Problemas con el amor

Dificultades

Xanxus miraba incómodo al furioso tutor de Sawada, habían ingresado al hogar de los Hibari hace ya varias, muchas, horas y lo único que habían estado haciendo los viejos amigos era recordar los viejos tiempos.

–Jaque mate–El familiar de Kyōya miro avergonzado al hombre de fedora frente a él.

–¡Estas son damas chinas! ¿¡Cómo es posible que siempre puedas ganarme en esto si ni siquiera sabes a qué estamos jugando!?–Reborn miro furioso al chino, la única fémina en la habitación no pudo evitar reírse.

–No puedo creer que sigas enojado por el hecho de que Fon te haya ganado en una partida de ese juego tonto en el jardín de niños–La burla de Viper irrito aun más al mayor de los azabaches.

–¡Yo no puedo creer que te hayas casado con él! ¿Olvidas que pasaste la mitad de nuestra infancia buscando la maneras de dejar a ese tonto en ridículo?–El pacifista en la sala se sintió extrañamente olvidado.

El padre de Kyōya suspiro cansado, si en la mañana alguien le hubiese dicho que recibiría la visita de uno de sus compañeros del jardín de infantes dispuesto a buscar venganza debido a que perdió en un juego del que ninguno de los dos sabía bien de que trataba, aún en la actualidad, y que sería nada más y nada menos que un compañero de trabajo de su esposa, y suyo también, que por cierto, según Viper, le debía dinero, definitivamente se hubiese suicidado, no era la primera vez que algo así le pasaba, eran muchas las veces y ese había sido uno de los motivos por los cuales había mandando a su querido y adorado hijo a china ya que en cada encuentro con Reborn el hombre destrozaba la casa después de diez derrotas seguidas.

–Lo dice que idiota que ha pasado su vida entera enamorado de una mujer que se caso con otro y ya tiene una hija, deberías dejar de pensar en tonterías y pagarme de una vez–El espartano en la sala miro confundido a la mujer junto al chino.

–¿Cuál dinero? Te dije que tarde o temprano empezarías a delirar si te obsesionabas con el dinero–La italiana decidió calmarse, no quería empezar una guerra en su propia casa, había mucho dinero en juego si empezaba a pelearse con aquel tonto de patillas.

–Más importante que todo esto, ¿Se puede saber a qué has venido? No creo que sólo haya sido para recordar viejos tiempos, si fuese eso no vendrías acompañado–La intervención del experto en kempo le recordó al especialista en torturas espartanas su objetivo.

–Quiero hablar sobre su Kyōya y mi Tsuna–La pareja miro con extrañeza al mayor, la primera y última vez que vieron al castaño el niño tenía alrededor de ocho años y se había caído de cabeza por un barranco, a saber qué le estaba haciendo Reborn a esa pobre criatura.

Las clases habían terminado, por fin, y a pesar de querer ir con su amada novia Ryohei tenía otros planes, ya le había avisado a Kyoko para que le inventara una excusa a Hana de por qué él no podría estar con ella ese día, aunque Sasagawa sentía que la mitad su alma, el lado que no era extremo sino cursi y amoroso, se iba con ella, todo muy melodramático, ignorando ese sentimiento de soledad y desamparo que le dejaba el estar sin su amada Kurokawa espero pacientemente a que cierta chica, enamorada de él aunque ni idea tenía el pobre.

–Lamento hacerte esperar, Ryo-kun–La chica se sonrojo y miro nerviosa al chico de sus sueños, esos que nunca se harían realidad.

–Ya estas aquí así que no importa, sera mejor que nos vayamos de una vez antes de que alguien nos vea y sospeche algo–Comentó el boxeador, ignorando la manera en que esa chica lo había llamado y la mirada maliciosa que había lanzado en dirección a quién sabe dónde.

Los estudiantes de medicina se perdieron entre la multitud de personas que salían de la universidad, Chrome suspiro pesadamente al darse cuenta de lo que su querida amiga azabache había presenciado, la hermana de Mukuro sabía perfectamente lo que el hermano de Kyoko planeaba, sin embargo también era lo suficientemente observadora para notar las malas intenciones de aquella chica, "Para completar tu objetivo en esta clase de circunstancias vas a necesitar mucha, demasiada, suerte, Ryohei-san".

–Voy a seguirlos y cuando estén en una zona aislada o poco transcurrida voy a matarlos–La azabache sintió la ira, y los celos, correr por todo su organismo.

–Kurokawa-san, lo mejor sera que Regresemos a casa no creo que seguirlos sea una buena idea, además de que estoy segura de que Ryohei-san tendrá un buen motivo para todo esto–El comentario de la más joven le dio más ideas locas a la furiosa novia.

–Tienes razón, primero debo buscar en internet cuál es la manera más dolorosa de castrar a un hombre y tengo que volver a verme school days, esta vez prestare más atención a la manera en que la tipa loca mata a la zorra–Murmuró la mejor amiga de Kyoko mientras se alejaba.

Nagi la miro irse, estaba un poco preocupada por la salud mental de la azabache, sin embargo no podía hacer nada por ella ya que le había prometido a los hermanos Sasagawa que no diría nada sobre los planes del hermano mayor, siempre y cuando ellos se aseguraran de que Byakuran-san siga vivo y onii-sama fuera de prisión.

–A veces es difícil ser tan buena persona–La pelivioleta suspiro cansada antes de decidir asegurarse de que Hana no siguiera a los otros dos.

El castaño miro sonrojado a su novio, quien por cierto lo tenía acorralado contra la pared en un lugar lejos de la vista de los demás, el azabache por su parte sonreía burlón ante la mirada tímida que le dedicaba su amado omnívoro.

–Hibari-san estoy seguro de que Reborn esta en casa y no creo que sea buena idea que usted vaya por unos días–"Ya que quiero que sigas vivo, o por lo menos no castrado"Pensó el menor.

–Si no quieres que te acompañe esta bien, por hoy al menos, sin embargo no te iras tan fácilmente–El rostro de Sawada enrojeció aun más al entender las intenciones de su novio.

Kyōya no perdió el tiempo y sin dejar que Tsunayoshi pudiese quejarse o argumentar algo, levanto el rostro del menor y acorto la distancia entre sus labios, el beso fue lento, casi tierno,  Tsuna no tardo demasiado en corresponderle y, para sorpresa y diversión de Hibari, intentar profundizarlo.

Mientras la acaramelada pareja se besaba como si se les fuera la vida en ello, para envidia de muchas, los padres, tutor y primo, de ambos se miraban entre ellos con expresiones serias.

–Pues la verdad a mi no me importa, mientras Kyōya sea feliz yo lo apoyare en todo–Fon sonrió con ternura al pensar en su adorado niño y en el tierno hijo de Reborn.

–A mi en realidad no me interesa demasiado, ya tienen veinte y diecinueve años ¿No? A mi parecer son lo suficientemente adultos como para tomar sus propias decisiones–Opinó Viper divertida por las expresiones furiosas de los invitados.

El instinto asesino de ambos conocidos de Tsuna se había activado hace pocos momentos, algo les decía que con el apoyo de los padres del mayor tendrían difícil la tarea de cuidar y proteger la pureza del menor, por un momento ambos recordaron a cierto rubio, y el temor de que su pequeño esclavo terminara como él los horrorizó, después de todo era bien sabido que Giotto Vongola era todo un pervertido cuando se trataba de su novio.
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Lamento no haber actualizado ayer, surgieron algunas cosas (mentira sólo me distraje viendo pendejadas en youtube) y por eso no pude escribir :v pero bueno, ¡No me arrepiento de nada! Conocí la belleza del Karmagisa ❤ (y otras parejas como el SaruMi) fin del comunicado(?