Bonne Nuit

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Abrí mis ojos como platos, estaba sorprendida ¿acaso era posible viajar por las dimensiones o realmente era parte de una broma? Tenia cierta incredulidad sin embargo traté de confiar por lo que Tikki me había dicho de él.
No porta un aura negativa.
Me acerqué a él y le extendí la mano de forma amistosa.
-Es un gusto Lordbug. Por cierto, gracias por ayudarme.

- No hay por qué, somos del mismo equipo a propósito, el gusto es mio, Ladybug. He escuchado mucho de ti. - Respondió el joven con una sonrisa, hizo que me ruborizara un poco.
-D-disculpa, me entró una duda. ¿Cómo has hecho para cruzar las diferentes dimensiones? - el silencio se apoderó por un segundo.
-Bueno,  yo...

-Su frase fue interrumpida, alguien gritó mi nombre. A lo lejos, vi como Chat Noir corría a mi encuentro, se le veía preocupado así que al llegar me estrujó con un abrazo.
-Siento tanto el haberte dejado sola, my lady. No volverá a pasar lo prometo.
-Chat no te preocupes, estoy bien además me ayudaron, te presento a Lordbug.  - Me separé de aquel abrazo que correspondí a medias. Los presenté sin aire de preocupación pero por lo visto a Chat Noir no le agradó la idea...

-¡¿Otra vez tú?!  - Gritó alterado.
-Te recuerdo que no es mi asunto el que te moleste mi presencia. - Respondió Lordbug en tono serio y con una sonrisa.
-Ya te dije que Ladybug y yo no necesitamos chalanes. - El felino me tomó del brazo y me jaló para que caminara con él alejándonos del chico peli azul. Me negué a seguirle el juego, se estaba portando un tanto infantil.
-Chat Noir, ya basta.

-Por lo menos no la dejé sola en medio del peligro como tu. - Añadió el ojiazul con tono sarcástico mientras le guiñaba un ojo. Chat Noir se irritó con el comentario, se veía muy alterado, ¿acaso estaba celoso?. En un movimiento rápido se dirigió hacia donde se encontraba Lordbug, lo vi decidido a comenzar una pelea sin sentido. Cuando iba a dar su primer golpe, rápidamente sujeté su mano con mi yoyo, jalé de él bruscamente para detenerlo, el ojiazul por su parte, se dispuso a observarlo sin moverse con brazos cruzados.

-No sé desde cuándo se conocen ni sé qué conflictos hay entre ustedes dos pero seré honesta, no voy a ponerme del lado ni de uno ni de otro. Por mi parte, Lordbug eres bienvenido en el equipo. En lo que pueda ayudar con tu estancia aquí, sabes que me tienes.
Sin embargo no soporto los buscapleitos.  ¿Entendido?
Chat, ¿Qué te sucede?

-¿Por qué le ofreces plena confianza a un extraño, no sabes de dónde viene, si es parte de algún plan de Hawk Moth o acaso te gusta? - Me reclamó el rubio.
-Chat, Lo único que ha hecho este chico fue ayudarme. No está buscando problemas, si fuera así es obvio que ya nos hubiera puesto una trampa, Hawk Moth no es de los que saben esperar...

Respondí evitando la irritante pregunta del felino. Mi Miraculous había sonado, era hora de que me destransformara.
-Bueno, esta referee debe retirarse, en cualquier momento me voy a destransformar.

Tomé mi yo yo y lo lance hacia los tejados, me alejé lo más pronto que pude del museo. Al llegar a la calle de mi casa, observé desde arriba como los oficiales se encargaban de reincorporar a las personas en la ciudad.
Bajé por un callejón y me destransformé, comencé a buscar a mis padres pero como no tuve éxito, los esperé a fuera de la panadería.
Pasaron quince minutos y escuché a mi madre.
-Marinette estás bien, estábamos preocupados porque te fuiste y nos separaron de albergue. -Exclamó aliviada.
-Ah,  s-si mamá, me tocó estar con o-otras personas pero, me da gusto de que ya todo haya terminado. Si sucede otra vez prometo no alejarme. - Dije nerviosa, esperando algún regaño pero por suerte sólo me abrazaron.

Entramos a casa, subí a mi habitación, me alisté para acostarme.
-Vaya noche Marinette.
-Si Tikki, fue muy agotadora ya es la una de la mañana y todo París en movimiento. - Dije al haber terminado y  tirarme en mi cama mientras veía la pantalla de mi celular.
-Oh mira, un mensaje de Alya. - añadí 
-¿Qué dice? ¿Estuvo en el ataque?
-No, me pregunta que cómo estoy. Sólo me está saludando.
-Oh ya veo...
-Mañana le contesto, por ahora es hora de dormir.
-Descansa Marinette.
************************************

Iba corriendo hacia algún callejón, ya no quedaba tiempo para que mi verdadera identidad fuera revelada así que opté por llegar al departamento caminando al fin y al cabo, no estaba lejos.

-Son demasiado notorios los celos de Chat Noir hacia ti ¿no crees? -  expresó Ikke mientras reía.
-Quizás su sexto sentido no le falla mucho, de igual modo debo dañarla tarde o temprano.
- respondí seriamente.
-¿La enamorarás?  Oye, pero ¿qué pasará con la chica que te gustó de la tienda?

Me sonrojé con aquel comentario.
-¡Shh! No me digas de ella. Te respondo al llegar  a casa.
Ikke se escondió en mi chamarra. Comencé a correr entre las calles, a lo lejos visualicé nuestro departamento. Abrí la puerta y subí las escaleras hasta llegar al piso que nos corresponde a Mathias y a mi.
-Hey tú ¿en dónde andabas?  No te vi en el albergue. - Dijo Mathias con tono de preocupación desde un sofá.
-Estoy bien, papá. - Le respondí riendo mientras me acercaba de pie hacia donde estaba. Mathias por su parte me aventó una almohada que se encontraba a su alcance, se recostó en el sillón y comenzó a reír también.
-Eres un pésimo hijo, mal agradecido todavía que me preocupo por ti y tu burlándote. - Comenzó a dramatizar, si algo tenia este chico que me agradaba seguro era que es  que  demasiado bromista y sabia seguir la corriente en cualquier situación por muy tonta que fuera y al mismo tiempo ser una persona madura y solidaria. Noelia tenia razón, en tan poco tiempo nos hicimos buenos amigos.

-Mañana no saldrás, por un par de asuntos.  - Dijo en un tono muy serio.
-Eh?  Ya te centraste en tu papel o por? - La habitación quedó en silencio por unos minutos.
-Nah, sólo bromeo. Mañana tienes el día libre en L'emporium.
- Menos mal.  Mañana libre para jugar videojuegos - Dije en tono victorioso mientras le frotaba el cabello.

-Vale,  ya. Ah es cierto, también mañana debemos ir a que te retiren las puntadas es probable que la cicatrización ya esté avanzando mejor.

-Esta bien Matt. Hey, iré a dormir. Estuvo muy agitado este día.

-Si, sobre todo porque en la tarde se te salían los ojos como agua con una clienta y al terminar tu turno me diste tu carnet ¿Eso qué, Marino? Parecías un tonto que acababa de comenzar a trabajar ese día - Me dijo demasiado divertido y con unas cuantas carcajadas.

Tomé la almohada y se la aventé de regreso. Estaba muy rojo como tomate en esos instantes, no pude evitar reírme y sentir un mariposeo al recordar a aquella chica.

-No te conté que antes de llegar a casa me dispuse a buscarla. - añadí mientras me sentaba en otro sillón.
- Tuve mucha suerte, la encontré sola y estaba mojada. Le puse mi abrigo en los hombros, hubieras visto su rostro. - terminé de decir con una cara de idiota.

-No veo el suyo pero viendo el tuyo estoy seguro que hubiera pensado que eres un acosador, yo en su lugar te hubiera dado un bolsazo y hubiera corrido en busca del primer policía o a casa. Cheng, no puede ser te enamoraste en un día. - Reprochó al final el pelirrojo de manera divertida mientras se pegaba con la mano en el rostro.

-¿Tú crees? ¿Eso suele pasar? - pregunté de manera tranquila, apoyé mis codos en las piernas y mi cabeza hacia abajo. Mathias observó que ya no estaba jugando, se sentó en el sillón, se recargo en el respaldo y subió un pie arriba de su rodilla tratando de adoptar una posición cómoda.

- No es que suela pasar muy a menudo pero...  Suele pasar. Algo que me agrada de ti es que percibo que aún eres muy noble ante esas emociones. Estoy seguro que si le echas ganas con esa chica, te corresponderá.

-No sé ni en dónde vive...

-Algún día la volverás a ver, estoy seguro. Sabe en dónde trabajas además tiene tu abrigo.

- El abrigo es lo de menos ¿Y si va mañana y no estoy?

-Yo me encargo de ello.

-Gracias Matt.

-Bueno,  basta de pláticas motivaconales y de cosas cursis que yo mañana si trabajo. - Reprochó de juego mientras se levantaba.
-Buenas noches - respondí para caminar hacia mi habitación.
Al cerrar la puerta Ikke salió.
-¿Ya no ha mandado más mensajes Angus?
-No, sólo el de que era mi oportunidad para aliarme con Ladybug y vencer a Temble-terre blah blah. Ah y su estúpida amenaza. Prefiero que no mande nada...
-No te veo muy interesado por hablarle a tu contraparte.
-Honestamente no, pero intentaré cambiar mi actitud. Mañana iré a nuestra casa bueno, su casa y ver cómo es ella sin la máscara.
-Quizás debas dejar de papalotear con aquella niña y enfocarte con Ladybug, aunque no queramos...

Listo ^^

"Coincidence".  ML Marino x Marinette Donde viven las historias. Descúbrelo ahora