PARTE 17 "El encuentro de "Ella" y María"

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Entra al comedor y Andrés está sentado, su cabeza apoyada en un brazo estirado sobre la mesa... Parece dormido pero esta exhausto por el trajín de la huida del hospital y el arrastrar el televisor y todos los bártulos acumulados por los eternos 20 días en hospital. "Ella" lo mira fijamente por unos minutos, su madre y hermana la observan expectantes...

- Hola. . -Dice "Ella"

Andrés la mira sin contestarle, desafiante esperando un sermón.

- Sabes las consecuencias de lo que hiciste no..? –Pregunta "Ella" sin dejar de mirarlo fríamente.

- Si. –Contesta secamente Andrés.

- Sabes que no podes volver al hospital...?

- Sí. No voy a volver a esa mierda!! – Contesta el con un tono más elevado.

- Bien... que pensás hacer...? - Interroga en un tono seco.

- No voy a volver a esa mierda!! Voy a ir al hospital de Guernica...

- Ajam... Cuando...?

- En unos días. Quiero estar tranquilo y después voy. - Contesta Andrés pensando tener todo controlado al no haber reclamos.

-EN UNOS DIAS!!!!! Jajajajajajaja vos no tenes ni la más puta idea de lo que te va a pasar dentro de unos días....? - Contesta "Ella" elevando la vos y con un tono irónico.

-Sí. Se lo que me va a pasar!! – grita enojado.

-Entonces? Vas a tirar a la mierda todo el esfuerzo que tuviste, que tuvimos!! para estar unos días acá tirado en una cama sin medicación?? Vos sos pelotudo??

- DIJE QUE VOY A ESTAR UNOS DIAS Y VOY!!!! - Grita enfurecido.

Un silencio eterno se hizo entre ambos.. Solange y su madre estaban expectantes pero nada sucedió.

- Bien... -dijo "Ella" – Bien... vamos a esperar unos días... Es tu vida, es tu decisión... Pero sabelo! Puede ser que no pasen taaaantos días...! Sin medicamentos, los dolores van a volver... y puede ser, sea tarde.

Sin mediar palabras se dio media vuelta y salió por donde entro. Bajando las escaleras ve a Solange y a su madre detrás de sí.

-Avísenme cuando quiera ir al hospital. –ambas asintieron y se fue a su casa.

Explicar lo acontecido en su casa, fue todo un esfuerzo... las preguntas chocaban con la evidente irresponsabilidad del escapista y ya estaba harta de ser el abogado del diablo. Concluyo el interrogatorio con un – QUE HAGA LO QUE SE CANTEN LAS PELOTAS!!! NO ME JODAN MAS!!

Se encerró en el baño sentándose en el inodoro y con un llanto ahogado por sus manos, tapándose la boca para que no escucharan de afuera el ruido, desahogo la ira contenida... 

Luego de un largo rato, respira profundamente, se levanta mirándose fijamente al espejo... No entendía bien lo que sucedía pero el espejo reflejaba su imagen pero sentía que estaba fuera de su cuerpo... Sobresaltada dio un paso hacia atrás y percibe una voz, SU VOS, hablándole en un tono sereno...

- Estas echa mierda... - Exclamo "Ella".

- Que está pasando..? – exclama María mirando hacia todos lados.

- Nada. Digo que estas hecha mierda... - insistió "Ella".

María se toma la cabeza desconcertada y se sienta nuevamente en el inodoro.

- La puta madre!!! Me volví loca...

- No. No estás loca... Pero pronto lo vas a estar si seguís haciendo tantas boludeces... - Contesta "Ella"

- Por Dios!!! Estoy hablando sola... - Se horroriza.

- No. Estamos hablando las dos...

- Dos???? Que dos?? – Y busca a alguien más a su alrededor.

Era evidente que sería difícil poner a María al tanto de muchas cosas... y de movida ya pensaba que se estaba volviendo loca, así que la cosa empeoraba. En el afán de que esta no armara un escándalo "Ella" tomo la decisión de abrir algunas "puertas"... Y como si un aire fresco entrara por una hendija, todo comenzó a tener sentido para María. Percibía cosas que hasta hace unos momentos no comprendía y la mente se le volvió tan clara como cuando.... Si, clara como cuando Mary la conoció... Todo estaba ahí! Cada una de las presencias dormidas dentro de "la caja"... todas, Isabelita, Marisabel, Mary... Podía sentirlas a todas en un torbellino de recuerdos, de emociones y sentimientos guardados dentro de algún lugar muy escondido en "La Caja"... Pero, porque había sucedido esto? María todavía estaba confundida... Que significaba esto en realidad? Quien era la voz que había escuchado? Y de repente entendió...

 Una tristeza enorme corono el presagio de una despedida... Su "Tiempo" de existir, de ser, estaba llegando a su fin; y como una holofonia la vos de "Ella" se escuchaba dentro de "La Caja" ir y venir, como si susurrara a su oído y de pronto viajara por su cuerpo metiéndose dentro de su cerebro haciéndose una sola con su propio ser... La presencia de "Ella" la satisfacía tanto hasta el punto de sentirse completa. Y al mismo tiempo su voz la aturdía con un sin fin de palabras resonando en sus tímpanos. Esto produjo un mareo que concluyo con María revolcada en el piso del baño golpeando fuertemente su cabeza contra la puerta.

Nada dijo de lo ocurrido, solo insistió con que se había resbalado y eso fue lo que todos creyeron.

Todo siguió su curso esperando a que el escapista decidiera retomar el tratamiento, solo pasaron un par de días para que los resultados de la fatídica elección surgieran. 

Los dolores de cabeza, mareos, vómitos sobrevinieron rápidamente. Su estomago dolía horriblemente y se había inflamado de una forma alarmante como un embarazo de 8 meses... Esto indicaba que otros órganos estaban colapsando... 

 En la habitación se percibía un olor agrio, como alcohol rancio... El mismo que había en la guardia del hospital cuando trajeron aquel muchacho agonizante... El olor la transporta a ese momento, nunca había visto morir a nadie... Fue una experiencia extraña...

(Un cuerpo tirado en una camilla contigua a la de su hermano, inerte solo exhalaba e inspiraba con pausados jadeos... Cada tanto una inspiración profunda como la de un pez fuera del agua, unos ojos perdidos, opacos... Sin vida... Sus familiares entraban y salían; lo miraban... Las lágrimas caían sobre sus rostros afligidos y salían nuevamente... De pronto una última y gran exhalación... y todo acabo.)

María iba y venía de su casa a la casa materna; hablaba con Andrés, le hacia masajes en la sien el cuello y espalda... Ponía paños fríos en su cabeza y trataba de convencer al escapista de ir al hospital pero este solo respondía:

-Llévenme cuando quede inconsciente...

María ya estaba al borde del colapso cuando "Ella" tomo nuevamente el mando y la decisión fue lapidaria:

- Ya te levantas y vamos ya al hospital! – Con un tono elevado de mando.

No hubo nada que objetar... El miedo que sentía Andrés era evidente no soportaría mas dolores y seguramente seguiría consiente por muchos días más aletargando así una agonía horrenda imposible de sobrellevar...

María dejo a "Ella "con el mando y solo fue un a expectante figura tras bambalinas. Era consciente del desborde que estaba sobrepasando todos sus límites y esto la hacía desconfiar si realmente no se estaba volviendo loca... Fue así que tomo la decisión de comenzar terapia.

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