En Terapia

PARTE 23 "Ella" y Yo

 Saliendo de la sala de video (en la que había pasado casi una hora editando un material), encuentro en mi oficina a una mujer de espaldas.

En principio me sobresalto, y luego voy caminando hacia esta. A un par de metros se da vuelta, y una extraña  familiaridad me da una sensación de seguridad, calmando mi preocupación por encontrar una extraña en medio de mi oficina sin harberle dado entrada y sin que el portero la haya anunciado.

Miro la puerta de la oficina y esta entornada, eso justificaría su entrada a mi oficina (deduci).

- En que te puedo ayudar?? – Pregunte cruzando la oficina.

El espanto se apodero de mí al ver mi notebook sobre mi escritorio nuevamente abierta y un nuevo escrito en la pantalla.

- Vos escribiste esto??? - Le pregunte con la certeza de que me lo negaría.

- Si. – Respondió sin ninguna reserva.

No esperaba que respondiera eso. No sé que esperaba... Creo que nada. Hace meses que estoy con esta incógnita de los escritos y solo me deje llevar por la curiosidad sin ningún recaudo dedicándome a encontrar respuestas.

La invito a sentarse y doy comienzo a el interrogatorio al que esta mujer ("ELLA") accede sin cuidados.

No sé cuánto tiempo a transcurrido pero las ansias de saber mas de esta historia se apodera de mi quedando inmersa,  por no se por cuanto tiempo, en un dialogo  increíblemente ameno.. Frente a "Ella" puedo advertir con pesar que los recuerdos de los siguientes tiempos con María son fugaces. 

Sabiendo por los escritos sobre el funcionamiento de "LA CAJA", puedo comprobar que "Ella" en un acto desesperado por salvarla,  había bajado el "switch" y los recuerdos iban entrando en nebulosas.

- Es extraño... Siento que puedo escuchar los sonidos de los recuerdos como huecas burbujas saliendo a flote. .. – Expresa "Ella", viéndome deslizar los dedos sobre el teclado de mi notebook apurándome en ubicar las piezas de este rompecabezas que van saliendo a la superficie.

Me inquieta él nunca saber cómo siguió la historia de Maria y Andrés, realmente creo que "Ella" se está desvaneciendo... Se ha inmolado sabiéndose el único lazo con el pasado.

La mente de "La Caja" se va cerrando y sumergiendo en las profundidades del mar de su psiquis... Igual al mar que María visitaba año a año en sus vacaciones, en donde perdía su mirada en el infinito... Donde la línea del horizonte parecía remarcar la redondez de la tierra... Ese mar al que "Ella" comparaba con su mente... Con dos apariencias, una de superficie azul, gentil que creaba olas espumosas, envolventes. Otra profunda y oscura, enigmática, impredecible... Ahí, en esas profundidades había sumergido "Ella" el dolor, la bronca y el odio hacia esos que María amaba tanto....

Solo quedan flashes de perturbadores sucesos que no pudo borrar de "La Caja" y saldrían a flote en los siguientes tiempos como soretes hediondos...

- ¿qué paso con María...? Pregunto ansiosa

- Se fue... - Contesto "Ella" mirándome con una expresión inquietantemente serena.

- ¿solo se fue? –Pregunte

- Si. Solo se fue.

- Y.... que va a pasar con María ahora...? – Pregunte perpleja.

- ¿Cómo que va a pasar...? No va a pasar nada!! – Contesta "Ella "sonriendo.

- ... Pero... ¿Cómo es posible eso?

- No entendés nada!! – Contesta "Ella" sonriendo...

- No!! No entiendo... son tan diferentes que alguien la va extrañar... - Supongo...

- ¿Quién la va a extrañar? ¿Los hermanos? Ajajajajajajajajaja – Ríe estrepitosamente - Si para ellos es una estúpida que siempre defendió lo indefendible!!! ¿Quién más? ¿Su madre? Si esa mujer no quiere a nadie!!! NO! Perdón... Si quiere a alguien... A ella misma.... 

 Hubo un largo silencio.

- Su esposo... sus hijos.... Alguien va a notar que "se fue"...

- No... su esposo está más tranquilo así... y sus hijos... sus hijos también!

- No se... Esto es todo muy.... –Calle repentinamente y "Ella" no tardo en adivinar las palabras que contuve a flor de labios.

- ¿Que ibas a decir?? ¿Muy loco?? Jajajajajajaa estas juzgando apresurada. Podrías tener una charla con Ferreira...

- ¿Qué pasó con Ferreira?

- Nada! Solo no la vi más...

"Ella" quedó en silencio unos minutos mirando fijamente una hormiga que luchaba por cargar un palito de yerba que había dejado caer del mate al piso. Levanta la vista y sus ojos estaban enormes, brillosos y fijos como atravesándome con la mirada.

- Seguime... - Susurro

- Que está pasando...? – Respondí bajito.

- Nada, solo seguime. No te separes de mí.

El ambiente se puso extraño... Pude percibir al instante que una puerta se habría, un olor a moho lo inundo todo y solo sucedió...

Por primera vez pude ver la secuencia como si estuviera en un cine 3D, las imágenes flotaban a nuestro alrededor, creía poder tocarlas con las manos... Todo es tan alucinante como real, solo quede inmóvil mirando en silencio la escena...

La puerta del consultorio se abre dando Ferreira paso a Maria, la invita a tomar asiento frente a si dando un cortés saludo, esta busca entre barias carpetas celestes su historia clínica, la abre mecánicamente acomodando las hojas ajeadas dando paso a la monótona pregunta:

- Como anduviste esta semana..?

- Bien... - Respondía apáticamente María.

La terapia ya no estaba funcionando, y Ferreira podía advertirlo sin dificultad. Maria llegaba a las sesiones con relatos armados con hilachas de una existencia sin sentido. A estas alturas la cabeza de Maria era un pinball accionado por el delirio de una secuencia de acontecimientos fortuitos relacionados con la precaria existencia de Andrés. Ya no quedaba nada... Su psiquis estaba alterada, y su voluntad para asistir a terapia era nula...

Maria estaba al punto el desquicio y Ferreira había decidido que requería tratamiento psiquiátrico...

- Bueno... creo que vos no estás pudiendo manejar algunas situaciones... - dice Ferreira tomando el blok de recetas anotando datos personales deslizando rápidamente la lapicera... - Si te parece, te voy a dar una interconsulta con psiquiatría... y este, considerara si precisas medicación o no... El tema es que vos estás muy angustiada y eso no te está haciendo bien, es posible que con una medicación adecuada se pueda controlar y puedas sentirte mejor... ¿estás de acuerdo? – Indica Ferreira. Su vos era suave y segura, y su ( ¿estás de acuerdo?) sonó como vos de mando imposibilitando una actitud negativa.

- Está bien... - Contestó Maria.

Hasta el día de hoy no sabía cómo y en qué momento "Ella" había quedado fuera en esos tiempos, la información no tenía continuidad. Los relatos parecían recortes de diarios de un historiador de guerra. Ahora, estoy casi segura que los recuerdos de estos días los conservo Maria, no "Ella", y que simplemente esta se desconecto cuando María comenzó con su tratamiento psiquiátrico y la medicación suministrada por su psiquiatra...