-Esta pizza está deliciosa. -es nuestra tercera caja de pizza.
Louise y yo hemos devorado más que un zumo en toda su vida.-¡Otra ronda! -le hago con la mano al mesero.
Mi barriga está más hinchada que nunca.-¡Viva el desamor, y las almas perdidas! -come Louise.
-¡Vivan los que despiertan de comas, y recuperan sus vidas! -mastico sin poder más.
La gente nos mira. Y a nosotros nos vale un carajo. ¡Viva la pizza!
Puedo concluir que al lado de Louise, no importa correr el riesgo de hacer el ridículo.
Shiro aparece de la nada, asustándome.-No sabía que los seres humanos se emborrachaban con pizzas. -sonríe.
-La pizza es la mejor vía para ser feliz. -comenta Louise.
-Amén. -doy varias carcajadas.
-En nuestro mundo paralelo tenemos bebidas que pueden volver ninfómanas a las mujeres. -chilla Shiro.
Louise rompe a reír de nuevo.
-¿Puedes traerme un poco? Quisiera ver como reacciona en Vanessa.
-¡La puritana se sacaría el traje de monja! -la panza me duele. -¡Pobre Trevor!
-Trevor se vería gracioso intentando complacer a una mujer insaciable en su primera vez. -añade.
-Si usted desea, master, le consigo un poco. -me regala un guiño Shiro, y luego nos interrumpe, lanzándonos una brisa helada.
-Les tengo una misión. -agrega. -He detectado un alma en peligro. Es un niño de once años, su padre es alcohólico y golpea a su madre. Viven en el este de la ciudad.
Louise deja de comer. Yo me pongo seria. Un silencio nos invade de repente.
Se siente tan incómodo que el hambre se disipa.-¿Que vamos a hacer, master?
Me levanto, taciturna. Imagino a aquel niño. Y me recuerda a mí. Cuando mi padre se sumió en el alcohol por las muertes consecutivas. Entiendo ese sentimiento. Tanto, que llega a dolerme.
-No más impotencia. -añade Louise. -Vamos allí. Pero primero debemos tener un plan. Está claro que no esta bien. La esposa y el hijo son víctimas. Pero... ¿Por qué el padre es alcohólico? Deben haber razones.
-El salario de su trabajo es mediocre. Huelo en su mirada desprecio por lo que tiene que cargar: Un mocoso, una esposa que no trabaja, deudas y más deudas. -Shiro responde a su pregunta mirando al suelo.
Los analizo a todos.
-¿Eso lo hace un alma desagradable? -pregunta Louise.
-No. -respondo. -El padre es un alma que se ha dado por vencida. Un alma que no puede sola, que se siente impotente.
-¿Como lo sabes? -me mira Shiro.
-Porque mi alma, en algún lugar que esté, se ha sentido así.
Alzo la mirada, y me muerdo los labios.
-¿Alguna solución rápida y eficiente para los 25 días que te quedan? -pregunta Louise.
Louise ya está mas actualizado que el software de la Mega computadora del Gobierno Estadounidense para espías secretos.
No se como, pero aparte de analista, también puede enterarse de las cosas rápidamente. Tiene una mente demasiado ágil.
Aún no entiendo como sus reflejos no le alcanzaron para que quedara en coma atropellado.
Capaz que ahora, al regresar del más allá, se ha convertido en uno de esos super-humanos.
Se me eriza la piel.
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La sonrisa de la muerte.
RomansaAshley es una chica rebelde. Nunca se enamora, y lleva consigo un pasado asqueroso. No es igual a las demás. Su familia ha muerto. Ahora, se considera una nómada adolescente. La muerte quiere probarla. La sigue, la merodea, pero nunca tiene el pla...