidad y en que me había quedado como un idiota parado a medio pasillo. Tomé de nuevo mi camino alejando de mi mente algún pensamiento de baja autoestima...digo, a mí se me notaba a kilómetros si estaba mal, y la verdad no necesitaba que Hanbin tuviera que levantarme el ánimo sólo por un chico bonito que había visto pasar. El problema es que tal vez se encuentre en el mismo lugar que mi amigo y lo conozca...de nueva cuenta me estaba imaginando una película entera que puede ser producto de mi locura enfermiza.

Llegué al aula, la cual estaba abierta, y me acerqué un poco para comprobar que sus clases hubieran terminado y no llegara yo a interrumpir y hacer la vergüenza de mi vida. Al revisar todo, logré encontrar a mi amigo quien estaba recogiendo al parecer una libreta. V por otro lado sólo esperaba pacientemente.

No había visto el lugar por completo, pero cuando metí todo mi cuerpo a la entrada del aula para darle una sorpresa a Hanbin y a V, mi mirada fue a dar a la persona que estaba a punto de salir.

No esperaba verlo ahí. No esperaba que seguiría actuando tan indiferente y que su expresión pasaría de serio a irritado justo cuando me vió y me reconoció.

Yo lo observaba como si fuera lo más maravilloso que haya visto, y es que era así. June es lo más hermoso que mis ojos han podido ver.

No planeaba quedarme ido viéndolo, no era mi plan haberme quedado ahí, tapando la salida...pero ahí estaba yo, estorbándole, mientras me perdía en su belleza. No veía a nadie alrededor, no sentía nada a excepción de los latidos de mi corazón que sonaban como fuertes golpes. Ése efecto, como ya lo había dicho antes, sólo lo podía causar June.

一¿Te quieres mover? 一habló con molestia en la voz, como si yo de verdad le molestara.

No entendía la razón por la que actuaba así. Se supone que yo soy el que debería de estar igual o peor después de lo que pasó. Me molestaba. Quería estar molesto. Quería gritarle y quería golpearlo...pero no podía. Simplemente me aparté de la puerta para evitar seguir sintiendo el vacío que me estaba consumiendo el alma entera en estos momentos.

No sabía cómo reaccionar: es decir, anteriormente decía que si lo volvía a ver, iría tras él y le pediría una explicación que tal vez tenga sentido...tal vez lo perdone, tal vez me perdone, tal vez me bese, tal vez le corresponda, tal vez me tome, tal vez yo pondría resistencia, tal vez no. Son muchas opciones para un cuerpo tan pequeñito como el mío, pero el hecho es, que si hubiera intentado las últimas dos acciones...no hubiera puesto resistencia alguna.

SOL |Junhwan|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora