Siento que me estoy congelando. Mi boca tiembla tanto que me he mordido el labio y un hilo de sangre mancha mis dientes.
- Porque hace tanto frío acá arriba...? -Me pregunto pisando el último escalón de la escalera. Miro el indicador de temperatura del aire, marca unos 6 grados...- Pero como carajos...? - Protesto tomando el control del aire para subir la temperatura.
En el baño, tiritando me quito la ropa mojada mientras temblando abro la canilla de la bañadera. Un silencio sepulcral colma la casa. El ruido del chorro de agua se escucha retumbante como en una caverna húmeda y fría.
El baño se va perdiendo bajo un manto de vapor, mientras que la bañadera se va llenando con el agua caliente en la que me sumerjo con ansias, tratando de recuperar la temperatura de mi cuerpo sintiendo el calor del agua como agujas en mis pies y manos.
Pasan unos minutos y me siento mejor. Cerrando los ojos, exhalo un hondo suspiro dándole permiso a mis piernas y brazos a que se relajen confiadamente en el agua, respirando la humedad del blanco y espeso vapor caliente.Con los ojos cerrados, sumergida con el agua hasta el cuello, inspiró una, y otra más...
Me extraño por no sentir temor por "Ella, es más! Por minutos ni siquiera recuerdo que está en la planta baja. .. Sólo me relajo y respiro.
El sonido del agua se detiene y abro mis ojos repentinamente. Me sobresalto de ver el rostro de "Ella" entre el vapor sentada en el borde de la bañera, mirándome sin hablar.- QUE HACES?? - Pregunto en un grito. - Me queres matar de un susto?? - Prosigo bajando el tono de voz, encogiendo y abrasando las piernas quedando en posición fetal.
- Creo que tendrías que calmarte. .. - Contesta serenamente.
- CALMARME!!! COMO PUEDO CALMARME??? Con vos apareciendo a cada rato... Qué clase de fantasma trastornado sos??? Loca de mierda!!! - Grito enfurecida callando repentinamente al darme cuenta que algo extraño sucede con su rostro...Una corriente de aire frio me hace estremecer y el vapor se va disipando lentamente. Yo enmudecida observo desvanecer el vapor que deja entrever su fisonomía...
Extrañamente no puedo distinguir su rostro. . Me inquieto al darme cuenta que no recuerdo sus rasgos a pesar de que estuvimos frente a frente, pero ahora se ve como si se estuviera desvaneciendo...
- Apareciendo. ..? Fantasma...? - Pregunta asombrada. - Qué decís?? Vos... vos.... - Estalla a los gritos como si la hubiese abofeteado. - AHORA ENTIENDO... OTRA VEZ EL MISMO CHISTECITO... Esta Ferreira es una cosa seria. Mira vos...! - Queda pensativa por unos minutos.
No entiendo a que se refiere, pero no presto atención al asunto, sigo impactada por no poder distinguir su rostro a pesar de estar a unos metros de distancia.
Un chillido de la puerta que se entorna lentamente distrae mi mirada y cuando la vuelvo hacia "Ella", ya no estaba...
Asombrada me quedo acurrucada en la bañadera por unos minutos. De pronto escucho abrir y cerrar cajones en mi habitación. Los golpes de las puertas de los muebles y placares y el alboroto de cosas que golpean contra muebles y paredes.
Asustada, salgo de la bañera cubriendo mi cuerpo con una bata y mi cabeza con un toallón, calzándome unas pantuflas para no patinar con la humedad del baño.Mojada salgo al pasillo y puedo ver la luz de mi habitación encendida. Despacio secándome el rostro, lentamente paso a paso llego a la puerta.
"Ella" está sentada al pié de la cama y se levanta enérgicamente caminando de un lado a otro.
Curiosamente todo está impecable. No hay registro del caos que escuche desde el baño. Pero con solo verla puedo sentir que un volcán a punto de erupcionar está dentro de sí... Sus movimientos son compulsivos y sus pasos firmes como los de un león enjaulado, van y vienen de un lado a otro. De repente solo se frena mirándome, y como si hubiera encontrado la respuesta para calmar su agitación, solo se dirige hacia mí lentamente y pasa a mi lado casi rosándome. Tengo la sensación de que me ha atravesado. Se para frente al tocador y acaricia con sus dedos, cual ciego leyendo braille, una antigua cajita de música regalo de mi padre en mi adolescencia, la abre lentamente... La pequeña bailarina se pone de pie y con su tutu de tul rosa, comienza su torpe baile sobre el círculo de espejo rodeado de azahares y perlas al sonido del "Love Story". Juraría que puedo sentir su paz con ese suave sonido, y con un nudo se me cierra la garanta dando lugar a una extraña sensación que podría describir como un Déjà vu ... no hay palabras, solo sale de la habitación rumbo a la planta baja.Mi primer reacción es salir corriendo tras sus pasos para cerrar la puerta, pero me detengo a medio camino con resignación sabiendo que es en vano cualquier intención de obstruir su entrada... Solo entorno la puerta con el envión de mi primer reacción y vuelvo sobre mis pasos para quedar parada frente al tocador, quedo perpleja una vez más... Me quedo observando como la pequeña bailarina disminuía su movimiento circular al compás agónico del sonido que llegaba a su fin.
Lentamente con una caricia cierro la pequeña caja, sigo el movimiento por el frió mármol del tocador, y con un desliz tropiezo mi mano con un pequeño cofre de madera muy liviana tallada groseramente. Lo abro, y siento la emoción de abrir una gran puerta de madera, puedo sentir su peso en mi mano dando lugar a algo que puedo describir como "un resplandor en mi mente sin recuerdos..." y el recuerdo de esa hermosa película me dibuja una sonrisa. El cofre no contiene nada pero tiene olor raro, como a marihuana... Mis oídos en un extraño vibrar replicaban mil voces de conversaciones lejanas, de voces conocidas, pero no comprendo que dicen. .
Secándome las gotas que caen de mi cabello a mi rostro con la toalla, veo entreabierto uno de los cajones al que abro suavemente, veo objetos pero mi cerebro no encuentra registros de cómo ni cuándo llegaron ahí.
Trato de concentrarme y dejar de lado todas esas sensaciones, observando cada cosa, a las que voy revisando tratando de recordar sin resultado. Es evidente las eh dejado allí, pero cuando...? . Caramelos de miel, pastillas mentos de menta. Tomo el paquete y saco una pastilla poniéndola en mi boca, mientras saboreo el frescor, tomo un viejo reloj a cuerda con unas figuras en el dial de hombrecitos con atuendos coloridos y correa de cuero marrón sintético. Meto la mano más al fondo del cajón y saco un pequeño libro azul, lo hojeo y veo que es una biblia... Dentro de esta hay, unas estampitas de San Expedito y el Arcángel Gabriel, una tarjetita (de esas que dan en los trenes para pedir limosnas) con la imagen de un hermoso y regordete niño angelical de enormes ojos celestes, tiene una leyenda que cita: "Jesús me ama y yo también lo amo. Vive en mi corazón..." Un extraño escalofrió recorre mi cuerpo y me provoca cerrarlo inmediatamente dejando caer un pequeño papel blanco que tomo del piso, al darlo vuelta puedo ver que es una receta de un medicamento la fecha está borrosa... Su encabezado dice "HOSPITAL MUÑIZ HOTRORRINOLARINGOLOGIA"...
Un fuerte mareo acompañado de nauseas coronan mi caída con una fuerte taquicardia.
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En Terapia
RandomEn terapia es un relato basado en una historia real. María, una mujer de 48 años, entra en una crisis depresiva, tras la grave enfermedad de su hermano y decide hacer terapia. Es en terapia que descubre que ah vivido en una mentira toda su vida... ...