Soumis

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Los hombres de Hawk Moth aparecieron instantáneamente después de pronunciar mis sumisas palabras, me cubrieron burdamente mi rostro con una bolsa de tela, patearon mi estomago, provocaron que me sofocara , no podía respirar, ya estaba demasiado enfadado de la situación, pensaba si realmente saldría vivo de esta o si tan sólo sería la carnada para un pez más gordo.

Moribundo, me cargaron hasta la entrada, se escuchaba el ambiente acompañado del sonido de las aves, y cómo pisaban hojas secas. Presentí que nos encontrábamos según mis sentidos lejos de la ciudad, y así fue. El auto se detuvo, me bajaron y el guardia que custodiaba de mí me quitó la bolsa, estábamos en un bosque con árboles verdes y frondosos, para ser más claro, en medio de la nada.
El clima era sumamente fresco, demasiado placentero para cualquiera, desgraciadamente la situación ameritaba que descartara por completo de mi mente el disfrutar el ambiente. No tardó mucho en llegar otro automóvil, era un Chrysler 300c con vidrios polarizados.
-Mucho cuidado con abrir la boca, niño. Ellos no saben sobre la identidad de Hawk Moth así que, una sola palabra y estás frito. - Amenazó mi opresor, por mi parte, me quedé callado observando a las personas que bajaban del vehículo.

Se acercaron en unos instantes  un joven alto con traje gris, tenía pecas, ojos verdes y expresivos, piel pálida y cabello rojizo y una mujer de tez canela, cabello castaño, ojos grisáceos, portaba una falda gris, un saco rojo y camisa blanca acompañado de un pañuelo negro.
-¡Angus! - gritó la mujer - Así que esta es la emergencia de la cual me avisaste. Dios mio, pobre chico. ¿Qué te sucedió?  ¿Cómo te llamas?  - exclamó la mujer preocupada mientras se dirigía a mi.
-Y-yo...
-Lo asaltaron y violentaron contra él en la ruta E54, estaba inconsciente cuando lo encontramos, no recuerda más que su nombre, edad y pocas cosas de su familia... Al parecer no es de aquí. - No me dejó hablar Angus, me arrebató rápidamente la palabra fingiendo estar preocupado, noté que indirectamente me había dado indicaciones sobre qué decir si me preguntaban algo.  El era un hombre de piel blanca, cabello oscuro, algo grande con espalda muy ancha, llevaba un traje negro.
Actuaba demasiado bien, pero me irritaba y me intrigaba el saber por qué le ocultaba a la mujer y al joven lo que sucedió.

-Ya veo, es una pena lo que estás pasando, chico. Mi nombre es Noelia Brodeur, estoy aquí para ayudarte. El joven es mi acompañante, Mathias Bonnet. - Se presentó de una forma demasiado solidaria brindándome una sonrisa sincera.

- U-un gusto. - Me limité a hablar, la mirada de Angus me vigilaba cautelosamente.

- Además de acompañante soy paramédico - añadió el joven pelirrojo. - Déjame checar tus signos vitales y en la condición en la cual te encuentras, ¿cuál es tu nombre?
-Me llamo Marino Cheng. - Dije con la vista pérdida al vacío.

El chico sacó un maletín del vehículo,  sacó su baumanometro para medir mi presión, me encontraba en el rango normal. Después, su estetoscopio, escuchó mi respiración y mi ritmo cardíaco. Tomó su otoscopio con el cuál revisó mis oídos, después sacó un abatelenguas y con la lámpara del otoscopio inspeccionó mi cavidad bucal  para por fin finalizar con el chequeo con mis ojos.

Guardó sus instrumentos para después sacar material de curación. Su mirada se postró en mis heridas. 
-¿Podrías quitarte la camisa? Necesito ver la gravedad de los golpes. - Preguntó seriamente el oji-verde al momento de ponerse guantes de látex.
Noelia al escuchar eso, se apartó un poco junto con Angus, los cuales podía  escuchar esporádicamente que hablaban cosas al parecer de su verdadero trabajo.

Procedí a quitar mi camisa negra, (porque negra tengo el alma XD ok no la canción no va, ejem sigo.*)
tomé  la parte superior de mi playera blanca con manchas de sangre y al levantar mis brazos para deshacerme de ella, el dolor en mis omóplatos se intensificó lo cual provocó que me quejara.

-Por lo visto también haces mucho ejercicio eh Marino. Muy bien. - Exclamó el pelirrojo, ese comentario no lo veía venir. Rompió el hielo de manera radical haciendo que soltara una leve risa mientras rascaba mi nuca, ahora me sentiría algo incomodo al dejarme revisar. Caminó hacia mi espalda, al observarla escuché que musitó "maldición" con un tono preocupado.
-Dime, ¿recuerdas si muchas chicas van tras de ti con ese abdomen y esos bíceps tan bien marcados? Estoy seguro que las vuelves locas - Seguía insistiendo. Este chico estaba sacando dudas en mi, intenté voltear a verlo con demasiado asombro, pero en un abrir y cerrar de ojos este se encontraba curando las heridas más grandes que sentía en mi espalda, grite de dolor.
-¡¿Qué rayos me estás poniendo?! - voltee alterado.
-Isodine, te va a arder un poco, por eso te estaba distrayendo. Necesito cauterizar y desinfectar todas las heridas de tu cuerpo, noté que las que tienes en esta parte son muy profundas, necesitas una sutura. No tengo el material suficiente para hacerlo y además este no es el lugar más adecuado. -  Se quitó los guantes y fue a guardar todo en el auto.
Me volví a poner mi ropa en mal estado, Mathias le hizo una seña a Noelia. Angus y ella se acercaron de inmediato.
- No es tan grave sin embargo el chico debe ir al hospital, necesita unas cuantas puntadas. Vamos, Noelia.  - Dijo con una sonrisa.
-De acuerdo, Mathias. Angus, deja todo en mis manos.
Angus me observó con una mirada fulminante, me llamó para que fuera por mis cosas que se encontraban en su auto. Caminamos sólo los dos, abrió la cajuela, sacó mi mochila y una bolsa de papel.
-Aquí tienes tus juguetes y tú mascota, el jefe estará al pendiente de lo que hagas. Noelia se encargará de ayudarte en tu estancia ahí. Otra cosa, ten este celular,el tuyo no funciona en este sitio y por última vez te lo repito, una sola palabra sobre Hawk Moth y estás muerto.
-Ya entendí, bravucón. - Dije sarcásticamente. - Estuvo a punto de tomarme por el cuello sin embargo se percató de que Mathias y Noelia nos observaban. Volvió a tener compostura, inhaló y dijo.
-Tienes todo el tiempo del mundo para lograr el pedido, pero que no pase de 4 meses...
-Es mucho tiempo.
-Deberías agradecerlo, en cuanto el plazo se cumpla te matarán, niño. - Echó una carcajada.
Le arrebaté mis cosas, lo vi con demasiado odio, cerró la cajuela y fuimos al otro auto.
-El muchacho está listo.
-Vamos, Marino. - Dijo Mathias sonriendo.
Nos subimos al auto, Noelia al volante, Mathias de copiloto y yo atrás.
Noelia encendió el motor y fuimos rumbo a algún hospital en París.
-Marino, ¿Qué es lo que recuerdas? - Preguntó la mujer...
-Sólo sé que vengo de China, recuerdo a mis padres, amigos y nada más...  - Dije cortante.
-Te quedarás en casa conmigo, seré como tu Angel guardián en Francia. Pagaré tus gastos el tiempo que estés aquí y...
-Disculpe que la interrumpa, agradezco de antemano su hospitalidad pero preferiría trabajar para alquilar mi propia habitación, no quisiera abusar de su amabilidad.
-Marino, pero no estás en buen estado.
-Por favor, insisto.  Más bien si hay posibilidades de que me ayuden a conseguir un trabajo en el cual pueda estar sin necesidad de tantos papeles ya sabe - titubie - p-por lo que me sucedió y un lugar dónde estar sería demasiado...
-Ya veo, el honor en tu casa sigue muy marcado ¿no? - Me veía de reojo por el retrovisor - Eres un buen chico. Está bien, sé dónde puedes quedarte y también en dónde puedes trabajar. 
-Gracias señora Brodeur.
El camino se inundó de un gran silencio hasta llegar al hospital...

Hola!!! Les prometo que ya casi viene lo meloso jajajajajaja xD espero no se vayan aburriendo!!!  Gracias por seguir, no olviden votar please please please. Hasta aquí mi reporte Joaquín...


"Coincidence".  ML Marino x Marinette Donde viven las historias. Descúbrelo ahora