PARTE 42 "Flashes"

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El estruendo de un aluvión de granizo destrozándolo todo me vuelve a la realidad acurrucada entre Maria y la nena. Al levantarme repentinamente del sillón para ir hacia el ventanal, tropiezo con una suave manta escocesa con la que al parecer me cobijaba. Detengo mis pasos observando la manta enredada en mis pies (es la misma que estaba sobre mí cama, no sé como ah llegado acá...), deshaciéndome de esta, camino lento hacia el ventanal y va apareciendo frente a mí el parque que se ah transformado en un helado manto blanco, destrozo de hojas y ramas.

El ventanal comienza a empañarse por el contraste de temperatura al exterior que ah disminuido considerablemente por el granizo. Mientras que los primeros indicios de claridad están apareciendo dificultosos entre el encapotado cielo de un gris verdoso, solo mi reflejo en el vidrio me da la seguridad que estoy acá...

Trato de meditar sobre lo que sucedió, aún no se que causó la muerte de Andrés pero enterarme de ello (no sé porqué) me perturba terriblemente.

No sé cuanto hace que estoy en esta situación con las cinco pero no quiero voltear para cerciorarme de que están ahí todavía.
Con un suave movimiento de mis manos calientes desempaño el vidrio y dejándolas apoyadas al contacto del frio, se reconfortan en un relajante trance en el que pierdo la mirada en la nada o quizás en un todo de destrucción, sintiendo el alivio de no pensar en nada.

Un ruido extraño dentro de mi cabeza, hace que me incline bruscamente apoyando mi frente en mis manos. Mi seño se frunce y mi cuello se tensiona. Siento un "crish crak trac" dentro de mi cabeza y de repente doy cuentas que se cosas al respecto de la cinco intrusas.

- Y esto...? – Me pregunto aturdida.

Tomar conciencia de esta nueva situación hace que con un impulso violento me dé la vuelta enfrentándolas. Al verlas, un singular sentimiento de familiaridad hacia ellas me sorprende.

- Que es esto? - Me pregunto asombrada. - Como puede ser..?  -Vocifero mirándolas.

Sea como sea tengo información sobre cada una de las cinco, que de no ser por haber interactuado con estas, ignoro de que otra manera puede haberlas adquirido....

Un destello de conciencia en mi alborotado cerebro me hace percibir mi situación y en este momento no estoy segura si estoy padeciendo de algún tipo de lagunas mentales.

Muchas preguntas ya tienen respuestas, solo tengo que dirigir mi mirada a cada una y sé que le gusta y que no, sus miedos. Pero cosas como ¿quiénes son? ¿De dónde salieron? ¿Qué hacen acá? ¿QUE QUIEREEEEEN DE MI???? Chocan en mi cabeza, que como un pinball va desviándolas hacia diferentes respuestas cayendo en cráteres sin fondo...
Ahora sé que todas han vivido cosas con Andrés, unas lo aman otras lo odian...

Aturdida con toda esta nueva información me doy vuelta nuevamente hacia la ventana y la casi imperceptible claridad de un nuevo amanecer me tranquiliza bastante.
De repente una sensación ácida en mi cerebro hace que me agarre la cabeza con ambas manos frunciendo el ceño. El olor a moho en mis fosas nasales es intenso. Fue tan rápido que no pude ni procesarlo...

- Ya se quienes son ustedes....! -Digo volteándome hacía ellas nuevamente.

Las cinco se miran y un gran interrogante se abrió en el living quedando expectantes que concluyera mi relato.

-Sí. Ustedes son la de la caja. .. -Reanudo estática en el mismo lugar.

Se miran nuevamente y sonríen cómplices.

- Son las del relato de Maria en mi notebook... Porqué están acá. ..?

- Falsa alarma... - Dice "Ella" con pesar.

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