Los días pasan volando y por fin llega el viernes. Salgo de clases y me dirijo hacía el mirador donde he quedado con Lara para irnos a comer a su casa.
-¿Aroa esta tarde donde vamos?- me pregunta Lara tan solo verme.
- No lo se...- hago una pequeña pausa- ¿Y si vamos al centro? -le propongo.
- Pero tía tendremos que andar hasta la estación para coger el tren.- rueda los ojos y hace una expresión de cansada con solo imaginarlo.
- Lara son solo 30 minutos, no es para tanto- pega un bufido pero al final asiente.
Cuando llegamos a su casa Lara me presenta a su familia. Durante la comida estuvimos hablando de ellos. Su familia es algo extraña, ya que digamos que el hombre de la casa apenas tiene 3 años. Su padre las abandonó hace unos años y su madre tuvo que seguir adelante sola con sus dos hijas. La mayor, Ainhoa conoció a un hombre que la preño y la dejó tirada. Así que digamos que ninguna de las tres ha tenido suerte en el amor, recordando toda la historia que tuvo Lara con Dylan...
Acabamos de comer y vamos a arreglarnos para salir hacía el centro.
Lara se pone unos jeans negros rotos con una camiseta de manga corta blanca y una chaqueta de piel. Se hace una fina raya en el ojo y se pone un pintalabios rojo, por último se peina el pelo y se lo agita.
Yo en cambio me pongo unas mallas negras y una sudadera blanca. Me hago la raya de los ojos y me pongo el mismo pintalabios que Lara. Me peinó y me agitó el pelo para que quede como a mi me gusta y lista.
Vamos andando hacia la estación y durante el camino no pasan muchas cosas interesantes. Bueno pasando por alto que un camionero nos quería subir a su camión y que tuvimos que correr. Después nos hemos encontrado a mi madre mientras estábamos fumando y casi que nos pilla, por suerte sólo nos ha echado bronca por ir por estas carreteras, por donde pasan muchos camioneros. Dice que podrían habernos raptado o algo similar «qué razón no le falta, recordando que habéis tenido que correr gracias a un camionero...» callate subconsciente.
Bueno supongamos que no soy ninguna niña buena, más bien es al contrario, deje de ser buena hace unos años después de todo lo que me paso, pero bueno eso es una larga historia...
-Aroa, ¡¿me estas escuchando?!- Joder no me he enterado de nada de lo que me ha dicho Lara.
-Si claro decias eso de... ya sabes... lo que decías- Rueda los ojos y se pone a gritar como una histérica.
-¡Decía de quedarnos por aquí la estación, parece que hoy hay mucha gente de nuestra edad!- No me había fijado en la de gente que había, es muy raro, algo estará pasando.
-No creo que sea buena idea Lara, es raro que haya tanta gente.
-Vamos Aroa no seas aburrida vayamos a ver que pasa...- soplo pero acabó asintiendo.
Nos adentramos en la multitud y allí me encuentro con un amigo nuestro del instituto que se llama Mikel Jordán.
-Aroa, Lara ¿que hacéis aquí?- pregunta sorprendido.
-Íbamos a ir al centro pero al ver a tanta gente hemos decidido quedarnos- le responde Lara entusiasmada.
-¿Mikel tu sabes porque hay tanta gente?- preguntó.
- Claro Jake va a pegar a un empollón de su instituto- Jake Grey es un playboy del instituto kings & queens nuestros institutos es como si fuesen "hermanos". Se suele juntar mucho con Dylan, Dani, Abel y los demás, por eso lo conozco y supongo que el se acuerda de mi ya que forme parte de ese grupo al estar con Dani cosa de la que me arrepiento.
Mikel no se junta mucho con ellos pero sí que se hablan y son amigos.
De repente veo que Lara está mirando fijamente en una dirección, dirijo mi mirada hacia allí en cuando veo a Abril y su grupo de amigas. Lara me mira y vuelve a mirar hacia ellas.
-Aroa que hacemos ¿nos vamos?- asiento con la cabeza pero cuando nos vamos a ir Mikel nos coje de las muñecas y nos obliga a quedarnos con el.
- Quedaros un rato, hay mucha gente, no os van a ver.- Asentimos pero primero le hacemos prometernos que después de que acabe la pelea, que no nos viene nada de gusto ver, iremos a dar una vuelta ya que hacía mucho que no nos veíamos.
Nos adentramos un poco más en la pelea. Cuando llegamos casi al centro a base de empujones y codazos, veo todo el suelo manchado de sangre y a Jake encima de ese pobre niño pegándole puñetazos. De repente sin saber porque mis pies empiezan a correr hacia allí. Cojo a Jake de los hombros y intento que se aparte de ese niño, Lara viene ayudarme pero tiene mucha fuerza y no podemos con el. Hasta que de repente se da la vuelta enfadado y intenta pegarnos, pero nose como le cojo de la muñeca y se la apartó.
-¡Deja de pegar a este pobre niño no ves que lo vas a matar!- las palabras salen de mi boca sin que yo lo pueda evitar.
-Nena, tu no me dices que tengo que hacer.- Y le sale una pequeña sonrisa de su cara.
-A mi no me llames nena, idiota.
-Perdona eso ya mejor lo dejo para cuando te tenga en mi cama.- Suelta una carcajada y sin saber porque me abalanzó sobre él para darle la paliza de su vida. De repente notó a alguien cojiendome de la cintura mientras Mikel y otros niños me separan de Jake.
Cuando consiguen separarme, Lara me tranquiliza y vamos a dar esa vuelta que nos había prometido Mikel.
Al llegar a casa me tumbo en la cama y cojo mi móvil, revisó las notificaciones y me doy cuenta de que tengo un mensaje de un número desconocido.
Número Desconocido: Que fuerza tienes nena!
Leo el mensaje y me doy cuenta de que sólo puede ser Jake ¿quien más me iba a llamar nena sino? Le contestó:
Yo: ¡piérdete Jake!
Número Desconocido: Vente mañana conmigo a dar una vuelta, nena.
Yo: ¿Porque tendría que ir? Te recuerdo que a mi no me vas a meter en tu cama como a las demás.
Número Desconocido: Te esperó a las 4 p.m. en el starbucks.
Perfecto y ¿ahora qué hago? no tengo planes para mañana, pero pasar la tarde con un playboy que lo único que querrá hacer será meterme en su cama no es que sea mejor idea. Aunque alomejor no quiere meterme en su cama y sólo quiere que seamos amigos «eso suena estúpido, es Jake Grey» mi subconsciente tiene razón suena estúpido pero ¿porque no darle una oportunidad?
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Wounds that change
Teen FictionTodo el mundo ha tenido un primer amor. Ese amor que te ilusiona y no te hace pensar en nada más. Ese amor que te hace perder la cabeza y acaba rompiéndote el corazón. Ese amor del que siempre se aprende. Aroa Lewis, una chica con carácter, fría, or...