Todo lo que quiero

Capítulo 36

Will

No puedo con esto. La idea de perder a Brooke me mata, todo por no hacer caso y dejarla calmarse. Ella necesitaba espacio y a mi me dio mucho miedo que ella decidiera que no valía la pena luchar por nosotros, malinterpretó también lo de los papeles del divorcio y eso solo aportó a mis inseguridades.

—Fratello, mantén la calma—sé que mi sorella Azul está aquí, pero no puedo concentrarme en nada que no sea mi Cielo.

Cuando la ambulancia llegó al hospital no pude evitar sentir esa culpa inmensa, reaccioné tarde. Fue mi culpa lo que ha pasado, jamás debí decirle a Brooke todo eso. Sé que ella no es igual a mí, ella ha tenido que aprender a resolver todo sola, claro que necesita pensarlo todo sola antes de compartir sus emociones, me alteré de más. Me dio miedo.

—Todo fue un accidente, los dos estaban alterados en la discusión—interviene mi sorella como leyendo mis pensamientos—, te conozco lo suficiente como para saber que ahora te culparás de todo, me contaste poco y aunque sí, debiste hablar con tu esposa sobre esta otra mujer y su embarazo ustedes lo superarán. Brooke es una chica fuerte y te aseguro por la memoria de nonna que estará bien.

Jayden tuvo que quedarse con el bambino mientras Azul está aquí conmigo, en cuanto le avisé a mi madre toda la familia Miller llegó de inmediato, incluyendo a Adam, tuvieron que bajar a la cafetería para comer algo y mientras, yo llevo horas en la maldita sala de espera sin saber nada.

El doctor Harper llegó un poco tarde porque estaba saliendo de la ciudad y se regresó, aún así no ha salido a decir nada desde que entró con Brooke, tampoco me dejan pasar a verla. Temo tanto por mis bebés.

—Si continuo aquí me volveré loco—digo irritado sujetando mi cabello. Mi sorella trata de ser el apoyo que necesito, pero también estoy nervioso porque el señor Hitman no responde su celular, nadie del TroubleNews me responde y estoy seguro que es porque están preparando lo de la cena de celebración de la revista, estoy seguro que en cuanto vean que algo va mal se comunicarán conmigo, por ahora trato de mantenerme alerta.

—Familiares de Brooke Miller—me paré de la silla inmediatamente al escuchar la voz del doctor Harper.

—Soy su esposo.

—Lo sé, señor Miller. Hemos estabilizado a Brooke. El impacto fue considerable, pero los bebés están aparentemente bien y lo más importante no hubo necesidad de intervenir, la hemorragia se controló adecuadamente, estamos al pendiente en caso de cualquier efecto secundario, pero la señora Miller debe permanecer internada porque a estas alturas es muy riesgoso darla de alta en su situación. No me quiero arriesgar a dejarla ir en este momento, aquí me aseguraré de su bienestar a cada momento—un poco de aire regresa a mis pulmones, de momento solo quiero verla, solo es ella y mis hijos.

—¿Puedo pasar a verla?—pregunto con temor a una negativa.

—En un par de horas seguro que sí—y con esto se retira del lugar.

—Están bien—digo llorando en el hombro de mi sorella—Están bien, juro por mis hijos que no volverá a suceder, no volveré a ser un idiota.

—Fratello lamento decirte que eso jamás podrás cumplirlo—levanto mi rostro confundido—, está en tus genes ser idiota, lo mejor de esto es que Brooke te ama tal cual.

Iba a contestarle pero cuando el elevador se abre dejando ver al señor Hitman demasiado pálido y preocupado para no saber lo de Brooke.

—Mi hija ¿Dónde está mi Brooke? —me pregunta sosteniendo mis hombros, creo que podría golpearme si no le doy una respuesta rápida.

—Está bien, el doctor la mantendrá en observación toda la noche, no quiere que esté lejos en su situación.

—¿Pero qué pasó? ¿Por qué mi dulce niña está en este hospital? Sus hijos, William, los bebés...