Orígenes

Capítulo Lucas: 5.

Capítulo Lucas: 5.

20 de marzo del 2011.

Terminé de empacar mis cosas cuando he acabado de ordenar todo, Sofía estaba en el marco de la puerta observándome hacer todo por mí mismo. Ella había insistido en hacerlo pero no permitiría que hiciera más por mí, ha hecho suficiente por meses.

Después de un mes me iría a seguirle el paso a Liam, no me preocupé en ningún momento si él se iría más lejos de mí porque la verdad su pista estaba en mis manos. Sus papeles, registros en gimnasios y compras me han hecho saber dónde va cada día y que hace siempre. De alguna manera eso me ayuda a saber cada cosa de él, y agradezco mis habilidades para eso.

—No tienes que irte Lucas, sabes que puedes...

—Sofía. —La detuve, definitivamente ella no entendía nada. Y aún no le he dado alguna explicación para que lo haga. Aún no quiero que me entienda, la última vez que le dije a alguien sobre mí vida murió después.

—No quiero que te vayas Lucas. —Caminó hasta mí, la tomé por la cintura metiéndola entre mis piernas acariciando la piel desnuda de su vientre.

—No puedo quedarme, no quiero que te pase nada. —Dejé mi frente en su barriga besándola suavemente.

Sus manos se enrollaron en mi cuello apretándome a su cuerpo, suspiré y le cogí de las caderas instándola a que se sentara en mi regazo. Sus ojos azules tenían agua a punto de salir.

—Tu puedes protegerme, sé que puedes...—Susurró pegando su frente a la mía.

Negué apartándole el cabello de la cara, definitivamente no podía quedarme con ella. Le he hecho mucho daño como para continuar haciéndolo, su hermano murió por mi culpa y eso nunca me lo perdonaría. Tenía mucha razón en cuanto puedo cuidarla, pero seguirán volviendo hasta que no quede nada de ella. Hasta destruir todo lo que me rodeaba.

—Lucas te amo, no puedes dejarme. —Sollozó en mi boca.

Negué una vez más no estando de acuerdo, no puede querer a alguien como yo si no me conocía lo suficiente. Joder, nadie puede saber que existo después de saber que estaba muerto para todos.

—Alguien más me necesita Sofía, debo irme. —Besé sus labios abrazándola a mi cuerpo, sintiendo su calor por última vez.

Su rostro me miró como si estuviera fuera de lugar, como si me estuviera volviendo loco.

— ¿A...Alguien más importante que yo? —Cuestionó dolida, cabreada y todas las cosas que merecían ese sentimiento.

—Sí. —Le dije sin rodeos, no le estaba mintiendo. Si se trataba de una chica tal vez le hubiera mentido acerca de que ella era más importante que otra más, pero hablábamos de Liam. La única persona importante que se merecía que le cuidaran y estuvieran para él siempre.

Sus lágrimas se abrieron paso por sus mejillas mirándome como si me odiara, pero ya a estas alturas eso hubiera pasado si ella me pedía una explicación o insistía en que me quedara. De otra manera, si ella no me hubiera dicho una sola palabra y me hubiese dejado ir las cosas serían más fáciles.

—Mi hermano murió...

—Lo sé nena, lo sé. —Susurré enterrando mis manos en sus mejillas acercando su rostro al mío pero ella se alejaba de mí bruscamente.

—Y tú me dices que tienes que irte porque hay alguien más importante esperándote. —Se baja de mi regazo, tenía la cara roja de furia y la piel empapada de lágrimas.

—Sofía...—Me levanto para cogerla.

— ¡No! Eres un bastardo, vienes aquí y haces que me enamore de ti y de alguna manera encuentras como deshacerte de mí diciéndome que tienes a alguien más importante en otra puta ciu...

— ¡Es mi hermano! —Espeto llevándome las manos a las caderas. —La persona que me espera es mi hermano. La única persona que me ha esperado por años, la única persona que espera por mí que reviva porque piensa que estoy muerto. Es la única persona que me ha amado igual o más que tú.

Su rostro estaba desencajado cuando la miré, tenía las palmas en la boca con los ojos más rojos de lo normal.

—He intentado decirte que la persona que traje aquí era mi hermano, que no sabe que estoy vivo. Toda mi vida he estado ocultándome, corriendo de los que quieren matarme, alejándome de personas como tú porque de alguna manera son mi punto débil para deshacerse de mí. Intento explicarte mi vida, pero no puedo simplemente contarlo cuando sé el peligro que sufrirían por ello. No quiero quedarme a tu lado para protegerte de alguien que probablemente te mate, le sigo la pista a mi hermano porque es la única manera de saber que está y estará bien. Liam es la única persona que amaré aparte de...

—Lo siento. —Se acercó a través de la habitación envolviéndome en sus brazos. —No tenía idea de lo que estabas pasando, lo siento. —Susurró en mi pecho sollozando.

Cerré mis ojos con un pequeño peso sin estar encima de mí y me abracé a su cuerpo, le besé el pelo sabiendo que este sería la última vez que estaría así con ella.

—Estarás mejor sin mí aquí. No voy a molestarte para que me cocines. —Bromeé haciéndola reír, alzó su rostro al mío con los labios temblando.

—Lo dudo. —Me da una pequeña sonrisa. —No quiero despedirme para siempre.

Suspiré.

—No tiene que ser para siempre. —Bajé hasta su cara besándola.

La abracé después oliendo su aroma, me iría de aquí a seguirle el paso a Liam una vez más. No lo dejaría solo por nada del mundo sabiendo que me necesita más de lo que admite así no se dé cuenta que le sigo, en su alma había dolor, más que la última vez que le dejé.

Liam había cambiado tanto a los pasos de los años que apenas yo supe que no regresaría de nuevo, y no estaba seguro de que fuera el mismo si me ve. Va a saber que le traicioné y que no fue justo para él que le dejara solo porque sabía que jamás iba a entender sobre las personas que nos perseguían para matarnos, siempre fue lo mejor estar lejos de él para no causarle más daño del que ha vivido.

A pesar de las cosas, seguiré queriéndole porque será la única familia que hasta ahora he tenido. Liam es mi vida ahora, la razón por la que sigo vivo y me da gusto saber que siguió viviendo para luchar por su vida. Aunque ya no sea el mismo chico que dejé hace unos años.

—Te mandaré una postal. —Sofía me habló sonriéndome, su nariz estaba roja al igual que sus ojos.

—La esperaré con ansias. —Me río entre dientes besando su frente.

Aquí voy Liam.

Bueno, ¿Lo están disfrutando? porque verdad que no veo algún comentario que me diga que les está gustando. (Sin ofender a las ultimas que me comentaron me encanta que comenten así) de verdad chicas espero que les guste y me lo diga, sea o no bueno su comentario me gustaria que comenten

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