Capítulo 40

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Brooke

El cuerpo de Hector cae frente a mí, me giro para ver a William sostener un arma que no había visto, no sé en que momento la ha traído consigo, tampoco me importa, lo que necesito saber es que ha matado a Hector y el ayudarme le ha costado una fracción de tiempo importante para cuidarse de su contrincante, suelto un disparo pero no soy lo suficientemente rápida como para evitar que Elian empuje a William en una zanja cercana.

La parte trasera de la casa además de ser amplia y tener un terreno lleno de tierra está sumamente descuidada.

Dejo caer la pistola al suelo y corro a ver qué pasó con Miller, aunque no es muy profunda Elian me impide ayudarlo, Will parece inconsciente, y hay grandes rocas bajo él. Me preocupa más la sangre de su cabeza en este momento.

-Esto no tenía por qué terminar de esta manera-me grita Elian sacudiéndose la ropa y sosteniendo el costado en el que disparé-, yo te di opciones y ¿Dime que hiciste? ¡Elegiste quedarte!-se está alterando, pero yo solo quiero alcanzar a Will que está sangrando demasiado, necesito ayudarlo de alguna manera.

Elian se eleva sobre mí y aunque estoy cansada y un poco desorientada consigo empujarlo lejor de mi cuerpo, tengo una oportunidad perfecta para salir fuera de su vista, pero eso significaría dejar aquí a William y es algo que no puedo ni imaginar en hacer.

-No lo escuches, Cielo. Corre-la débil voz de Will me sobresalta. Es un susurro lleno de agonía-. Vete lejos de él-trata de ponerse de pie, pero está muy mal físicamente, el golpe en su cabeza no le permite hacer mucho esfuerzo. Lo examino brevemente y noto que además de los múltiples golpes en su rostro tiene una pierna herida.

Hay que salir de aquí ¿Dónde están los chicos?

-No te voy a dejar nunca-le digo entre sollozos-, te amo Will, no te rindas.

-¿Escuche bien, Brookie?-la ironía de Elián da miedo. Es una burla clara. Se acerca totalmente enojado y decidido, me encojo por un segundo, pero saca a Will a rastras, es como si no pesara nada y el daño del disparo no importara, solo lo arroja a un lado como nada más que un saco de basura.

-¡Esta es la vida que elegiste y mira lo que pasó! ¡No tiene la fuerza para defenderte!

En ese momento Miller se pone de pie, está temblando-¡Quédate en el suelo, maldita sea! -trato de ordenarle, no puede seguir provocando a este loco hasta que tengamos a alguien más de nuestro lado, Elian se ha válido de armas para herirnos y el imbécil de Hector formó parte importante de su plan.

-¡Sueltalo! ¡Por favor déjalo!-me pongo de pie forcejeando para que lo libere-, me voy contigo, nos vamos. Solo tú y yo-e inmediato lo suelta provocando un agudo grito de dolor.

-¡Así es como me pagas que te quisiera conmigo! ¡Eras mi mano derecha, Brookie! No debiste dejarlo todo por él. No te merece.

-Quizás no, pero tu tampoco-la voz de Will nos hacer verlo de nuevo solo que esta vez le da un golpe con una piedra y Elian cae al suelo totalmente inconsciente, no pasa ni un minuto cuando William lo acompaña cayendo entre la tierra-, te amo, Cielo. Te amo.

-No digas eso, no lo digas hasta que estés bien ¡Por favor no cierres tus ojos!-le suplico, él toma mi mano de nuevo.

-No llores mi Cielo. Todo era parte del plan ¿No?

-No, nos dejes, piensa en tus hijos, en tu hermana, tu familia, piensa en mi-digo rompiéndome en mil pedazos.

-¡Brooke!-la voz de Jayden se escucha a lo lejos.

-¡Por aquí!-grito desesperada-¡Will está herido! ¡Rápido!

-Oye, Walker...-dice Will llamando mi atención-. Te amo-completa en un tono cansado al cerrar sus ojos, tiene una sonrisa en sus labios, él está en paz.

Todo lo que quieroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora